Sin Gallardo no es lo mismo: las figuras que se alejaron de River y perdieron el brillo fuera de casa

Alemania, Inglaterra, Italia, España, Portugal, Francia, Suiza, México, Rusia y Estados Unidos son diez de los países en los que diversos ex jugadores de River han recalado en el último tiempo. Pero, más allá cantidad de apellidos que se desarrollaron, crecieron, se potenciaron y emigraron durante el ciclo de Marcelo Gallardo, también hay una marcada particularidad negativa: la gran mayoría de los futbolistas de alta proyección y con futuro de selección no pudieron revalidar el nivel ni demostrar su potencial en otras ligas. Y se terminaron perdiendo en la nebulosa del exterior.

El caso de Exequiel Palacios parece ser un nuevo ejemplo. Bayer Leverkusen pagó 17 millones de euros brutos por su pase en diciembre pasado. Pero el joven de 21 años, consolidado en los planes del técnico Lionel Scaloni para la selección argentina, solo jugó 267 minutos en cuatro partidos (tres de titular) de los 17 que el club alemán disputó durante 2020. Es más, en las cuatro fechas que se jugaron de la Bundesliga tras el parate por la pandemia de coronavirus, fue tres veces al banco y nunca ingresó.

El presente de Palacios acrecienta la tendencia de los sucesivos jugadores que brillan en Núñez de la mano de Gallardo, pero luego no pueden dar (o no buscan dar) el salto de calidad o jerarquía que les permita explotar al máximo: Lucas Alario, Ramiro Funes Mori, Matías Kranevitter, Sebastián Driussi, Gonzalo "Pity" Martínez, Éder Álvarez Balanta y Marcelo Saracchi son alguno de los casos más jóvenes. Aunque la situación también se da entre los experimentados: Lionel Vangioni, Carlos Sánchez, Marcelo Barovero, Teo Gutiérrez y Camilo Mayada, de muy buenos rendimientos en River, no pudieron (o no quisieron) dar un salto de calidad en sus carreras al emigrar.

Aunque cada situación merece un análisis puntual, hay un hilo conductor que marca el recorrido: el famoso "salto económico". Sin instituciones de élite en el radar, los clubes de segundo nivel en Europa o el ascenso de ligas con fuerte poderío financiero como Estados Unidos o México hoy pueden ofrecer contratos mucho más atractivos que en la Argentina. Aunque, muchas veces, relegar la alta competencia y tomar ese camino puede perjudicar el desarrollo futbolístico.

Hace seis meses, poco después de la venta de Palacios a Alemania, el propio Gallardo reflexionó: "El deseo es que crezcan, que se desarrollen en otras ligas. Deportiva y económicamente. Pero yo les digo que revisen toda la película, que no vean solo la foto. Hay muchos futbolistas que están en buen nivel y son requeridos. Si viene Real Madrid a buscar a Palacios, no le voy a decir que no se vaya. Sería una incoherencia. Ahora, si viene un equipo de menor jerarquía y más poder económico de una liga menor, yo le diría que no se fuera, porque es de selección. Esa es mi advertencia. Que sean ellos los que decidan, no el entorno".

Por fuera del análisis puntual del DT, que puede incluir a varios jugadores, hay un aspecto clave en el análisis: River ha construido y fortalecido en los últimos años un núcleo duro de trabajo que hoy es ejemplo del fútbol sudamericano. Mantener la misma línea de juego, conseguir la aceptación (y entendimiento) de la exigencia constante tanto en los entrenamientos como en los partidos, sostener con armonía fuertes liderazgos que lleven adelante las riendas del plantel, potenciar la unión de grupo constantemente, amparar y desarrollar a los más jóvenes... son todos pilares del cuerpo técnico millonario que no se encuentran fácilmente. Y eso, a largo plazo, suele influir positivamente en los rendimientos.

El deseo es que crezcan deportiva y económicamente en otras ligas. Pero yo les digo que revisen toda la película, no que vean la foto.Marcelo Gallardo

Uno de los primeros aciertos en partir fue Ramiro Funes Mori, por quien Everton de Inglaterra abonó 14,6 millones de dólares en agosto de 2015. Entre lesiones críticas (recientemente volvió a pasar por el quirófano por tercera vez) y momentos de poca continuidad, el defensor no pudo nunca replicar su rendimiento en la Premier League ni consolidarse al 100% en la selección. Hoy, con 29 años, alterna en Villarreal de España como volante o central.

A su caso le siguió el de Matías Kranevitter. Tras jugar 94 partidos en River, Atlético de Madrid compró su pase por alrededor de 8 millones de euros a fines de 2015, pero tampoco se afianzó en el fútbol europeo. Entre 2016 y 2019 sumó 11 juegos con Atleti, 32 con Sevilla y 52 con Zenit de Rusia para un promedio de 23 por año. A comienzos de 2020, tras solo siete partidos oficiales durante el año anterior, emigró a Monterrey de México. A los 27 años, sigue buscando su lugar.

