Justin Timberlake se declara culpable de un cargo menor tras ser detenido por conducir ebrio
13 sep (Reuters) - La estrella del pop Justin Timberlake se declaró culpable el viernes ante un tribunal del estado de Nueva York de un cargo de tráfico menor que el de conducir ebrio, tras haber sido detenido el verano pasado cuando la policía le vio no respetar una señal de alto y desviarse de su carril.
Timberlake, de 43 años, aceptó declararse culpable de conducir con la capacidad disminuida, una infracción de tráfico menor que la de conducir bajo los efectos del alcohol, reportaron varios medios.
Se le impuso una multa de 500 dólares y se le ordenó realizar servicios comunitarios, informó Variety. El abogado de Timberlake, Edward Burke, se mostró satisfecho con la reducción de los cargos y negó que su cliente estuviera ebrio cuando fue detenido, informó CBS News.
La licencia de Timberlake ya había sido suspendida. El juez también condenó al intérprete a 25-40 horas de servicio comunitario en una organización sin fines de lucro, y le ordenó hacer un "anuncio de seguridad pública".
Timberlake se declaró inocente el 2 de agosto de un cargo de conducción en estado de embriaguez. Fue detenido el 18 de junio en la localidad de Sag Harbor, en Long Island, donde conducía un BMW poco después de medianoche.
Cuando la policía le dio el alto, Timberlake "tenía los ojos inyectados en sangre y vidriosos, su aliento desprendía un fuerte olor a bebida alcohólica, era incapaz de prestar atención, caminaba con inestabilidad y no superó todas las pruebas de alcoholemia estandarizadas", según los documentos judiciales.
Timberlake dijo al agente que se había tomado un martini antes de conducir y se negó a someterse a la prueba de alcoholemia. Tras la vista del viernes, declaró a la prensa: "Intento mantener un nivel muy alto para mí mismo, y esto no fue así".
También señaló: "Es un error que cometí, pero espero que quienquiera que esté viendo y escuchando ahora mismo pueda aprender de este error. Sé que yo lo he hecho. Y como he dicho (...) aunque sea una copa. No te pongas al volante de un coche".
(Reporte de Brendan O'Brien en Chicago y Rich McKay en Atlanta; Editado en español por Raúl Cortés Fernández)