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Macron quiere conseguir la autosuficiencia en la fabricación de mascarillas

París, 31 mar (EFE).- El presidente de Francia, Emmanuel Macron, se marcó este martes el objetivo de ser autosuficiente para finales de año en la fabricación de mascarillas, que actualmente se tienen que importar en su inmensa mayoría de China, y que se han convertido en uno de los productos más buscados por la crisis del coronavirus.

"Esta crisis nos enseña que sobre ciertos bienes, productos y materiales, el carácter estratégico impone una soberanía europea, producir más sobre suelo nacional para reducir nuestra dependencia y equiparnos a largo plazo", dijo Macron, en una visita al principal fabricante de mascarillas, Kolmi-Hopen, en la región del Loira.

En lo que Macron definió como una batalla contra un "enemigo invisible", el presidente levantó el estandarte de la soberanía como necesidad imperante para salir de la crisis del coronavirus más competitivos.

En la factoría de Kolmi-Hopen, se pasará de producir 3,3 millones de mascarillas a la semana a 10 millones a finales de abril, algo que va a ser posible con la compra de nuevas máquinas "europeas" que llegarán en los próximos días.

"Quiero que de aquí a finales de año hayamos obtenido esta independencia total", subrayó, tras recordar que los hospitales necesitan ahora unos 40 millones de mascarillas a la semana.

A este fabricante de mascarillas con filtro respiratorio se le sumarán otras empresas, como Michelin o Intermarché, con lo que se aumentará la capacidad total francesa a 15 millones de mascarillas semanales a finales de abril.

Mientras aumenta la producción, Francia ha hecho pedidos por 1.000 millones de mascarillas, esencialmente a China.

Macron alabó, por otro lado, el consorcio industrial liderado por la empresa Air Liquide, para fabricar respiradores artificiales, al que se han sumado la empresa de componentes de coches Valeo, el grupo automovilístico PSA y el grupo Schneider Electric. El objetivo es entregar de aquí a mediados de mayo 10.000 respiradores a los hospitales.

Macron admitió que, antes de la crisis del COVID-19, las reservas de mascarillas eran demasiado bajas, pero que "no es momento de buscar responsables".

"Aprendemos con humildad porque esta pandemia es inédita. Los que actuamos y los que comentan deben tener humildad. No podemos juzgar el pasado con lo que sabemos hoy", defendió el mandatario galo, que criticó a quienes buscan hacer juicios mientras dura la guerra.

(c) Agencia EFE