Indonesia libera al supuesto cerebro de los atentados de Bali de 2002

Yakarta, 8 ene (EFE).- Indonesia liberó este viernes al clérigo radical y considerado autor intelectual de los atentados de Bali en 2002, Abu Bakar Bashir, tras cumplir una condena de cárcel vinculada a otra acusación por terrorismo.

El presunto cerebro de la serie de ataques con explosivos, que se cobró la vida de 202 personas de más de dos decenas de nacionalidades, salió de la cárcel de Gunung Sindur, al sur de Yakarta, a las 5:30 hora local (22:30 GMT del jueves), apunta en un comunicado Rika Apriandi, directora del departamento de Correccional.

Bashir, de 82 años y quien niega su implicación en los atentados de Bali, fue condenado a 15 años de prisión en 2011 por su vinculación con los campos de entrenamiento de terroristas en la provincia indonesia de Aceh, en el norte de la isla de Sumatra.

No obstante, las autoridades le han concedido varias reducciones de condena, por un total de 55 meses, lo que ha permitido liberarlo antes.

La liberación se produjo a primera hora de la mañana para evitar posibles aglomeraciones de los seguidores del clérigo radical, apunta la prensa local.

Bashir está considerado el líder espiritual de la Yemaa Islamiya, el eslabón de Al Qaeda en el Sudeste Asiático y fundado en 1995 para crear un califato islámico en Indonesia, Malasia, Singapur, el sur de Filipinas y Tailandia, y al que se le atribuyen la mayoría de los atentados perpetrados en el Sudeste Asiático.

El 12 de octubre de 2002, dos miembros del grupo terrorista se inmolaron dentro y en la entrada de una discoteca de la turística zona de Kuta, donde murieron 164 extranjeros, 38 indonesios y más de 200 personas resultaron heridas.

Otro artefacto explosivo fue detonado ese mismo día fuera del consulado de Estados Unidos en Denpasar, capital provincial, y que solo causó daños menores.

El gobierno de Australia, país del que procedían 88 de las víctimas mortales del atentado de 2002, y familiares de los fallecidos han mostrado su disconformidad sobre la liberación Bashir.

El australiano Phil Britten, quien resultó con heridas graves en 40 por ciento de su cuerpo y perdió en el ataque terrorista a siete amigos, expresó su temor sobre la posibilidad de que Bashir siga proclamando su discurso islámico radical fuera de prisión.

"Si bien han pasado muchos años y él ya es un anciano, me preocupa que vivamos en un mundo (...) con una mayor predisposición a la radicalización" a través de internet, declaró el australiano al diario local The Age tras conocer la liberación.

Por su lado, el primer ministro australiano, Scott Morrison, manifestó hoy que la liberación del clérigo radical supone "angustia para familiares y amigos de los 88 australianos asesinados".

Morrison remarcó que los diferentes gobierno australianos han mantenido la misma postura al insistir que todos los implicados en los atentados de Bali "afronten duras condenas", aunque reconoció que ese deber recae sobre el sistema de justicia indonesio.

La liberación de Bashir se produce un mes después de que las fuerzas antiterroristas indonesias arrestaran a Aris Sumarsono, alias Zulkarnaen, acusado de participar en los atentados de Bali y supuesto líder militar de Yemaa Islamiya.

La mayoría de los habitantes de Indonesia, el país con el mayor número de musulmanes del mundo, practican un islam moderado y que convive pacíficamente con otras religiones en todo el archipiélago, aunque existen varios grupos terroristas que ponen en el punto de mira a credos religiosos no musulmanes.

(c) Agencia EFE