Gonzalo Higuaín a corazón abierto: por qué nunca volvió a River, el cuadro del cual es hincha, la “pancita” para las fotos y aquel “club de amigos” de Messi

Gonzalo Higuaín juega en Inter Miami desde que dejó Europa y la selección argentina; a los 34 años, se abrió a varios temas duros y espinosos en una charla por televisión.
Gonzalo Higuaín juega en Inter Miami desde que dejó Europa y la selección argentina; a los 34 años, se abrió a varios temas duros y espinosos en una charla por televisión. - Créditos: @Mitchell Leff

Gonzalo Higuaín, sexto goleador de la historia del seleccionado argentino (32 tantos) y jugador de Inter Miami, se refirió a temas privados, otros de su vida como futbolista y sus lazos afectivos con diferentes equipos, y respondió sobre cuestiones de la actualidad, en una conversación en el canal TyC Sports. Retirado del equipo nacional en 2019, quedó en el recuerdo colectivo tanto por su contribución anotador como por su participación en las tres finales perdidas por la Argentina entre 2014 y 2016.

En un relato por momentos íntimo, Pipita describió, por ejemplo, cómo transitó la enfermedad y la muerte de su madre. “En 2016, después de perder la Copa América, me fui a Ohio a ver a Fede [su hermano] y me dijo que a mamá le habían detectado un cáncer de útero. Viajé a la Argentina y le dije a ella que no jugaba más hasta que se recuperara. No me importaba el fútbol ni nada, porque para mí la familia está antes que todo lo demás. Me dijo que si me retiraba, se moría antes. Fui campeón en Juve, me vio en la final de Champions y jugar con mi hermano, que era su máximo sueño. Si me hubiera retirado, no habría pasado eso”, relató el atacante. Su madre murió el año pasado, al día siguiente de que Federico asistiera a Gonzalo con un centro para el gol del 1-1 con Philadelphia. “Me costó volver a entrar en juego. Fue el golpe más grande de mi vida”, agregó el menor de los dos hermanos.

En su carrera pasó por otros momentos dolorosos, pero se los tomó con otra actitud. “Todos los años me sacaban fotos cuando se decía que estaba excedido de peso. En Juventus era donde más me exigían con eso. Me encantaba que pusieran esas fotos. A veces, hasta sacaba pancita. Después metía 30 goles por año”, recordó.

Higuaín nació en Francia hace 34 años y jugó en grandes equipos del mundo. Estuvo en River, Real Madrid, Napoli, Juventus, Milan y Chelsea antes de desembarcar en la liga estadounidense. Al conjunto millonario tuvo la oportunidad de regresar, pero lo descartó. “Tengo una gran relación con Marcelo Gallardo y hemos hablado de una posible vuelta, pero yo no estaba preparado mentalmente para ir a Argentina a jugar al nivel y en el ritmo que exige Marcelo. Para ir y no darle todo, preferí no ir. Si voy es para estar al 100%. Para ir a pasar el tiempo, no estoy”, expresó.

En tren de revelaciones, Higuaín dejó expuesto su verdadero fanatismo, asociado a un club en el que nunca jugó. “Mi tío Claudio me llevaba a ver a San Lorenzo y yo simpatizaba por San Lorenzo. Simpatizo y quiero que le vaya bien, hasta el día de hoy. El equipo de 1995 fue tremendo; yo tendría unos 8 o 9 años. Después, hice toda la carrera [en la Argentina] en River y por eso le tengo un cariño enorme”, sostuvo el delantero.

No obstante, otro club lo maravilló desde dentro. “Real Madrid es el mejor equipo de la historia. Tiene 14 Champions, es el techo más alto para un jugador. Llegar con 19 años y jugar hasta los 26 para mí fue tocar el cielo. Más que el Madrid no hay”, dijo, y recordó su rivalidad por aquellos tiempos con una de las estrellas del fútbol mundial actual. “A [Karim] Benzema lo conozco desde los 19 años. Competíamos por el puesto pero siempre nos llevamos bien, tenemos una buena relación. No me sorprende que sea el mejor delantero del mundo. Merece el Balón de Oro”, manifestó.

Gonzalo Higuaín tuvo un privilegio de muy pocos: fue compañero de Cristiano Ronaldo y de Lionel Messi. “Si no el primero, soy el segundo que más jugó con Cristiano y Messi. Son dos fenómenos, pero si tengo que elegir a uno, ése es Messi”, dijo, sin dudar.

Compartieron el seleccionado, incluida la final del Mundial Brasil 2014. “Llegó a la final del mundo el «club de amigos»... A veces hay que escuchar cada cosa... Si hubiésemos salido campeones del mundo, el «club de amigos» habría sido la gloria. A pesar de la carga, las críticas y la voracidad que tenían los comentarios hacia nosotros, jugamos dos finales más después de 2014. Imaginá la fortaleza mental que tenía ese plantel. Jugadores de otras selecciones nos decían «si lográbamos lo que habían logrado ustedes nos hacían estatuas en nuestro país, y a ustedes los critican». No podían entenderlo”, señaló. Y repasó una acción crucial de aquella tarde en el Maracanã: “Si existía el VAR, esa jugada en la que Neuer me hizo penal la revisan y calculo que lo cobran”.

Todo parece haber quedado atrás, y lejos. “Hoy no me mueve la aguja que me valoren o no. Lo dejo a criterio de los demás. Sí estoy convencido de que valoran por el resultado, y creo que en el fútbol no pasa todo por ahí. El exitismo pasa por el resultado y no por el recorrido, y no coincido. Como decía Bielsa, hay que valorar menos el resultado y más el recorrido”, culminó.