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La mayor “troleada” de la historia de Internet: dos años de vídeos virales falsos

No es muy difícil hacer un montaje y que algunas personas se lo crean, pero lo que ha hecho la productora audiovisual Woolshed es de un nivel superior: la compañía acaba de soltar todo un un bombazo al revelar que llevan dos años troleando al mundo con vídeos falsos.

Se trata de ocho vídeos espectaculares, sin aparente relación unos con otros, que se hicieron virales en su momento y fueron compartidos masivamente en las redes e incluso a través de los medios de comunicación, que han quedado en evidencia. Seguro que has visto -y compartido- algunos de ellos.

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Un hombre se pelea con un tiburón blanco y lo graba con su GoPro. Un loco se acerca temerariamente a un tornado para grabarlo. Un turista americano y uno japonés se enzarzan en una pelea con palos de selfie. Un Stormtrooper se tropieza y se cae en la premiere de Star Wars. Un rayo casi mata a una chica y la reacción del novio es hilarante. Una mujer hace snowboard sin darse cuenta de que la persigue un oso. Un león se venga de una pareja de cazadores que están a punto de hacerse una foto con otro león muerto.

Son vídeos impresionantes que causaron furor en las redes y que han sido vistos y compartidos por millones de personas en todo el mundo. Serían una muestra maravillosa de que el mundo está lleno de momentos apasionantes si no fuera por un pequeño detalle: son todos más falsos que un billete de 6 euros.

Detrás de todos ellos está una compañía de cine y audiovisuales que ha puesto tanto esfuerzo en hacerlos realistas que ha engañado a medio mundo: concretamente hablamos de 205 millones de visualizaciones en 180 países, 1.600.000 likes, más de 500.000 comentarios y cobertura en los telediarios internacionales. Casi nada.

Según los responsables, se trata de un experimento social que han llevado a cabo durante dos años con el fin de explorar el fenómeno de los vídeos virales. Afirman que no había mala intención y que todo lo aprendido servirá para aplicarlo en futuras campañas. Seguro que, después de esto, más de uno empieza a aplicarse aquello de que no hay que creerse todo lo que se ve en Internet…

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