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Grettell Valdez y los tragos amargos de ser una de las mejores villanas de la TV

Grettell Valdez ha sido nominada en tres ocasiones en los Premios TVyNovelas (Foto: Adrián Monroy/Medios y Media/Getty Images).
Grettell Valdez ha sido nominada en tres ocasiones en los Premios TVyNovelas (Foto: Adrián Monroy/Medios y Media/Getty Images).

Interpretar a una villana no es tarea sencilla, pero hay quienes tienen talento para ello y lo hacen a la perfección, como lo ha demostrado en varias ocasiones Grettell Valdez. Es tan palpable la maldad que imprime a sus antagónicos que en más de una ocasión le han reclamado y hasta agredido por esos personajes.

Casi a la par que Irán Castillo, Alfonso Herrera, Dulce María o Aarón Díaz comenzaban a consagrarse como nueva generación de actrices y actores jóvenes, Grettell Valdez también hacía lo propio pero con un objetivo claro, ser recordada por quien la viera en pantalla. Y eso lo ha logrado con muchos de sus antagónicos. "Sin duda, disfruto mucho de ser la villana, se quedan en el gusto del público y nunca son olvidadas", ha manifestado.

Y que si lo ha conseguido: cómo olvidar a su 'Daniela' de la telenovela juvenil Clase 406 donde le bajó el novio a Sherlyn y pasó un tiempo en rehabilitación por adicciones; o su 'Carlota', la hermanastra que atormentaba a Eiza González en Lola, érase una vez; o su mezquina 'Virginia' en Lo imperdonable, en la que casi todo el elenco sufrió con sus mentiras.

Pero convertirse en la mala de la historia le ha pasado factura en varias ocasiones, la primera de ellas precisamente en Clase 406 y de forma masiva, como lo contó a El camerino de Las Estrellas.

Hubo un tiempo en que muchas de las telenovelas infantiles y juveniles de Televisa exprimían todo el talento de sus nacientes estrellas. Entonces además de ver sus actuaciones, muchos de ellos demostraban que podían cantar. Clase 406 no fue la excepción, grabó disco y hasta dio conciertos.

Ocurrió que la producción planeó que el elenco se presentara en el Zócalo capitalino, ese espacio en el que además de ser el epicentro de marchas, manifestaciones y fiestas patrias, artistas como Café Tacvba, Paul McCartney o Grupo Firme han congregado a miles, si no es que cientos de miles.

Camino a la cita de aquel lejano 2002 y para calmar los nervios, según recordó Valdez, alguien les comentó que posiblemente habría poca gente. Sorpresa: se reunieron 20 mil aficionados, "estaba a reventar el Zócalo, nosotros estábamos asustadísimos, '¿qué vamos a hacer?', las piernas nos temblaban, y yo me acuerdo que cuando subo, me abuchean y me gritan '¡buuuuu!', y yo así de '¿pero... cómo?', bajo y le digo a Pedro Damián, el productor, 'Pedro, me abuchearon'". Si la actriz esperaba consuelo, sucedió lo contrario. "'¡Está increíble, eres villana, está perfecto, te odian, están conectados con tu personaje!'", le respondió Damián.

Diez años después, su 'María' en Lo que la vida me robó (protagonizada por Angelique Boyer y Sebastián Rulli), donde hizo hasta lo imposible por quedarse con el amor del personaje principal, ha sido quizá el más odiado, a tal grado que la agredieron en público.

"Iba con mi hijo Santino, en ese entonces muy chiquito, íbamos caminando y de repente una señora me da un bolsazo", contó, mientras le gritaba, como si se trata de su personaje, "'¡Maldita María!'". Su hijo, además, también trató de defenderla y respondió: "¡oiga, la mala es la de la tele; mi mamá no!".

Que han sido situaciones extraordinarias, no queda duda, la actriz así lo ha entendido. "Siempre, de repente, agradeces la pasión de la gente cómo se clava, cómo se mete, pero sí a veces hay que explicarles que solo es un personaje, y a veces pasa, que de repente me preguntan 'oye, ¿sí eres buena onda?'".

Y si queda duda de la personalidad en la vida real de Grettell, ella gusta de compartir momentos en sus redes sociales al lado de su hijo, optar por una vida sencilla y seguir impulsando su línea de belleza. Nada parecido a sus personajes.

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