‘Llegamos no por nuestras banderas, sino por nuestro trabajo’

Adolfo Cerqueda, presidente electo de Cd. Nezahualcóyotl, es contundente:
prostituir la bandera LGBT+ pervierte los objetivos políticos.

Adolfo Cerqueda ha estado involucrado en la política desde niño, pues una de sus tías, así como su abuelo paterno, siempre se dedicaron a esta actividad. Hoy, tras las elecciones del pasado 6 de junio, Cerqueda es el presidente municipal electo de Ciudad Nezahualcóyotl, una de los ayuntamientos más importantes del Estado de México.

Desde hace 32 años su familia cuenta con una asociación civil mediante la cual se atiende a personas con problemas de adicciones. Esta labor implica trabajar de la mano con instituciones gubernamentales y organizaciones de la sociedad civil, y así fue como desde niño conoció los tejes y manejes de solicitar apoyos y gestionar ayudas frente a las dependencias. En pocas palabras, tocar puertas públicas y privadas.

Ya de adulto, casi al concluir la licenciatura en Ciencias Políticas y Administración Pública, realizó el servicio social en una dependencia del gobierno de su municipio. “Y es así como, desde hace 21 años, me empiezan a llamar para hacer actividad política porque veían cómo me desenvolvía”, cuenta Cerqueda en entrevista con Newsweek México. “Fue ahí, de manera formal, como empecé en la administración pública municipal. Después me fueron comisionando a distintas actividades políticas muy relacionadas con mi carrera profesional, que alternaba con mis actividades deportivas, artísticas y culturales”.

El hoy político nació hace 39 años, en junio de 1982, en Ciudad Nezahualcóyotl, “en un hospital de la colonia La Perla”. Ha vivido siempre en la colonia Benito Juárez del mismo ayuntamiento y es considerado el primer alcalde de la localidad nacido en el municipio.

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A partir del 1 de enero de 2022, cuando tome posesión, Cerqueda Rebollo tendrá en las manos la gobernanza de uno de los municipios más dinámicos. Para pronto, es el que más densidad poblacional presenta en el país: más de 1 millón 100,000 personas viven en una superficie de 64 kilómetros cuadrados, es decir, cada kilómetro de superficie alberga 17,537 personas.

Además, como presidente municipal postulado por el partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), deberá enfrentar a un monstruo político que desde hace 60 años ha dominado la entidad bajo los colores del PRI o del PRD. Asimismo, gobernará un municipio que, desde 2015, carga a cuestas con una de las etiquetas sociales más dolorosas, pues en ese año la Secretaría de Gobernación declaró Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres en la localidad. A esta se sumó, en 2019, una segunda alerta enfocada en la desaparición de niñas, adolescentes y mujeres.

“El tema de la seguridad pública es natural”, responde Cerqueda cuando se le pregunta sobre su desafío primordial como alcalde. “A pesar de que sabemos que el tema de la seguridad es nacional, en Nezahualcóyotl debemos reconocer que ha habido avances en la materia, no estamos como en otros municipios, según la propia encuesta nacional de seguridad pública. Pero seguimos teniendo robo a transeúntes, a casas-habitación, en el transporte público. Por eso tenemos que reforzar las estrategias y a nuestros policías y mitigar este tipo de delitos.

“Eso es un elemento fundamental —continúa—. Siempre he pensado que las corporaciones policiacas son como los grandes corporativos: cuando no hay buenas condiciones de trabajo, cuando no hay herramientas que necesita el trabajador, no va a poder hacerlo como se debe. Ahí tenemos que meterle muchísimo”.

“SE HA PERDIDO EL TEJIDO SOCIAL”

Más allá de lo que tiene que ver directamente con el gobierno, Cerqueda Rebollo revela que, en lo personal, una de las situaciones que más le duelen del municipio donde nació y creció es la descomposición del tejido social. “Hay de fondo un tejido social que se ha perdido”, medita. “Hablo de grandes problemas que se están dando de manera social, por ejemplo, las adicciones en el interior de los hogares y la violencia. Esto genera varios efectos de fondo, somos un municipio que tiene doble alerta de género, y si hay un agresor en casa que violenta a una mujer, seguramente también lo hace con una niña o un niño”.

En ese sentido, agrega: “También hay problemas que se dan día a día. Hoy en nuestro municipio no hay la misma cantidad de personas que antes, somos muchos más, y eso genera un conflicto de convivencia social. Es relevante decirlo porque muchas de las llamadas que recibe la policía municipal son para atender delitos, pero también, en gran medida, por conflictos sociales entre vecinos, entre propias familias y en el interior de los hogares. Eso es lo que más me duele. Creo que tenemos que humanizar, concienciar y generar una cultura cívica. Tenemos muchos grandes retos de evolución para poder decir que somos un municipio a la altura del siglo XXI”.

Adolfo Cerqueda es abiertamente homosexual. Aunque tras su triunfo electoral un gran sector social y periodístico resaltó esta característica, a él particularmente no le agrada que se le voltee a ver por su orientación sexual, pues, reflexiona, “no debemos prostituir los sectores sociales en los que nosotros nos desarrollamos porque se pervierten los objetivos”.

