Médico descubrió el origen del brote de viruela del mono y trató de advertirlo al mundo

Hace una semana, la OMS (Organización Mundial de la Salud) declaró el brote de la viruela del mono como “una emergencia de salud pública” tras contabilizarse más de 20.000 casos alrededor del mundo.

De acuerdo con información oficial del organismo, en África se han registrado más de 70 muertos por dicha enfermedad; dos víctimas mortales en España; y una en Brasil.

Sin embargo, a medida que la afección se propaga y comienza a preocupar a los centros de salud internacionales, han surgido algunas versiones como la del profesor de la Universidad del Delta del Níger de Nigeria, Dimie Ogoina, quien expresó sus sospechas acerca de una nueva versión de la enfermedad desde el año 2017.

El 22 de septiembre de aquel año, un paciente de tan solo 11 años de edad, arribó a su clínica porque presentaba extrañas lesiones en su piel, incluyendo llagas al interior de su boca. Tras descartar la varicela, al menor le aplicaron una prueba contra viruela del mono que fue enviada a Senegal y EE.UU; días más tarde, confirmaron que el niño padecía la enfermedad.

Se cree que el caso de ese menor fue el primer brote internacional que, al día de hoy, se ha propagado en al menos 78 países. Se trata de la primera infección en Nigeria en 38 años, y hay especulaciones de que el menor “jugaba con monos en su comunidad”, dijo Ogoina.

En los últimos años, el médico trató de advertir a la comunidad internacional acerca de estos riesgos, “pero alguien me dijo que no lo dijera”, relató a National Public Radio. Asimismo le instaron a que no difundiera que la viruela del mono puede transmitirse a través de las relaciones sexuales.

Según el experto, a partir de ese momento, médicos nigerianos redujeron la búsqueda de nuevos casos en el país. Y el virus adquirió mayor fuerza.

¿Qué es la viruela del mono?

De acuerdo con la OPS (Organización Panamericana de la Salud), la viruela es una ‘zoonosis’, es decir, esta afección se transmite de animales a seres humanos, generalmente en zonas boscosas de África central y occidental; además, las relaciones sexuales podrían tener un rol importante en el contagio.

Hasta el momento, se tiene conocimiento que el virus pertenece a la familia de la viruela, que se definen como los ‘ortopoxvirus’, según los expertos. Una de las primeras manifestaciones de esta afección son las erupciones pustulosas –grano repletos de pus– y puede tener variaciones leves e, inclusive, más graves. La OPS asegura que también podría causar la muerte.

En África, una de las zonas que han sido más afectadas por este virus, la tasa de letalidad –sobre todo en niños– es de entre 4 y 22 por ciento.

¿Cuáles son los síntomas?

Los académicos han descrito que, entre los síntomas iniciales de la viruela del mono, se encuentran la fiebre, dolores de cabeza, hinchazón, dolor de espalda, dolor muscular e, inclusive, fátiga o fátiga crónica. Inicialmente, las erupciones pustulosas pueden desarrollarse en la cara y después extenderse a todo el cuerpo, normalmente en las extremidades.

Las erupciones pueden causar mucha picazón y, al igual que la varicela, estas adquieren la forma de una costra y, finalmente, se desprenden del cuerpo. En ocasiones, estas pueden dejar cicatrices; y en los casos leves, la infección puede desaparecer entre dos y cuatro semanas después del primer brote.

Los expertos médicos recomiendan que, después de cualquier enfermedad que se suscite tras haber efectuado un viaje de placer o de negocios a otro país u otro continente, acudan rápidamente a los centros de salud de su país.