Jennifer Hermoso, la estrella española que ha sacudido al futbol mexicano con solo mirarlo

Jennifer Hermoso durante un partido de Champions League con el Barcelona. (David Ramos/Getty Images)
Jennifer Hermoso durante un partido de Champions League con el Barcelona. (David Ramos/Getty Images)

Los fichajes de Jennifer Hermoso y Norma Palafox han sacudido al futbol mexicano. ¿Cuándo se ha visto que la segunda mejor exponente del orbe llegue a la Liga MX en un momento de total plenitud? Es la primera vez. Así, sin más. Pachuca ha dado un auténtico batacazo cuyas consecuencias apenas están en su fase inicial. Si el acontecimiento ya es grande por sí solo, bastará echar un vistazo a los años que vienen para entender la dimensión de semejante bombazo.

El Atlas, por su parte, no se quiso quedar atrás y cerró el trato con Norma Palafox, una delantera que ha dejado clara su calidad durante cinco años en el campeonato nacional. Es cierto que en Pachuca no pudo mostrar la misma versión que se le conoció en Chivas, donde fue campeona y referente, pero precisamente esa sed de revancha es la que convierte su llegada al Atlas en un reto de enormes dimensiones. Ambos equipos, Pachuca y Atlas, están pensando en lo más alto: ganar el título. De eso se trata el futbol y son los equipos de la Liga MX Femenil los que mejor lo entienden en estos momentos.

Mientras en su contraparte masculina los equipos apuestan por refritos, como el América con Jonathan “Cabecita” Rodríguez, en la Liga MX Femenil no hay quien quiera quedarse fuera de la contienda por los primeros lugares. Tigres y Rayadas dominaron durante varios años, pero cada vez encuentran más complicado prolongar o repetir esa hegemonía, pues Chivas (actuales campeonas), Atlético San Luis y, ahora, Pachuca y Atlas, han edificado planteles que harán del Apertura 2022 un torneo de ensueño en el que se podrán ver partidos dinámicos, generosos con quienes gustan el juego ofensivo y no del conservadurismo que tanto prevalece en casi todas las competencias a nivel mundial.

Hermoso no llega en un momento de decadencia, como ha sucedido en un sinfín de ocasiones con los fichajes bombas de elementos que algún día fueron estrellas y simplemente vienen a México a pasar el rato. La atacante nacida en Madrid hace 32 años, que curiosamente se hizo figura con las camisetas del Atlético y del Barca, viene de marcar 23 goles en el último curso de la División PRO de España. Su palmarés resulta brillante en todos los aspectos medibles: ganó siete veces la liga española y en una ocasión la Champions League, además de ser reconocida con el Balón de Plata en la campaña pasada.

Quien todavía se niegue a ver el crecimiento del futbol femenil en México se topará de bruces con una realidad imposible de ignorar. Desde cualquier punto de vista, hoy se experimenta un auge que hasta no mucho tiempo diversos sectores de la prensa y afición consideraban imposible. Escudados en el argumento de que “no vende”, se quiso hacer ver a la Liga MX Femenil como un mero complemento de la industria, y no como un producto que pudiera acaparar miradas y ser el centro de atención.

Aunque televisoras y otras plataformas se empeñen en ofrecer una difusión a medias; aunque los propios directivos, que con un poco de inteligencia aprovecharían mejor el negocio, se nieguen en sabotear un producto que crece de manera genuina, porque a la gente le gusta ver esos partidos en los que cada balón se juega como si fuera el último. No importa si se trata de un juego de torneo regular o del partido que define un campeonato: la intensidad y el compromiso no cambian en lo más mínimo.

Con jugadoras como Hermoso y Palafox en el campo de juego no habrá ninguna duda: el balompié femenil generará cada vez más emoción y no solo mantendrá atado al público que ya ha conquistado: miles de fans todavía escépticos están a un paso de darse cuenta en dónde está la esencia del juego al que profesan cariño e incondicionalidad.

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