Lágrimas y alegría en la breve reunión de familias coreanas separadas hace 65 años

En la imagen, familiares de Corea del Norte y el Sur enuna reunión en un recinto de Monte Kumgang, cerca de la zona desmilitarizada que separa los dos países, el 20 de agosto de 2018. Yonhap via REUTERS

Por Hyonhee Shin

SEÚL (Reuters) - Unas 90 familias de las dos Coreas se reunieron el lunes en el Norte, llorando y abrazándose después de haber sido separadas durante más de seis décadas por la Guerra de Corea de 1950-53.

Las breves reuniones, que duran solo 11 horas, son las primeras en tres años y se celebran en un complejo turístico de Corea del Norte en el Monte Kumgang después de que ambos países reiniciaran los intercambios este año tras una crisis por los programas nucleares y de misiles de Pyongyang.

El líder norcoreano, Kim Jong Un, y el presidente surcoreano, Moon Jae-in, acordaron la nueva ronda de reuniones durante su primera cumbre en abril.

Unos 330 surcoreanos de 89 familias, muchos de ellos en sillas de ruedas, se reunieron con 185 parientes del Norte, abrazándose entre lágrimas, alegría e incredulidad. Algunos tenían dificultades para reconocer a familiares que no habían visto en más de 60 años.

"Tíos, reciban mi profunda reverencia", dijo Seo Soon-gyo, de 55 años, mientras su padre de 87 años, Seo Jin-ho, se reunía con dos hermanos menores, Chan Ho y Won Ho.

Kim Gyong Sil y Gyong Yong, de 72 y 71 años, con un traje tradicional violeta claro de hanbok, se quedaron mirando nerviosamente la entrada antes de que apareciera su madre de 99 años, Han Shin-ja. No pudieron hablar durante unos minutos, llorando ruidosamente y frotándose las mejillas y las manos.

"Cuando huí de casa en la guerra", dijo Han, incapaz continuar por la emoción.

Las familias separadas son víctimas de un bloqueo político de varias décadas entre los vecinos, que se ha intensificado en los últimos años al avanzar Pyongyang en sus programas de armas.

Más de 57.000 supervivientes surcoreanos se han registrado para las breves reuniones familiares que a menudo terminan en dolorosas despedidas.

Durante años, Seúl ha estado pidiendo reuniones regulares entre familias separadas, incluyendo el uso de videoconferencias, pero los programas de reunión a menudo se han suspendido víctimas de las frágiles relaciones con Pyongyang.

(Información de Hyonhee Shin y Joyce Lee en SEÚL, Hyun Young Yi en SOKCHO, y Joint Press Corps; Editado por Soyoung Kim y Michael Perry; Traducido por Blanca Rodríguez)