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Luis Majul: “Viernes de furia, fallido presidencial y hartazgo social”

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Si tuviéramos que resumir lo que pasó en estas últimas 24 horas lo deberíamos sintetizar así: “Viernes de furia, fallido presidencial y hartazgo social”.

Todo comenzó bien temprano con el corte en el puente Pueyrredón, del lado de Avellaneda, que incluyó trompadas, forcejeo, heridos y corridas.

Mientras esto sucedía y crecía (de hecho terminó con entre 15 y 20 mil personas, frente al Ministerio de Desarrollo Social pidiéndole al Gobierno que cumpla su promesa de pagar a los anotados en el programa “potencial trabajo” y más alimentos para los comedores), el Presidente, en un acto de presentación de unos aparatos para el tratamiento de tumores en agronomía, en el centro argentino de protonterapia, cometió el siguiente acto fallido: “Por favor, vayan y contágiense”.

Así, completó una semana inolvidable.

Después vamos a analizar por qué el Presidente dice tantas cosas…. polémicas. Lo haremos en nuestro apartado: crisis de la comunicación presidencial en pandemia.

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Mientras tanto, se empezaba a hervir el espeso caldo del hartazgo social. Con gente demorada en el medio de un tránsito de locos. Con los ánimos muy caldeados. Con cierto ritmo de vértigo, incluso, en las comunicaciones y los mensajes de celular a celular.

¿Por qué? Muy sencillo de explicar, ahora que la noche cayó: Todos estábamos esperando, con renovada ansiedad, los nuevos anuncios de las nuevas restricciones.

Pero a cambio de eso nos encontramos, por ejemplo, con la prórroga del DNU que reguló las actividades del fin de semana pasado.

Todos esperábamos novedades con un cierto consenso básico. Y en vez de eso nos encontramos, un tanto sorprendidos, con el gobernador Axel Kicillof anunciando la vuelta a las clases presenciales, en la provincia, a partir del miércoles.

Habría que preguntarse por qué, después de semejante resistencia para abrir las escuelas, Kicillof volvió sobre sus pasos. El argumento que dieron es: porque se habría logrado el objetivo de llegar a 400 casos positivos cada 100 mil habitantes.

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Casi dos horas después, y mientras la marea humana marchaba por Montes de oca desde el puente Avellaneda hasta la 9 de Julio, Horacio Rodríguez Larreta anunció su propia batería de medidas.

Las resumo aquí:

-Los estudiantes de tercero a sexto año del secundario que hasta ahora tomaban clases virtuales pasarán al sistema bimodal. Es decir: mitad virtual mitad presencial.

-A partir del lunes reabrirán los shoppings en la ciudad de Buenos Aires.

-A partir de mañana la circulación se restringirá desde las 23 a 6 de la mañana.

-Esto implicará que los gastronómicos podrán tener sus puertas abiertas al público hasta las 23 horas (siempre que atiendan afuera)

Ahora detengámonos un minuto: ¿Cómo funciona esto en la cabeza de los ciudadanos del AMBA? Como una falsa sensación, mezclada con un profundo deseo, de que está pesadilla ya está terminando.

Con el profundo deseo de que ya va siendo hora de empezar a vivir como antes de la pandemia.

Pero detengámonos de nuevo:

Todos quisiéramos que fuera así. Pero no es así. Repasemos:

-84.628 muertos desde que la pandemia comenzó y 689 decesos registrados en el día de ayer.

-4.093.090 contagiados con 26.934 en el día de ayer.

-7839 internados en camas Covid, este número que no para de crecer.

Con casi 19 millones de vacunas recibidas. Con poco mas de 16 millones de dosis aplicadas. Con primera dosis puestas casi al 22 de la población. Y con segunda dosis aplicadas al 7,06 por ciento de los ciudadanos.

Por eso nosotros te pedimos que, aunque estés cansado, te sigas cuidando. Porque todavía estamos en el medio de una tormenta, con el mar aún embravecido.

Con el capitán del barco y su tripulación un poco erráticos a la hora de marcar el rumbo. Y con sus colaboradores directos, futuros amotinados, más preocupados en acumular poder que en la salud de los pasajeros. Y con aliados circunstanciales un poquito sacados, completamente fuera de contexto.