Anuncios

Imágenes del horror en la República Centroafricana

  • Astita Tala es una musulmana que busca refugio e intenta escapar de la inseguridad en Bossangoa. Su marido y su hijo de 13 años fueron asesinados y arrojados a un edificio en llamas. Consiguió salvar a su hijo de 2 años vistiéndole como una chica. (Marcus Bleasdale/VII)
    1/13

    Las fotos de la República Centroafricana

    Astita Tala es una musulmana que busca refugio e intenta escapar de la inseguridad en Bossangoa. Su marido y su hijo de 13 años fueron asesinados y arrojados a un edificio en llamas. Consiguió salvar a su hijo de 2 años vistiéndole como una chica. (Marcus Bleasdale/VII)
    Photograph by Marcus Bleasdale/VII
  • Un luchador anti-bakala posa en el pueblo de Ndjo. Cientos de personas se han visto obligadas a buscar refugio en el monte y encuentran muchas dificultades porque los suministros de salud fueron destruidos o saqueados por las luchas entre los distintos grupos. (Marcus Bleasdale/VII)
    2/13

    Las fotos de la República Centroafricana

    Un luchador anti-bakala posa en el pueblo de Ndjo. Cientos de personas se han visto obligadas a buscar refugio en el monte y encuentran muchas dificultades porque los suministros de salud fueron destruidos o saqueados por las luchas entre los distintos grupos. (Marcus Bleasdale/VII)
    Photograph by Marcus Bleasdale/VII
  • Niños soldado de las fuerzas anti-bakala posan para la foto en uno de los pueblos cercanos a Bossangoa. Tienen pocas armas y llevan rifles de caza y arcos y flechas. (Marcus Bleasdale/VII)
    3/13

    Las fotos de la República Centroafricana

    Niños soldado de las fuerzas anti-bakala posan para la foto en uno de los pueblos cercanos a Bossangoa. Tienen pocas armas y llevan rifles de caza y arcos y flechas. (Marcus Bleasdale/VII)
    Photograph by Marcus Bleasdale/VII
  • Saidou Abdoulaye, originario del pueblo de Ben Zambe, en Bossangoa. Abdoulaye llegó a este lugar después de que las fuerzas cristianas anti-bakala atacasen las casas de los musulmanes en la región. (Marcus Bleasdale/VII)
    4/13

    Las fotos de la República Centroafricana

    Saidou Abdoulaye, originario del pueblo de Ben Zambe, en Bossangoa. Abdoulaye llegó a este lugar después de que las fuerzas cristianas anti-bakala atacasen las casas de los musulmanes en la región. (Marcus Bleasdale/VII)
    Photograph by Marcus Bleasdale/VII
  • Personas desplazadas encuentran refugio en una antigua fábrica en Bossangoa. Decenas de miles han sido desplazados y 50.000 habitan en este lugar. (Marcus Bleasdale/VII)
    5/13

    Las fotos de la República Centroafricana

    Personas desplazadas encuentran refugio en una antigua fábrica en Bossangoa. Decenas de miles han sido desplazados y 50.000 habitan en este lugar. (Marcus Bleasdale/VII)
    Photograph by Marcus Bleasdale/VII
  • Los restos quemados de una iglesia en Ouham-Bac. Más de 350 hogares fueron destruidos en las áreas cristianas y musulmanas por una serie de ataques en los útimos meses. (Marcus Bleasdale/VII)
    6/13

    Las fotos de la República Centroafricana

    Los restos quemados de una iglesia en Ouham-Bac. Más de 350 hogares fueron destruidos en las áreas cristianas y musulmanas por una serie de ataques en los útimos meses. (Marcus Bleasdale/VII)
    Photograph by Marcus Bleasdale/VII
  • Khadidja-Aladji-Adbou, de 30 años, posa para la foto. Adbou vio cómo sus tres hijos, su marido, la segunda esposa y los cuatro hijos de esta, fueron asesinados y ella recibió un disparo en la cabeza. (Marcus Bleasdale/VII)
    7/13

    Las fotos de la República Centroafricana

    Khadidja-Aladji-Adbou, de 30 años, posa para la foto. Adbou vio cómo sus tres hijos, su marido, la segunda esposa y los cuatro hijos de esta, fueron asesinados y ella recibió un disparo en la cabeza. (Marcus Bleasdale/VII)
    Photograph by Marcus Bleasdale/VII
  • Los luchadores seleka sentados en un punto de encuentro en la carretera en Bossangoa.Normalmente suelen saquear a la población local y le quitan la comida. (Marcus Bleasdale/VII)
    8/13

