Historia y dólares, la máxima estrella de las Grandes Ligas llega para sacudir del letargo a la casa de los Marlins

La última vez que el loanDepot park puso sus ojos en Shohei Ohtani el escenario no pudo ser mayor para Japón.

Ahora, en su regreso al parque de La Pequeña Habana, las apuestas no pueden ser más altas en lo personal. En ambos casos la estrella llega envuelta en una aureola histórica que formará parte de su trayectoria hasta el último de sus días.

Si Ohtani cerró el Clásico Mundial del 2023 con un ponche inolvidable contra el capitán del equipo estaounidense, Mike Trout, para darle el triunfo a Japón, ahora regresa a Miami en pos de una gesta nunca antes alcanzada en más de siglo y medio de Grandes Ligas: inaugurar el club de peloteros con al menos 50 jonrones y 50 bases robadas.

“Es increíble jugar con él’’, comentó en la transmisión de Sunday Night Baseball otra estrella de relieve como Mookie Betts.

“Es muy bueno. Muy rara vez, sobre todo en este nivel, uno puede mirar y decir algo como ‘este tipo es mucho mejor que yo’. Porque todos tenemos talento, pero ese tipo es mejor que todos’’’.

Ohtani arriba a esta plaza con 47 jonrones y 48 bases robadas, y no cabe duda de que ante el pitcheo de los Marlins podría acercarse y, quien sabe si alcanzar la hazaña delante un público que debe apreciar el significado de lo que está logrando el japonés.

De acuerdo con modelos y pronósticos, Ohtani va a un ritmo que le permitiría finalizar la actual contienda con 51 jonrones y 52 bases robadas, lo que significa que no sólo alcanzaría la marca de 50-50, sino que la superaría para poner punto final a la conversación sobre el Jugador Más Valioso de la Liga Nacional que discute con el boricua Francisco Lindor.

Si gana el premio sería el tercero que suma a su vitrina y el primero con los Dodgers tras firmar un pacto de $700 millones con Los Angeles, el contrato más grande en la historia de los deportes profesionales, un dato que alguna vez le correspondió a un exjugador de Miami en su momento: Giancarlo Stanton.

Una temporada 50-50 sería algo escrito en piedra para todos los tiempos, pero lo realmente increíble es que Ohtani ha brillado al más alto nivel mientras todavía se recupera de una cirugía Tommy John que le ha impedido ser el pelotero de dos vías de temporadas anteriores.

Y de acuerdo con el alto mando de los Dodgers existe una posibilidad de que Ohtani pueda lanzar en calidad de relevista en los playoffs, lo que haría más surrealista la clase de temporada que está redondeando para confirmarse como la mayor estrella del béisbol.

UNA PERSPECTIVA ÚNICA

Nacido en la ciudad de Oshu, en la prefectura de Iwate al norte de Japón, Ohtani siempre quiso ser un pelotero profesional y en su tierra lo ganó todo con los Hokkaido Nippon Ham Fighters, un club que le prometió permitirle algo que nunca antes había pasado en la liga local: lanzar y batear como si fuera lo más natural del mundo.

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Tras ganar el título con los Fighters en el 2016 y el premio de Jugador Más Valioso, decidió dar el salto a las Mayores al firmar con los Angelinos de Los Angeles con los cuales asombró al béisbol, como si fuera un moderno Babe Ruth, quien en algún momento también fuera un jugador de dos avenidas.

Pero con todo lo que ha logrado en los últimos cuatro años, incluyendo dos premios de MVP, nunca antes había alcanzado los 50 jonrones, pues el máximo de su carrera eran 46 que data del 2021.

Peloteros de la talla de Alex Rodríguez, Alfonso Soriano y Ronald Acuña han coqueteado con el club 50-50, pero todos quedaron cortos en el intento y ninguno estuvo tan cerca de alcanzarlo como ahora Ohtani, a quien le restan dos semanas para hacerlo.

De hecho, Ohtani es ya el único jugador con 47-47 en una contienda y muy pronto podría igualar a Shawn Green, quien posee actualmente el récord de la franquicia de los Dodgers con 49 cuadrangulares en el 2001. Así que más historia viene en camino.

EL VALOR DE UNA PELOTA

Más allá de lo que está generando dentro del terreno, con más de 100 carreras impulsadas, hay otro elemento no menor que estaría a consideración de los fanáticos que asistan al parque para esta serie particular de tres enfrentamientos contra los angelinos.

Si Ohtani llega a implantar una marca de 50-50 esa pelota en las gradas del loanDepot park podría cambiar la vida del afortunado que la capture, pues de acuerdo a varios reportes especializados en memorabilia, podría ser valorada en unas seis cifras.

Según algunas casas de subasta, la bola podría valorarse en $100,000, mientras que otras incrementan su precio a los $200,000 para no mencionar ya lo que pudiera multiplicarse esos números a medida de que pase el tiempo y la carrera de Ohtani siga alcanzando vuelo.

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La mayoría de los jonrones de Ohtan han sido depositados entre los jardines izquierdo y central, de modo que esos boletos deberían tener un atractivo especial para quienes los compren, sin olvidar llevarse un buen guante porque los batazos del nipón suelen salir como misiles de swing seguro y limpio.

Así que, en medio de la desangelada contienda de los Marlins, hay motivo para ir al parque a partir de este martes, porque una vez más la presencia de Ohtani en el sur de la Florida será un espectáculo digno de ver.