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Las figuras en el Wembley por el triunfo inglés desde del príncipe William, Kate Middleton a Ed Sheeran y David Beckham

El príncipe británico William, su esposa Kate, y el hijo de ambos, el príncipe George, celebran el primer gol inglés en Wembley ante Alemania.
El príncipe británico William, su esposa Kate, y el hijo de ambos, el príncipe George, celebran el primer gol inglés en Wembley ante Alemania.

Por segunda vez en 55 años, Inglaterra dejó afuera a Alemania de un torneo grande. El recuerdo databa de la final del Mundial de 1966, disputado en tierra inglesa. Pero el 2-0 de hoy en Wembley, por los octavos de final de la Eurocopa 2020 gracias a los goles de Raheem Sterling y Harry Kane depositó a los Leones entre los mejores ocho del torneo. Y hubo festejos con nombre propio: el príncipe William, su mujer, Kate Middleton y su hijo, el príncipe George, el cantante Ed Sheeran y el ex futbolista David Beckham disfrutaron de los goles del equipo dirigido por Gareth Southgate en el palco de la catedral del fútbol inglés.

El gol de Sterling

A Inglaterra le tocó sufrir para festejar, porque en el primer tiempo los alemanes tuvieron ocasiones para adelantarse en el marcador. Lo sufrieron Beckham y Sheeran en carne propia, ya que las cámaras de televisión tomaban a ambos, sentados uno al lado del otro, en un palco, cerca de otra gloria del fútbol inglés como Rio Ferdinand.

Las uñas apretadas y la tensión de los famosos hinchas ingleses se aflojaron con el gol de Raheem Sterling, al promediar el segundo tiempo. Todo Wembley explotó. A tal punto que William dejó de lado el portocolo y su apego a las formas para gritar el tanto y celebrarlo con los brazos en alto. Era el comienzo del camino hacia los cuartos de final. Sheeran y Beckham, por su parte, fueron bastante más medidos en sus celebraciones.

El palco tembló unos minutos después, cuando Thomas Müller, tras una magnífica habilitación de Kai Havertz, quedó mano a mano con Jordan Pickford, arquero del seleccionado inglés. La mayor parte de Wembley contuvo el aliento, porque los defensores ingleses corrieron de atrás al futbolista alemán de Bayern Münich. No lo agarraron jamás. El talentoso germano abrió su pie derecho y acomodó la pelota junto al palo. Pero el remate se fue afuera. Inglaterra lo festejó como un gol.

El gol de Kane

El Príncipe, su mujer, su hijo, Sheeran y Beckham tuvieron otra chance de probar su garganta. Fue casi sobre el final del partido, y tras otro centro desde la banda izquierda del ataque inglés, allí donde se posó Jack Grealish desde su ingreso. Wembley vibró con la palomita de Harry Kane, un hijo dilecto de la capital del país, ya que es el capitán de Tottenham, uno de los equipos más importantes de la ciudad. La celebración duró hasta el final del encuentro, ya con Alemania sin chances de empatar. El pitazo final replicó el festejo del palco de las celebridades en el resto de la catedral del fútbol inglés.

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