Guayaquil y el V centenario de una travesía universal

Guayaquil, 6 dic (EFE).- La ciudad de Guayaquil evocó este domingo el legado "universal" de la primera circunnavegación a la Tierra en una jornada cultural organizada por la Embajada española en Ecuador con motivo del V Centenario de esa epopeya y la llegada del Buque Escuela Juan Sebastián Elcano a este puerto.

"La gesta que sobrepasaría a muchos de sus protagonistas hace 500 años, convirtiéndose en una epopeya de tanta importancia como la llegada del hombre a la Luna en 1969, pues tuvo un enorme impacto histórico, científico, económico y cultural", manifestó el embajador español en Ecuador, Carlos Abella y de Arístegui.

Al inaugurar el evento en el Museo Antropológico y de Arte Contemporáneo (MAAC) de la ciudad costera, el diplomático recordó que la expedición fue el punto de partida de "un proceso de globalización por el que la humanidad tomó por primera vez conciencia de la universalidad".

Marcada por la llegada del Buque Escuela el sábado, por primera vez en una década y en el marco de una travesía de once meses para conmemorar la gesta de Fernando de Magallanes y de Elcano, España ha querido que Guayaquil se acercara a la era de los grandes descubrimientos del siglo XVI, que marcarían el rumbo de la ciudad aún por nacer.

Porque ni Magallanes ni Elcano supieron nunca de chonos, punaes, huancavilcas y tantas otras tribus de la cuenca del Guayas, mucho menos de una tierras ecuatoriales que, al momento de la circunnavegación (1519-1522), ni siquiera habían sido descubiertas por Francisco Pizarro.

GUAYAQUIL: LA PERLA DEL PACÍFICO

Lo que resta la importancia que acabaría teniendo para el principal puerto de Ecuador, un hecho como el descubrimiento del paso interoceánico entre el Atlántico y el Pacífico.

"Este es un viaje que tiene un impacto a nivel global", declaró a Efe la historiadora ecuatoriana Sabrina Guerra, que hoy presentó, junto al embajador de España, el segundo volumen de la colección "Enigmas de las Américas", titulado "La búsqueda del paso interoceánico".

Abunda en que "luego se dieron otros viajes que exploraron el Pacífico", que a partir de entonces "se inserta en la cartografía, economía y perspectiva global".

Ese libro, una exposición histórica y una peculiar obra de teatro basada en las crónicas del italiano Antonio de Pigafetta, que acompañó a los dos descubridores, trataron de recuperar un pasado que ha sido crucial para Guayaquil, pese a no haber sido pisada.

Y es que si Cristóbal Colón demostró con sus viajes que la Tierra era redonda, la circunnavegación es para la española María Elena Mexía "el viaje" donde Europa descubre que "el mundo está ya habitado".

"A medida que van viajando y conociendo civilizaciones se van dando cuenta de que todos tenían su cultura, sus comunidades, algunos -como en Filipinas- con civilizaciones muy avanzadas", destaca.

Directora escénica que vive en Ecuador desde hace más de una década, Mexía redactó el guion teatral de las crónicas de Pigafetta, para las que -dice- se ha "inventado" un nuevo género: "el teatro documental de época".

"La crónicas fueron para mí una carga de humanidad", explica sobre la necesidad de "evocar" en su obra un mundo entonces "desconocido" y que obliga a partir desde ese punto.

Con apenas tres actores, dos de ellos mestizos de apariencia indígena para evocar lo entonces "desconocido", y uno principal, el veterano Alfredo Espinosa en el papel del cronista italiano, la obra "Crónicas de un mundo desconocido" resume las experiencias de la expedición hace 500 años.

Voces en off y un diálogo que gira en torno a varias fechas cruciales y la descripción de los paisajes descritos por Pigafetta, recrean la partida de cinco naves y 237 hombres desde Sevilla, el 10 de agosto de 1519, y el regreso el 8 de septiembre de 1522 de una sola nave, la "Victoria", y 18 marinos supervivientes.

Su mensaje es "esencialmente la fuerza y la voluntad", resume Espinosa al valorar una obra acerca de la primera "globalización".

"El llevar adelante una hazaña con un nivel de compromiso tan fuerte y potente en lo que hacen", insiste.

HOMENAJE A GUAYAQUIL

Entre marzo y abril, Guayaquil fue una de las ciudades más golpeadas del mundo por la pandemia del coronavirus, con miles de contagios en un breve espacio de tiempo que hizo colapsar el sistema de salud y causó miles de muertos, muchos de ellos no contabilizados por las estadísticas.

Un trágico episodio que ha justificado la elección por la Armada española de esta ciudad costera ecuatoriana como escala para trasladar al Buque Escuela a los guardiamarinas del XCIII crucero de instrucción.

Se espera que más de 60 personas, la mayoría marinos en formación y algunos profesores, lleguen a última hora del día en avión desde España y aborden el Juan Sebastián Elcano.

Bajo estrictas medidas para evitar contagios en el barco, cuya tripulación permanecerá confinada once meses de travesía, está prevista este lunes una ceremonia tras la cual el Buque levará anclas con destino a Acapulco, desde donde continuará hacia lugares como Guam, Filipinas o Indonesia, escalas de un viaje hacia lo que 500 años atrás era terreno desconocido.

Elías L. Benarroch

(c) Agencia EFE