Lo dice un estudio: Si quieres mejorar tu inglés, acostúmbrate a los subtítulos

Un estudio acaba de confirmar lo que la mayoría ya sabía o, al menos, sospechaba: que ver series, películas o programas de televisión en inglés con subtítulos ayuda a mejorara el nivel de inglés. Es una conclusión “simple”, como recogen los autores de la investigación, pero que en este caso aporta cifras y datos históricos y sociales de interés que ayudan a comprender el por qué en España la fluidez con el idioma de Shakespeare es menor que en otros países.

La versión original subtitulada contribuye a una mejora de la comprensión oral del inglés, según un estudio reciente. (Foto: Thomas Trutschel/Photothek via Getty Images)
La versión original subtitulada contribuye a una mejora de la comprensión oral del inglés, según un estudio reciente. (Foto: Thomas Trutschel/Photothek via Getty Images)

Publicado en la revista Journal of Economic Behavior and Organization y realizado por los profesores universitarios Augusto Rupérez Micola, Ainoa Aparicio Fenoll y Albert Banal-Estañol, este estudio ha analizado datos recogidos entre 2008 y 2015 en 135 países de todo el mundo y ha tomado como base el TOEFL.

Titulado ¿Tv o no Tv? El impacto de los subtítulos sobre las habilidades con el inglés, lo que hacen los autores de la investigación es tener en cuenta aspectos como el tamaño del país, el gasto en Educación, la ratio de profesores/alumno en Primaria y Secundaria o la cercanía al inglés para analizar el porqué unos estados son más proclives al uso de la versión original subtitulada que otros y cómo afecta esto a su dominio del idioma extranjero. En este caso concreto, el inglés.

Así, la conclusión a la que se llega es a que aquellos lugares donde su población está acostumbrada a no doblar las producciones extranjeras -sean estas películas, series o programas de televisión- se obtienen de media 3,4 puntos más en el TOEFL. La nota en esta prueba que mide el nivel de inglés (estadounidense) de quien la hace puede verse incrementada en hasta un 16,9% para quienes están acostumbrados a los subtítulos. Especialmente en la parte del examen destinada a evaluar la compresión oral, el conocido como listening, donde aumenta a un 19,4%.

En cuanto a la seguridad que los ciudadanos muestran a la hora de expresarse en inglés, en los países donde la versión original está normalizada un 58% se confiesa sentirse capaz. En el caso de los lugares donde se opta por la versión doblada, se reduce al 32%. En ese segundo saco es en el que entraría España, donde no hay tradición de ver las producciones extranjeras en VOSE. Aquí se dobla todo y ver una película de la categoría de las consideradas blockbuster o mainstream en su idioma original en una gran ciudad como Madrid no es tan sencillo como pueda parecer.

Los mejor situados en este sentido, donde los espectadores realmente prefieren los subtítulos, es en los países nórdicos, más habituados a la VOS. El estudio señala que 9 de cada 10 suecos, finlandeses, noruegos, daneses y habitantes de los Países Bajos prefieren “ver programas y películas extranjeras con subtítulos en lugar de dobladas”. Si esa misma pregunta se hace en España, la respuesta será 3 de cada 10. Y en Alemania, aún menos, 2 de cada 10.

¿Por qué ocurre eso? Una de las claves que apunta el estudio es la tradición. En países como Italia, España y Alemania, el doblaje está más extendido. Los investigadores se remontan unas décadas atrás y mencionan el hecho de que en estos países, con un pasado dictatorial, el doblaje se usase como una manera de ‘proteger’ la identidad nacional.

En este sentido, señalan también que la economía importa y que en su día, cuando las grandes producciones de Hollywood incorporaron el sonido y comenzaron a exportarse, solo los países más grandes pudieron pagar por el doblaje y establecer una industria en torno a él.

Mencionan los autores el caso de Alemania, España y Francia. Al mismo tiempo, hacen hincapié en el hecho de que los países más pequeños, con una población poco numerosa dentro y fuera de sus fronteras usando el mismo idioma, suelen recurrir más a los subtítulos. Se trata de una cuestión práctica y de rentabilidad. Salvo en los estados nórdicos donde doblar no es tan caro.

Estas son algunas de la conclusiones a las que llega este estudio, que señala que su importancia radica en que investigaciones previas relacionaban los distintos niveles de inglés con factores económicos y no siempre es así. Un ejemplo que lo demuestra es, dicen, Portugal y España. Dos países que comparten fronteras y con una situación económica similar. Sin embargo, en el país vecino, donde las autoridades han apostado por los subtítulos en lugar del doblaje, sus ciudadanos logran puntuaciones más altas en el TOEFL que los españoles.

El problema principal es la resistencia de la población a cambiar un modelo que lleva décadas implantado. Hacen referencia al caso de Polonia, cuando en 2008 el gobierno decidió introducir los subtítulos en su televisión y cómo encontró una fuerte oposición. Solo un 19% de la población se mostró a favor.