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Las Iglesias intentan reactivar la tregua entre pandillas en El Salvador

Miembros de la Mara Salvatrucha (MS13), en el centro criminal de Ciudad Barrios, San Miguel, 160 kilómetros al este de San Salvador, el 4 de marzo de 2013 (AFP/Archivos | Marvin Recinos)

La tregua entre pandillas vigente desde hace dos años en El Salvador entró en una etapa de estancamiento, agravada por un repunte de homicidios, por lo que varias iglesias buscarán reactivar el proceso, señaló uno de los mediadores el miércoles. El pacto entre pandillas, que se inició el 9 de marzo de 2012, vive "un momento de estancamiento e incertidumbre" por la falta de apoyo del ministerio de Justicia y Seguridad Pública, aseguró a la AFP el excomandante guerrillero Raúl Mijango, quien adelantó que se pretende reflotarlo. "Lo que buscamos es un gran diálogo nacional en el que cada quien asuma su rol y su responsabilidad, porque de lo que se trata es de resolver el problema", resumió. Tanto Mijango como el vicario castrense Fabio Colindres figuran como los facilitadores de este proceso, observado por la Organización de Estados Americanos (OEA). "Estamos profundamente preocupados. La falta de comunicación entre las pandillas y las prácticas de mano dura desde las autoridades hacia las pandillas han desencadenado un nivel de violencia que marca el deterioro del proceso", destacó Mijango. Para el mediador, la ruta de violencia en la que se entró en los últimos meses "en lo absoluto le conviene al país". En ese sentido, dijo que después de la Semana Santa, la denominada Iniciativa Pastoral por la Vida y por la Paz, impulsada por diferentes iglesias, presentará una propuesta de reactivación del proceso para que sea tomada en cuenta por las nuevas autoridades que se instalarán el 1 de junio próximo con el presidente Salvador Sánchez Cerén. Este contemplará tres mecanismos de diálogo: uno entre las pandilas, otro entre pandillas y la sociedad civil y un tercero entre la sociedad civil y el Estado, explicó Mijango. - Las pandillas atacan a la policía - Ante un combate sostenido de la policía contra los homicidios, extorsiones y otros delitos, las pandillas han reaccionado con ataques sorpresa con fusiles de asalto M-16 a instalaciones del cuerpo de seguridad. "La Policía Nacional Civil (PNC) cuenta con información y evidencias de que las pandillas han aumentado su actividad delictiva, se han expandido en organización y presencia en el territorio" y de paso se han "involucrado en mayor actividad con el narcotráfico", consignó un informe de la cartera de Justicia y Seguridad. Según las autoridades, "existen lineamientos" de las pandillas para que sus miembros ataquen "directamente a policías, militares y empleados públicos". Desde el 1 de noviembre pasado, los enfrentamientos entre maras y la Policía han dejado 26 pandilleros y unos siete agentes muertos, lo cual "es preocupante porque ha llevado a un nivel del enfrentamiento que antes no teníamos", comentó Mijango. El último caso de ataques a policías ocurrió el lunes, con el saldo de un agente muerto, al cual los pandilleros le dispararon en Aguilares, a 33 kilómetros al norte de San Salvador. - Con la ley antiterrorista - El subdirector de la PNC, Mauricio Ramírez, advirtió de que las "organizaciones que tienen como objetivo atacar a los miembros de la policía van a ser perseguidas como organización terrorista". Ante estos atentados, el fiscal general Luis Martínez anunció que aplicará a los pandilleros la Ley Especial contra Actos de Terrorismo, que contempla penas hasta de 70 años de cárcel. "Vamos a hacer uso de la ley antiterrorista para proteger a la ciudadanía honrada y a nuestros policías", dijo en tanto el ministro de Justicia y Seguridad, Ricardo Perdomo. Perdomo señaló que en los próximos días se podrían hacer detenciones de personas presuntamente vinculadas a ataques contra policías, pues hay investigaciones "muy avanzadas" en las que se ha logrado individualizar a responsables intelectuales y materiales de casos de esos. Con la tregua, los homicidios bajaron de 14 a cuatro o cinco por día en 2012, pero en 2013, el promedio diario osciló entre seis y siete entre enero y marzo, según las cifras del Instituto de Medicina Legal. Entre enero y marzo pasados, se registraron 794 asesinatos, cuando en igual período de 2013 se contabilizaron 551, con lo cual la media de homicidios alcanzó 8,9 por día. En las cárceles del país hay unos 10.000 pandilleros recluidos, pero en las calles se estima que circulan libremente otros 50.000, de acuerdo con las cifras oficiales.