Guía para hacer el dónut perfecto
¿Sabías que el dónut nació en Holanda? Aunque se popularizó en Estados Unidos con la llegada de emigrantes del primer país. En sus inicios no tenía agujero así que parece que fueron los norteamericanos los que se lo hicieron. Se le atribuye su invención a un marino, de nombre Hanson Gregory, que perforó la masa para facilitar su fritura, en manteca de cerdo, aunque hoy en día se opta por hacerlo en aceite vegetal, o sin grasa, en el horno.
En España, comenzaron a fabricarse bajo la marca registrada 'Donuts', de la mano del Grupo Panrico, aunque hoy hay muchas otras empresas que los elaboran. Nosotros, sin embargo, queremos proponerte una alternativa casera. Para ello, te ofrecemos la siguiente guía sobre cómo conseguir el dónut perfecto, en tan sólo 5 pasos, y después podrás ponerla en práctica a través de 7 recetas. Dejamos los salados para otro momento, y nos centramos en los dulces.
1.- Ingredientes para la masa de dónuts
Para hacer la masa de un dónut básico, los ingredientes que necesitas son: harina, levadura (fresca o en polvo), agua, leche, huevos, azúcar, mantequilla, sal y aceite para la fritura. A partir de ahí, puedes añadir otros como vainilla, naranja, chocolate, frutos secos, algún licor... Todo dependerá del sabor que le quieras dar al dónut. Más abajo, te hablaremos del glaseado y de los toppings, para los que tendrás que reunir algunos ingredientes más (las cantidades de todo las tienes en las recetas).
2.- Amasado
Para hacer una masa básica, en un bol diluye la levadura fresca en agua tibia y agrega la harina, la leche, el azúcar y los huevos (si usas levadura en polvo no hace falta que la diluyas en agua). Mezcla todos los ingredientes, preferiblemente con una máquina eléctrica (amasadora, robot de cocina o batidora con el accesorio de gancho). Cuando la harina esté bien integrada, agrega la sal y sigue amasando (también puedes hacerlo de forma manual). Y, por último, incorpora la mantequilla no muy dura cortada en dados y termina de amasar hasta que esté lisa y brillante.
3.- ¿Cuánto tiempo tiene que fermentar y cómo le doy la forma?
Ahora tienes que formar una bola con la masa y meterla en un cuenco limpio con un poco de harina. Tápala y deja que repose para que doble su volumen, entre 1 y 2 horas, dependiendo de la temperatura que haya en tu cocina (a más fresca más tiempo tardará en fermentar).
Echa un poco de harina en tu mesa de trabajo y pon la masa encima. Estira con un rodillo hasta darle un grosor de 1 cm aproximadamente. Lo ideal para darle la forma de dónut es hacerlo con dos cortadores (suelen ser de acero o de plástico): uno más grande y otro más pequeño para hacer el agujero, pero puedes hacerlo con un vaso más grande y otro de chupito. Enharínalos para que la masa no se pegue.
Por cierto que existen otros formatos como las bolitas, solas o rellenas, o las berlinas, que es el bollo entero sin agujero, también se puede rellenar (crema, chocolate, mermelada, etc), su origen se encuentra en Alemania y es muy popular en otros lugares como Austria y, por la emigración, se encuentra en numerosos países latinoamericanos.
Según vayas teniendo los dónuts cortados, deposítalos en una bandeja cubierta con papel de horno y deja bastante separación entre ellos, tápalos y vuelve a dejar que fermenten, como mínimo durante 1 hora. Tanto el amasado como el reposo son importantes para conseguir una masa firme y elástica y un resultado esponjoso.
4.- ¿Frito o al horno?
Usa el mismo papel donde los has colocado para ayudarte en la fritura. Córtalo con unas tijeras alrededor de cada dónut y calienta aceite vegetal neutro a una temperatura de 160-170ºC. Suelta el bollo sobre el aceite para que no pierda su forma y fríe, por ambos lados, durante un total de 2-3 minutos porque se doran enseguida. Colócalos sobre papel absorbente, sobre un colador o sobre una rejilla para que escurra el exceso de grasa.
Otra opción, para aligerar la receta, es hacerlos al horno, aunque el resultado es distinto y el sabor no es el mismo que el dónut frito clásico. Si decides hornearlo, el proceso primero es igual pero después, en lugar de freírlo, introdúcelo en el horno precalentado a 180ºC y cocina durante unos 10 minutos.
5.- Glaseado y toppings
El dónut clásico, una vez frito, se glasea con una mezcla de agua y azúcar glas. Le puedes añadir chocolate, zumo y/o cualquier esencia para aromatizar, así como colorantes alimentarios para conseguir bonitos y llamativos tonos. Si quieres que te quede una buena capa y se adhiera bien al bollo, no eches demasiada agua.
Como toppings las posibilidades son muy variadas: frutas, frutos secos, chips de chocolate, pequeños caramelos, ralladura de cítricos, etc. El proceso es, si vas a ponerlos, añadir los que hayas elegido sobre el glaseado, que se extiende sólo en la parte de arriba.
Ahora que tienes todas las claves, anímate a preparar las siguientes recetas. Hay dónuts para todos los gustos, así que ¡elige el que te apetezca!