La justicia es avasallada en Latinoamérica, dice jueza

CIUDAD DE MÉXICO, octubre 10 (EL UNIVERSAL).- La jueza Adriana Álvarez, presidenta de la Federación Latinoamericana de Magistrados (Flam), dijo que la justicia en América Latina está siendo avasallada.

"Hay que luchar un día sí y otro también en contra de cualquier tipo de poder político, económico o fáctico que busca torcer la justicia para que no ejecutemos nuestra labor en condiciones independientes.

"Esto es lamentable porque al final de cuentas quienes perdemos somos la sociedad", aseveró durante el Diálogo Interamericano sobre la Independencia Judicial, organizado por el Cyrus R. Vance Center for International Justice del Colegio de Abogados de Nueva York.

Resaltó que los jueces le dan vida a la justicia para los pueblos y mejorar la condición de derechos humanos y enfatizó, ante jueces, expertos en la materia, integrantes de organizaciones de la sociedad civil y colegios de abogados de varios países, que el encuentro es para buscar soluciones con la finalidad de que los ciudadanos se sientan legitimados con la justicia.

La relatora en la materia de Naciones Unidas, Margaret Sattenwaite, habló sobre las formas en las que se trata de menoscabar la independencia judicial y dijo que ante esas amenazas se debe responder, porque proteger la labor de los jueces es defender la democracia y los derechos humanos.

El director para Latinoamérica del Vance Center de la Barra de Abogados de Nueva York, Jaime Chávez, externó a su vez que ven con preocupación el amago a la división de poderes y sostuvo que sin independencia judicial no hay garantía de derechos ni certeza jurídica que permita el desarrollo, mucho menos el Estado de derecho.

Rafael Guerra, presidente del Poder Judicial de la Ciudad de México, señaló que la tarea de juzgar es relevante, pues sin ella no habría control social, equilibrio de poderes ni gobernabilidad.

"La impartición de justicia es el eje rector de todos sus integrantes, teniendo en cuenta la protección de los derechos humanos en todo momento", refirió el también presidente de la Comisión Nacional de Tribunales Superiores de Justicia de los Estados Unidos Mexicanos.

Manifestó que los nuevos tiempos exigen honestidad, sabiduría y coordinación y añadió que han asumido esa responsabilidad desde el servicio público y la sociedad civil, y se ha enaltecido el honor que representa la independencia judicial.

"La división de poderes sigue siendo el fundamento de una nación democrática y de derecho. La división en la actividad ejecutiva, legislativa y judicial sienta las bases del orden social, del desarrollo, libertades y respeto a los derechos humanos, principalmente de mujeres, grupos minoritarios y de niños y adolescentes", aseveró.

En su intervención, el subsecretario para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores, embajador Joel Hernández, destacó que uno de los pilares de toda democracia es la separación de poderes, que se materializa a través de la independencia judicial.