Hichilema, el eterno candidato presidencial en Zambia que por fin venció

Lusaka, 16 ago (EFE).- Hakainde Hichilema, economista y hombre de negocios convertido en político, fue declarado hoy vencedor de las últimas elecciones presidenciales de Zambia, a las que concurrió como aspirante del Partido Unido Para el Desarrollo Nacional (UPND), tras haber sido el eterno candidato en los últimos seis comicios.

Con el lema de campaña "Faka pressure" -"presiona para el cambio" en la jerga local- Hichilema, de 59 años, hizo de la recuperación económica su caballo de batalla en la carrera electoral hacia estos comicios, aprovechando las críticas en este terreno contra su gran contrincante y presidente del país hasta ahora, Edgar Lungu.

La estrategia le acabó otorgando unos 2,8 millones de votos, casi 1 millón más que al jefe de Estado zambiano, lo que supuso una victoria cómoda que echó finalmente por tierra las predicciones que apuntaban a un resultado ajustado.

La alta afluencia a las urnas, en especial entre los jóvenes urbanos, ayudó a Hichilema a sobrepasar a Lungu, al canalizar la frustración por problemas como la falta de empleo, según explicó a Efe el analista político Joe Mulenga, que estará entre lo que el presidente electo tenga que abordar con más urgencia, junto a la recuperación económica y la reunificación de un país muy polarizado.

"Como presidente, mi preocupación no será arrestar gente. Ese es el trabajo de las fuerzas de seguridad y de las ramas de investigación. En su lugar, yo arrestaré la inflación, la pobreza y el (creciente) coste de vida", había prometido Hichilema durante la campaña electoral.

Nacido en 1962 en el seno de una familia humilde en un pueblo del distrito sureño de Monze, Hichilema se graduó en economía y administración de empresas por la Universidad de Zambia gracias a una beca.

Más tarde, cursó un máster en finanzas en la Universidad de Birmingham, en el Reino Unido.

Durante su carrera como empresario, ocupó cargos directivos en algunas de las principales empresas del país, como la rama zambiana de la firma multinacional de contabilidad Coopers and Lybrand.

Comenzando por el sector inmobiliario, expandió sus negocios a ámbitos muy diversos hasta convertirse en una de las grandes fortunas del país, desde la ganadería hasta el sector médico, pasando por el turismo.

En 2006 dio el salto a la política de forma inesperada, cuando el UPND necesitaba un sustituto tras el repentino fallecimiento de su entonces líder, Anderson Mazoka, a tan solo seis meses de las elecciones, donde concurriría como candidato de la coalición Alianza Democrática Unida (UDA), con el apoyo del difunto primer presidente de Zambia, el histórico Kenneth Kaunda.

Hichilema, pensando que no conseguiría convertirse en presidente por su cuenta, protagonizó varios pactos y alianzas políticas, pero todos fracasaron y el ahora recién escogido presidente recibió duras críticas por su supuesta codicia y falta de respeto a los otros líderes.

Visto en ocasiones como un empresario distante del pueblo, Hichilema se esforzó durante los últimos años en acabar con esta imagen elitista y en construir una más campechana y cercana a los zambianos de la calle, cambiando incluso sus trajes por pantalones tejanos y ropa más informal.

Detenido una quincena de veces durante su carrera, Hichilema fue arrestado en 2017 e imputado por traición después de negarse a ceder el paso a la caravana del presidente, Edgar Lungu, y de ser acusado de poner en riesgo la vida del mandatario, un incidente que muchos consideraron una infracción de tráfico menor.

El opositor, sin embargo, pasaría cuatro meses en prisión, una parte de ellos en régimen de aislamiento, lo que despertó la indignación de la comunidad internacional, incluidos los Estados Unidos, la Unión Europea y también de dirigentes africanos, como los líderes de los principales partidos de la oposición sudafricana.

Tras un estallido de protestas en Zambia, Sudáfrica y el Reino Unido, el Gobierno del país africano retiró finalmente los cargos contra Hichilema, que fue liberado entre masivas celebraciones populares.

Cristiano seguidor de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, el recién vencedor de los comicios zambianos está casado con Mutinta Hichilema, con quien tiene tres hijos.

Lucía Blanco Gracia

(c) Agencia EFE