Tiempo después se se produjo la partida de Sebastián Driussi. Tras rechazar ofertas desde Inglaterra y Alemania, en junio de 2017, Zenit de Rusia abonó los 22 millones de euros brutos de la cláusula de salida del joven delantero. A los 21 años, partió con 27 goles en 105 partidos en Núñez y desde entonces no se movió de la Liga Premier de Rusia: lleva 21 tantos en 106 encuentros. Con 24 años, su futuro todavía puede tomar un destino que le permita crecer exponencialmente.

Más tarde, llegó la novela de Lucas Alario. A comienzos de 2017 rechazó una oferta de Tianjin Teda de China, que estaba dispuesto a pagar los 24 millones de euros brutos de su cláusula y le ofrecía un contrato anual de seis millones al año. Luego, en agosto, el delantero decidió irse: aceptó la propuesta de Bayer Leverkusen de Alemania, que abonó la cláusula. De marcar 41 goles en 82 partidos en dos años en River y tener chances de ir al Mundial con la Selección, el atacante pasó a tener una constante irregularidad en la Bundesliga sin lograr consolidarse. Hoy, con 27 años, acumula 34 tantos en 93 juegos (solo 51 de titular).

Pity Martínez es el caso más reciente. Tras 163 partidos y 35 tantos entre 2015 y 2018, uno de los emblemas del ciclo Gallardo partió hacia la MLS: se sumó al incipiente Atlanta United, que abonó 12,5 millones de dólares brutos (más 1,5 millones de plusvalía) por su pase. Hoy, próximo a cumplir 27 años, suele ser titular en el equipo estadounidense, pero está lejos de conseguir dar el salto a Europa o tener una chance en la selección nacional.

Éder Álver Balanta y Marcelo Saracchi también se suman a la lista. El defensor colombiano jugó 83 encuentros en River entre 2013 y 2016, tuvo un sólido paso por Basel de Suiza y hoy, con 27 años, es titular en Brujas de Bélgica, pero su futuro promisorio nunca se concretó. En tanto, el defensor uruguayo, que jugó 30 partidos en River entre 2016 y 2017 y emigró a Leipzig de Alemania por 12,5 millones de euros, no se consolidó en la Bundesliga y hoy, a los 22 años, está cedido en Galatasaray de Turquía.

La situación también se traslada a los jugadores de mayor experiencia. Lionel Vangioni (se fue en 2016 a Milan, recaló al año en Monterrey de México y hoy busca club); Marcelo Barovero (tras cuatro temporadas en el fútbol mexicano, se iría a Burgos de la tercera división española); Carlos Sánchez (pasó por Monterrey y hoy juega en Santos de Brasil); Teo Gutiérrez (divagó por Sporting Lisboa, Rosario Central y Junior); y Camilo Mayada (juega en Atlético San Luis de México) son distintos casos de una historia que parece repetirse una y otra vez.

Los cinco casos inversos

Gabriel Mercado: tras 11 goles en 144 partidos durante su estadía en River entre 2012 y 2016, Sevilla pagó 2,5 millones de euros por él. Se consolidó en la Selección y tuvo tres buenas temporadas en La Liga de España. Hoy tiene 33 años y está en Al Rayyan de Qatar.Germán Pezzella: jugó 69 encuentros y marcó cinco goles en River entre 2012 y 2015 hasta que Real Betis de España lo compró por 2,5 millones de euros. Tuvo dos buenas temporadas y partió a Fiorentina de Italia, donde es capitán. Es fija en la selección con 28 años.Guido Rodríguez: con 18 partidos en River, y tras un préstamo por Defensa y Justicia, emigró a Tijuana de México a los 22 años en 2016 por 1,5 millones de dólares. Un año más tarde, América de México pagó 7 millones de euros por su pase y desde enero está en Real Betis, que lo compró por 8 millones de euros y le puso una cláusula de rescisión de 80. Es otra carta de selección y tiene 26 años.Gio Simeone: solo marcó cuatro goles en 33 juegos en River entre 2013 y 2015, pero un buen paso a préstamo por Banfield le permitió partir en 2016 a Genoa de Italia por 5 millones de euros. Luego se lució en Fiorentina y hoy juega para Cagliari a los 24 años.Emanuel Mammana: con dos goles y 35 partidos oficiales en River, partió en 2016 a los 20 años a Lyon de Francia por 8 millones de euros. Tras una buena temporada, Zenit de Rusia lo fichó por 16 millones de euros, pero las lesiones no le permitieron lograr continuidad. A los 24 años, todavía tiene futuro de selección.