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La inflación española se mantiene en tasa positiva en julio

MADRID (Reuters) - El Índice de los Precios de Consumo (IPC) español se mantuvo en julio en tasas interanuales positivas por segundo mes consecutivo, después de que el dato plano preliminar se revisase al alza gracias a las subidas de precios de electricidad y viajes organizados y pese a la caída de los de energía. Según datos divulgados el jueves por el Instituto Nacional de Estadística, la tasa interanual del IPC de julio se situó en el 0,1 por ciento, una décima más que el dato adelantado de julio y que supone igualar la tasa del mes anterior. Los economistas consultados por Reuters esperaban una tasa del 0,0 por ciento para julio. Los expertos consideran que la recuperación de la economía española, que el Gobierno estima que crecerá un 3,3 por ciento este año, está permitiendo alzas de precios en algunos sectores. "Es la recuperación, por un lado... Todo lo relacionado con consumo, como ocio y cultura, o los hoteles y restaurantes, está mejorando. Las empresas están pudiendo subir los precios", dijo Estefanía Ponte, directora de análisis y estrategia de BNP Paribas PI. Aunque el IPC se mantuvo en tasas negativas durante 11 meses hasta mayo alimentado por la bajada del precio del petróleo, los expertos consideran que la tendencia positiva interanual iniciada en junio ahuyenta la posibilidad de deflación en los próximos meses. "Todo apunta a que la inflación se mantendrá en niveles reducidos durante los próximos meses, aunque la incipiente recuperación de la economía española aleja el riesgo de volver a tasas negativas", dijo en un informe Sabadell. La inflación subyacente, que no tiene en cuenta los volátiles componentes de energía y alimentación, subió un 0,8 por ciento interanual, dos décimas más que en el mismo mes del año anterior. La inflación armonizada con la UE (IPCA) se situó en una tasa interanual del 0,0 por ciento interanual en julio, una décima más que el dato preliminar y repitiendo la tasa plana de junio. En términos mensuales, el IPC bajó un 0,9 por ciento en julio, mientras que el IPCA bajó un 1,5 por ciento. En una nota de prensa, el Ministerio de Economía dijo que la inflación española sigue siendo inferior a la de la zona euro, "lo que permite ganancias de competitividad de la economía, con el consiguiente efecto favorable sobre las exportaciones, la producción y el empleo". El principal sindicato español por afiliación Comisiones Obreras, dijo que la poca presión inflacionista implica que es un momento "propicio" para la subida de salarios en las empresas que puedan permitírselo. "Hay recorrido para que éstos crezcan el 1%, o por encima, en aquellas empresas que lo permitan los beneficios y los incrementos de productividad, tal y como establece el Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva 2015-2017", dijo.