Hasán Nasrala, líder de Hizbulá, desvela en breve los próximos pasos del Líbano

La tensión entre Líbano e Israel aumenta un poco más, después de que en las últimas horas Hizbulá atacara, con misiles guiados y cohetes, 19 posiciones militares de Israel, que respondió a su vez golpeando infraestructuras y cuarteles en el sur del Líbano.

"En el norte, Israel responderá con acciones, no con palabras", dijo el portavoz de las FDI, Daniel Hagari. La agencia Anadolu informa de tres muertos debido a los ataques israelíes.

Todo ello a la espera de las declaraciones de Jasán Nasrala, líder de Hizbulá, que se pronunciará, por primera vez, sobre el actual conflicto entre Israel y Hamás. Está por ver si declara formalmente la guerra al país vecino.

Esta será la primera aparición del clérigo proiraní que, desde la última guerra entre Hizbulá e Israel en 2006, vive en una ubicación desconocida y hace años que no aparece en público, por lo que sus discursos suelen ser difundidos por televisiones afines y a través de pantallas gigantes durante actos organizados por la formación chií.

En las calles de Beirut, expectación: "Creo que Hizbulá está confundido" opina desde una cafetería Charles Ghanem, jubilado libanés. "Si va a la guerra, tendrá un problema con una parte del pueblo. Y si no lo hace, también tendrá un problema con los partidarios. Espero que Nasralá sea capaz de equilibrar las dos ecuaciones".

La escalada en la zona podría contar en breve con un nuevo invitado. Según el Wall Street Journal, la inteligencia estadounidense teme que miembros de Wagner asentados en Siria vayan a dotar al grupo chií libanés de sistemas de defensa antiérea Pantsyr, también conocidos como SA-22. Se trata de una combinación de misiles de corto alcance con cañones antiaéreos, montados sobre un camión.