La Madín registra contaminación

NAUCALPAN, Méx., junio 23 (EL UNIVERSAL).- La Presa Madín tiene capacidad de proveer 50 millones de metros cúbicos anuales de agua; no obstante, a la fecha sólo se aprovechan 15.7 millones de metros cúbicos para abastecer a 200 mil habitantes de Naucalpan, Atizapán de Zaragoza y Tlalnepantla, el resto del caudal se va por el río Tlalnepantla y se mezcla con aguas negras que llegan al Gran Canal, señaló Eduardo Espinosa Medel, gerente operativo de la Comisión de Cuenca Presa Madín.

El plan de construir una nueva planta potabilizadora para llevar agua a Iztapalapa, propuesto en abril de 2021 por la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, que entraría en operación a mediados de este año, no presenta avances significativos, tan sólo han colocado algunos tubos que han afectado un humedal que es refugio natural de patos, dijo.

Aunque la presa es una alternativa para abastecer de agua potable al Valle de México, Espinosa señaló que este embalse enfrenta hoy severos problemas de contaminación por la descarga de más de una veintena de drenajes de desarrollos inmobiliarios, especialmente de Zona Esmeralda y Lomas Verdes, así como del pueblo Nuevo Madín, e incluso de lixiviados —jugos tóxicos que genera la basura— del relleno sanitario de Tepatlaxco, que generaron la muerte de miles de peces en 2021. La Comisión Nacional del Agua (Conagua) y los organismos de agua potable de Atizapán y Naucalpan —Sapasa y Oapas— debieron evitar que los drenajes de más de 20 desarrollos sigan descargando en la presa, pero no han concluido esa tarea. Estos drenajes y lixiviados han contaminado el agua de la presa, de acuerdo con estudios de laboratorio.

Químicos que están generando estrés oxidativo entre la población que consume esta agua, de ahí la importancia de que la actual planta potabilizadora y la que planean construir utilicen tecnologías avanzadas.