La testosterona no alivia los problemas de eyaculación: est

Por Kathryn Doyle (Reuters Health) - Un tratamiento con testosterona durante cuatro meses no alivió los problemas de eyaculación en hombres con bajos niveles de la hormona, según mostró un nuevo estudio. "Quisimos explorar si la terapia de reemplazo con testosterona sirve para tratar las disfunciones eyaculatorias de los hombres con bajos valores de testosterona en sangre", dijo el autor principal, doctor Shehzad Basaria, del Hospital de Brigham y las Mujeres en Boston. La disfunción sexual masculina generalmente tiene tres categorías: problemas con la libido, problemas con la erección y problemas de eyaculación. El autor dijo que el 10-20 por ciento de los hombres que consultan con algún tipo de disfunción sexual tienen problemas de eyaculación. El equipo de Basaria estudió a 76 hombres con síntomas de disfunción eyaculatoria, como retraso en la eyaculación, incapacidad de eyacular, volumen eyaculatorio reducido o eyaculación débil. Todos los participantes tenían bajos niveles de testosterona o "T baja" y ninguno presentaba enfermedades de la pelvis o antecedentes de cáncer prostático, utilizaba fármacos que podrían alterar la eyaculación o padecía disfunción eréctil grave, un trastorno que impide lograr o mantener la erección. Un hombre puede tener problemas para eyacular con o sin disfunción eréctil. Al azar, se aplicaron 60 miligramos (mg) diarios de una solución con testosterona al 2 por ciento o placebo. El tratamiento duró cuatro meses, en los que se les hicieron análisis de sangre periódicos para determinar los niveles de testosterona y los participantes proporcionaron muestras de semen. Además, los participantes tenían que intentar tener relaciones sexuales con su pareja cuatro veces por mes o más y registrar la actividad sexual, incluida la masturbación. Al final del estudio, el tratamiento con testosterona aumentó los niveles de la hormona en sangre al rango deseado. Pero el volumen eyaculado no creció en ninguno de los dos grupos, según publica el equipo en Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism. Los expertos detectaron una disminución de los síntomas de la disfunción eyaculatoria en ambos grupos, aunque la diferencia entre ellos no era estadísticamente significativa, por lo que podría atribuirse al azar. Antes de este primer ensayo clínico aleatorizado, la evidencia de la relación entre la "T baja" y la disfunción eyaculatoria provenía principalmente de las determinaciones realizadas en un punto en el tiempo. Por lo tanto, según comentó Basaria, nadie podía afirmar que la testosterona fuera la causa real de la enfermedad. "Este estudio indica que la deficiencia de andrógeno no es lo único que favorece la disfunción eyaculatoria en la mayoría de estos casos. Sino que es apenas una asociación", comentó el doctor Ibrahim A. Abdel-Hamid, de la Universidad de El Mansurá, en Egipto, quien no participó del estudio. FUENTE: Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism, online 9 de julio del 2015