Los frescos de la Capilla Herrera regresan a Roma tras dos siglos en España

Roma, 16 nov (EFE).- Los frescos de la Capilla de Herrera, que hasta 1830 decoraban la iglesia de Santiago de los Españoles de Roma, regresaron a la capital italiana tras 189 años en el Museo del Prado de Madrid y el Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC).

Esta iniciativa, planteada por El Prado, reúne dieciséis frescos de temática religiosa diseñados por el pintor Annibale Carracci, contemporáneo del maestro Caravaggio, en el Palacio Barberini hasta el próximo 5 de febrero del 2023.

La exposición del Palacio Barberini incluye una estructura que replica la capilla original para la que fueron pensadas estas antiguas pinturas, en la iglesia de Santiago de los Españoles, ubicada en la emblemática plaza Navona de la Ciudad Eterna.

De este modo se pueden apreciar los frescos colocados del mismo modo en que fueron pensados por el maestro Carracci, que los pintó -y comisionó por sus problemas de salud- para decorar la capilla familiar del banquero español Juan Enríquez de Herrera.

"Desde el principio teníamos muy claro que esta es una exposición que debía tener tres etapas necesariamente, tenía que venir a Roma", ya que mostrar la capilla Herrera de Carracci "sin una etapa romana habría resultado completamente absurdo", explicó a Efe el subdirector de El Prado, Andrés Úbeda de los Cobos.

Annibale Carracci recibió el encargo de realizar este ciclo pictórico a principios del siglo XVI, basado en la vida del santo franciscano Diego de Alcalá, y aunque pintó algunos frescos, tuvo que dejar su trabajo por una enfermedad de la que no se recuperaría.

Sin embargo, aunque consiguió terminar el retablo -actualmente en la cercana iglesia de Santa María de Montserrat de los Españoles y expuesta-, encargó su culminación a otros pintores como Francesco Albani y a un pequeño grupo de colaboradores, entre los que se encontraban Domenichino, Giovanni Lanfranco y Sisto Badalocchio.

Tras una época de decadencia de la influencia española en Roma, en el siglo XIX la capilla fue desmantelada y se trasladaron los frescos a España, repartidos entre el Museo del Prado de Madrid y la Real Academia Catalana de Bellas Artes Sant Jordi de Barcelona.

Los frescos conservados en el Prado llevaban décadas sin ser expuestos, por lo que tuvieron que ser restaurados antes de la exhibición, detalló Úbeda de los Cobos.

"Ha sido un proceso muy largo y solo después de la restauración hemos podido soñar con hacer una exposición de este tipo", añadió.

Antes de esta iniciativa, que ha tardado casi diez años en materializarse, se conservaban por separado siete fragmentos en el Museo del Prado y nueve ​​en el Museu Nacional d'Art de Catalunya.

La muestra, incluirá talleres didácticos para niños, donde conocerán en detalle la figura de Annibale Carracci.

(c) Agencia EFE