La ley de comida rápida de California se enfrenta a un referéndum en las elecciones de 2024

Los electores de California tendrán la última palabra sobre si el Estado puede crear un consejo para establecer los salarios y las condiciones laborales de más de medio millón de trabajadores de la industria de la comida rápida.

Un referendo respaldado por la industria se clasificó oficialmente para la votación de 2024 el martes por la noche después de que la oficina del Secretario de Estado anunciara que había recibido suficientes firmas válidas. La aprobación establece un costoso enfrentamiento entre los activistas laborales y la industria de la comida rápida, con un gasto que podría alcanzar los cientos de millones de dólares.

Save Local Restaurants, la coalición que encabezó la campaña del referendo argumentó que la supervisión del consejo supondría una carga excesiva para las franquicias locales y encarecería el precio de la comida, afirmaciones que los trabajadores rechazan. El grupo recaudó más de $13 millones entre enero y septiembre del año pasado para su campaña contra el consejo.

“La FAST Act fue una solución en busca de un problema que no existía”, dijo Matt Haller, líder de la International Franchise Association, en un comunicado el martes.

La coalición Save Local Restaurants no respondió de inmediatao a una solicitud de comentarios el martes por la noche.

“No podemos permitirnos esperar otros dos años por el asiento en la mesa que ya hemos ganado”, dijo Angélica Hernández, empleada de McDonald’s en Los Ángeles, en un comunicado el martes por la noche. “Hasta que lo consigamos, nos negamos a abandonar nuestra lucha”.

El primer consejo del país regularía cualquier cadena de restaurantes con al menos 100 locales en Estados Unidos y podría fijar el salario mínimo en $22 la hora. El consejo daría voz a trabajadores como Hernández en la regulación de su industria. Empleados y activistas de los trabajadores han acusado repetidamente a las empresas de comida rápida como McDonald’s de permitir el acoso sexual y el robo de salarios, entre otras infracciones laborales.

Con el referendo en la boleta, los trabajadores de comida rápida tendrán que esperar hasta el 5 de noviembre de 2024 para saber si van a obtener los aumentos y las protecciones en el lugar de trabajo por las que han luchado en los últimos dos años desde que el proyecto de ley, conocido como AB 257 o la Ley de Recuperación FAST, fue presentado por primera vez por la entonces senadora Lorena González.

El gobernador Gavin Newsom lo convirtió en ley el Día del Trabajo del año pasado. Pero al día siguiente, los opositores presentaron una petición de referendo. Sus recolectores de firmas a sueldo reunieron más de un millón de firmas de californianos, de las cuales alrededor del 77% fueron consideradas válidas por los secretarios y registradores de los condados del estado.

Los activistas afirman que la batalla del referendo no les impedirá seguir luchando por un mejor trato a los trabajadores de la comida rápida.

“A pesar de los esfuerzos de las empresas de comida rápida para distorsionar el proceso de referendo, sabemos que los electores de California ven a través de sus trucos”, dijo Mary Kay Henry, presidenta del Sindicato Internacional de Empleados de Servicios, en un comunicado.

“Ninguna corporación es más poderosa que medio millón de trabajadores que se unen para exigir un asiento en la mesa”.