A partir del 1 de enero de 2022, cuando tome posesión, tendrá en las manos la gobernanza de uno de los municipios más dinámicos de México. Foto: cortesía

En ese sentido, su familia ha sido un pilar fundamental sumamente amoroso para convertirse en un hombre independiente que ha actuado desde su propia libertad. “Mi padre, totalmente abrazador y apapachador, lo primero que me dijo fue: ‘Mira, hijo, lo que tú elijas hacer en tu vida está perfecto. Eres mi gallo, eres mi orgullo’. Textualmente utilizó esas palabras: ‘Eres mi gallo, eres mi orgullo. Y que nadie te ponga la mano encima porque antes yo me le voy encima’”.

No obstante, explica, pertenecer a la comunidad LGBT+ no fue una insignia en la cual haya enfocado su campaña política: “Hoy tiene que quedar claro que estamos los que estamos y llegamos a donde hemos llegado no por nuestras banderas, sino por nuestro trabajo”.

Por ello adelanta que, como jefe del ayuntamiento, trabajará para todos los sectores más necesitados: “Haber ganado la presidencia municipal para mí es muy importante porque podremos apoyar a todos los sectores que han sido invisibilizados. Lo dije en campaña, crearemos un instituto municipal de atención a personas con alguna discapacidad, y para nuestras mujeres sobrevivientes de violencia contaremos por primera vez con un albergue. Y en nuestra dirección de derechos humanos nos esforzaremos para apoyar a la comunidad LGBT+ y a todos los sectores de la sociedad para que todos estén involucrados y se sientan parte de este gobierno”.

Si bien la pasada elección la ganó con más de 164,000 votos de los habitantes de Nezahualcóyotl, lo que equivalió al 39 por ciento de la votación, Cerqueda Rebollo revela que un apoyo fundamental en todo el proceso lo recibió de su hijo.

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“Soy papá de un preadolescente que tiene toda la madurez” relata. “Mi hijo desde chiquito siempre ha tenido claro que en la vida lo más importante es el amor, independientemente del color de piel, religión, preferencia. Es un niño que siempre, así como su papá, cuando ve que hay una injusticia se incomoda, lucha, levanta la voz y se defiende. Es parte de la dinámica que vamos dejando como legado a nuestros hijos. Por supuesto, es mi motor cada día y es por quien continúo trabajando”.

“UN ELECTORADO CONSCIENTE”

—Serás el primer alcalde de México perteneciente a la comunidad LGBT+. ¿La sociedad mexicana está madurando?

—Yo creo que es un electorado consciente que pretende tener un mejor gobierno, así quisiera decirlo. No podríamos decir que es un electorado maduro porque hay varias percepciones de lo que significa madurez en los ámbitos sociales, culturales, religiosos, y nunca acabaríamos. Creo más bien que es un electorado consciente que desea un mejor Nezahualcóyotl. La gente no estaba preocupada por si me gustaba el melón o la sandía, sino por las propuestas de gobierno que abanderamos.

—En mayo pasado, en el Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia, firmaste el Decálogo por la Diversidad Sexual. ¿Ello a qué te compromete?

—Por supuesto, a seguir visibilizando a este sector de la sociedad que en algunos lugares todavía no ha podido ser escuchado y que sus derechos sean cimentados a través de las leyes locales. Uno de mis compromisos es apoyar las causas porque, más allá de que sean individuos pertenecientes a la comunidad LGBT+, somos seres humanos con diferentes actividades y profesiones. Lo que a mí siempre me ha picado muchísimo el botón es cuando la injusticia radica en el juicio de “porque es”, “se ve” o “se dice que es”, por eso no le vamos a dar el trabajo, por eso no es digno, por eso no es digna, por eso no es merecedora o merecedor de tal circunstancia. Creo que debemos valorar a todas y a todos para generar equidad.

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—¿Cómo romper con los tabúes, prejuicios e intolerancia en la política mexicana en cuanto a la comunidad LGBT+?

—Con el trabajo. El trabajo da resultados y la gente logra identificar que somos seres humanos dedicados a trabajar y que no le faltamos el respeto a nadie. Yo en particular he venido trascendiendo, avanzando, luchando por supuesto contra muchos factores, pero luchando con crítica, con juicio, y aquí estoy. Lo que me trajo aquí es mi trabajo.

“Creo que hoy estamos en un momento histórico —concluye Cerqueda—. La gente no puede extrañar lo que no conoce, pero tampoco puede generar una diferencia ante lo que no se ha permitido conocer. Hoy nos tenemos que arriesgar a que muchas personas conozcan que hay un ‘afuera allá afuera’. Este ‘afuera allá afuera’ que no conocen no tiene nada que ver con lo que la cultura, la percepción o la caja de creencias sociales, culturales y religiosas han impuesto en esta sociedad. Estamos en un muy buen momento, y si yo puedo aportar mi granito de arena, lo voy a hacer”. N