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Fráncfort, la ciudad más beneficiada por el brexit: espera absorber parte de la City londinense

 El brexit no solo ha supuesto un terremoto en los mercados. Como siempre ocurre con toda crisis, hay muchos que se frotan las manos con los supuestos beneficios que van a caer después de que los árboles hayan sido agitados de manera brutal. Uno de los grandes ganadores de todo lo que se está viviendo en los parqués del mundo es la ciudad de Fráncfort. La capital económica de Alemania espera con los brazos abiertos a todas aquellas empresas que actualmente cotizan en la bolsa de Londres, y que quieran huir de la inestabilidad. 

La agencia Frankfurt Main Finance, encargada de seducir a las firmas para que muevan sus activos en la bolsa de la ciudad, ha creado una ‘línea caliente’ con las empresas londinenses para facilitar sus traslado al corazón del estado federado de Hesse. Esta organización está dispuesta a buscar oficinas y acomodo para las plantillas, amén de vender los estímulos fiscales de la ciudad. 

“Queremos enviar un mensaje alto y claro: ‘Bienvenidos a Fráncfort. ¿En qué podemos ayudarle?”, asegura el director de Frankfurt Main Finance, Hubertus Vaeth. “El cartel de bienvenida está colgado”, explica en declaraciones concedidas a la agencia de noticias Reuters. 

La oficina de marketing de la ciudad alemana espera que en los próximos cinco años se trasladen 10.000 banqueros desde Londres, lo que supone un 2 % de todos los trabajadores financieros que actualmente hay en la capital británica.

Fráncfort no es la única ciudad que ha puesto la alfombra roja a los activos londinenses. París también lo ha hecho, para estimular una tendencia que inauguró hace unos meses el banco HSBC, que anunció que el 20% de su plantilla iba a trasladarse a la capital de Francia desde Londres. 

Según informa El Confidencial, París ha creado una campaña llamada “Welcome to Europe” para atraer empresas inglesas que quieran huir de una más que presumible debilidad monetaria. Pero más allá de eslóganes, los directivos británicos no ven con buenos ojos una mudanza a la ciudad del Sena por los altos tipos impositivos de la ley francesa, que gravan hasta con un 75% los salarios más elevados. 

Dublín y Milán también han hecho algún tímido intento por atraer inversores, pero parece que el mercado natural para migrar de la City son las ciudades asiáticas: en ellas se vive el mismo amor por el dinero y por la laxitud en las normas regulatorias que a orillas de Thamesis. Y contra eso ni Fráncfort ni París pueden luchar.