La niña programadora de 10 años que ha dejado con la boca abierta a Google y Microsoft

Apenas tiene 10 años, pero ya es toda una celebridad. El talento de Samaira Mehta, una niña prodigio de la programación, ha captado la atención de gigantes de Silicon Valley como Microsoft (MSFT) y Google (GOOG).

La pequeña es hija de Rakesh Mehta, ingeniero en Intel (INTC), y ha estado jugando con los códigos de programación desde los seis años. A los ocho creó un juego llamado CoderBunnyz para enseñar a otros niños a programar para computadoras.

Tras crear el juego de mesa, ganó el segundo premio del Think Tank Learning’s Pitchfest en 2016, valorado en 2.500 dólares.

Por esa época en la cadena de televisión infantil Cartoon Network buscaban ejemplos inspiradores de niñas. Samaira fue invitada a un programa y cautivó a realizadores y a la audiencia.

Samaira Mehta (foto: screenshot social/Coderbunnyz)
Samaira Mehta (foto: screenshot social/Coderbunnyz)

También lanzó la iniciativa “Sí, 1.000 millones de niños pueden programar”, que facilita que los interesados donen cajas del juego a las escuelas. Luego realiza los talleres para ayudar a los niños de esas escuelas a dominar el juego.

Al inicio del actual curso escolar, 106 escuelas utilizaban su juego para enseñar a los niños a programar, según la propia Samaira.

“En el mundo hay más de 1.000 millones de niños”, dijo a Business Insider. “Hay gente dispuesta a donar cajas de Coder Bunnyz a las escuelas y a gente necesitada de todo el mundo que quiera aprender a programar”.

Y ahora, inspirada en ese éxito, ha lanzado un juego infantil, CoderMindz, que enseña cómo programar usando inteligencia artificial.

El coautor del juego es su hermano Aadit, de 6 años, quien desde luego se perfila como otro niño prodigio.

Samaira Mehta. Foto: Huffington Post
Samaira Mehta. Foto: Huffington Post

Samaira ya ha realizado más de 60 talleres en Silicon Valley con más de 2.000 niños. Así fue como conoció a Stacy Sullivan, directora de Cultura de Google.

“Después de dar varios talleres consecutivos en la sede de Google, hablamos durante una hora”, dijo la niña a Business Insider. “Ella me dijo que me lo estaba haciendo muy bien y que, una vez que acabe la universidad, puedo venir a trabajar para Google”.

Sullivan y sus compañeros en Google la escogieron como la oradora principal en una conferencia de Diversidad en Tecnología que se celebró en agosto en Google Launchpad, que busca patrocinar startups de la compañía en San Francisco.

Samaira ya ofreció otra conferencia en Microsoft y en el Festival para Niñas patrocinado por World Wide Women.

Por ese camino, en pocos años Samaira tendría trabajo garantizado en Silicon Valley. Pero no está segura de eso: quizás decida iniciar su propio negocio.