Hunt gana otra faja de manera oscura. No le queda otro camino que enfrentar al Asesino Cubano en Bare Knuckle

Lorenzo Hunt logró lo que tanto quería.

El guerrero de la Florida se convirtió en el segundo hombre que suma dos títulos en divisiones distintas dentro de Bare Knuckle Fighting Championship (BKFC) y se afianzó como segundo la lista de los mejores libra por libra, solo por detrás de Luis Palomino.

Aunque Hunt, quien ganó de manera controversial la faja crucero el sábado en Monroe, Louisiana, contra Quentin Henry, insiste ahora en ir por un tercer cinturón en el peso completo, queda claro que el único camino debiera ser una revancha con el cubano Gustavo Trujillo en cualquiera de las categorías donde aparecen los nombres de ambos.

El “Asesino Cubano’’ es el número dos en la clasificación de peso completo, donde Hunt desea buscar un cinturón nuevo, y el primero entre los cruceros, el peso donde “The Juggernaut’’ acaba de conquistar esta victoria averiada por la polémica en un choque que quizá no debió continuar.

A pesar de que Hunt dice que Trujillo se le esconde, lo cierto es que el cubano lleva bastante pidiendo la cabeza del campeón y una revancha para demostrar que lo sucedido la primera vez no fue obra de la casualidad, cuando el resultado favoreció al antillano por la vía del nocaut.

Hunt repite que aquel golpe fue producto de un deslizamiento a causa de un calzado que funcionó mal, pero esa derrota sigue pesando en su rrecord de BKFC y Trujillo no pierde oportunidad de recordárselo, de modo que la opción de un segundo enfrentamiento queda en manos de la empresa.

Lorenzo Hunt.
Lorenzo Hunt.

Por otra parte, Trujillo puede alegar que el triunfo de Hunt sobre Henry llega con manchas, porque todo se produjo de manera inexpiable, cuando el campeón ligero pesado cargó contra la jaula al sonar la campana de apertura, dando golpes que enredaron al local, quien cayó a la lona con su rival encima.

Hunt, entonces, lanzó entonces una mano derecha mientras Henry estaba tumbado, lo que habría sido motivo de descalificación en cualquier otra comisión de deportes de combate, porque el hombre en el suelo perdió la conciencia por segundos y tuvo que ser ayudado a sentarse en una silla.

Mientras todo esto sucedía, Hunt se situó en el centro del cuadrilátero gritando que su golpe ilegal había fallado y que Henry estaba fingiendo y buscando una victoria por descalificación, algo que secundó el árbitro Dan Miragliotta, quien dio luz verde para que se reanudara la pelea.

Una vez finalizado el primer asalto, se pudo escuchar a Miragliotta explicando que el golpe de Hunt no había acertado, por lo que decidió no descontar ningún punto y dar la vox de box en ruta hacia una victoria por nocaut de Hunt en el tercer asalto, pero salvo el campeón nadie quedó satisfecho.

Tampoco nadie quedará satisfecho si la pelea entre Hunt y Trujillo no llega a producirse.