    Las fotos de la República Centroafricana

    Los luchadores seleka sentados en un punto de encuentro en la carretera en Bossangoa.Normalmente suelen saquear a la población local y le quitan la comida. (Marcus Bleasdale/VII)
    Photograph by Marcus Bleasdale/VII
  • Suministros médicos abandonados en mitad de una habitación quemada en un centro de salud en Ouham-Bac. (Marcus Bleasdale/VII)
    9/13

    Las fotos de la República Centroafricana

    Suministros médicos abandonados en mitad de una habitación quemada en un centro de salud en Ouham-Bac. (Marcus Bleasdale/VII)
    Photograph by Marcus Bleasdale/VII
  • Beldo Ibrahim junto a su hijo. Ella vio como mataban a su marido y a un hijo de 3 años delante de ella. (Marcus Bleasdale/VII)
    10/13

    Las fotos de la República Centroafricana

    Beldo Ibrahim junto a su hijo. Ella vio como mataban a su marido y a un hijo de 3 años delante de ella. (Marcus Bleasdale/VII)
    Photograph by Marcus Bleasdale/VII
  • La última fecha en la que la escuela estuvo en funcionamiento está escrita en la pizarra. Desde el 21 de marzo de 2013 nadie ha acudido al colegio. (Marcus Bleasdale/VII)
    11/13

    Las fotos de la República Centroafricana

    La última fecha en la que la escuela estuvo en funcionamiento está escrita en la pizarra. Desde el 21 de marzo de 2013 nadie ha acudido al colegio. (Marcus Bleasdale/VII)
    Photograph by Marcus Bleasdale/VII
  • Ashatu Isa tenía cinco hijos. pero uno de 3 años y dos adolescentes fueron asesinados delante de ella. (Marcus Bleasdale/VII)
    12/13

    Las fotos de la República Centroafricana

    Ashatu Isa tenía cinco hijos. pero uno de 3 años y dos adolescentes fueron asesinados delante de ella. (Marcus Bleasdale/VII)
    Photograph by Marcus Bleasdale/VII
  • Gente desplazada cruzan un río en Ndjo. Se esconden en la selva de los seleka y se acercan a las ciudades para buscar agua. (Marcus Bleasdale/VII)
    13/13

    Las fotos de la República Centroafricana

    Gente desplazada cruzan un río en Ndjo. Se esconden en la selva de los seleka y se acercan a las ciudades para buscar agua. (Marcus Bleasdale/VII)
    Photograph by Marcus Bleasdale/VII
Astita Tala es una musulmana que busca refugio e intenta escapar de la inseguridad en Bossangoa. Su marido y su hijo de 13 años fueron asesinados y arrojados a un edificio en llamas. Consiguió salvar a su hijo de 2 años vistiéndole como una chica. (Marcus Bleasdale/VII)
Un luchador anti-bakala posa en el pueblo de Ndjo. Cientos de personas se han visto obligadas a buscar refugio en el monte y encuentran muchas dificultades porque los suministros de salud fueron destruidos o saqueados por las luchas entre los distintos grupos. (Marcus Bleasdale/VII)
Niños soldado de las fuerzas anti-bakala posan para la foto en uno de los pueblos cercanos a Bossangoa. Tienen pocas armas y llevan rifles de caza y arcos y flechas. (Marcus Bleasdale/VII)
Saidou Abdoulaye, originario del pueblo de Ben Zambe, en Bossangoa. Abdoulaye llegó a este lugar después de que las fuerzas cristianas anti-bakala atacasen las casas de los musulmanes en la región. (Marcus Bleasdale/VII)
Personas desplazadas encuentran refugio en una antigua fábrica en Bossangoa. Decenas de miles han sido desplazados y 50.000 habitan en este lugar. (Marcus Bleasdale/VII)
Los restos quemados de una iglesia en Ouham-Bac. Más de 350 hogares fueron destruidos en las áreas cristianas y musulmanas por una serie de ataques en los útimos meses. (Marcus Bleasdale/VII)
Khadidja-Aladji-Adbou, de 30 años, posa para la foto. Adbou vio cómo sus tres hijos, su marido, la segunda esposa y los cuatro hijos de esta, fueron asesinados y ella recibió un disparo en la cabeza. (Marcus Bleasdale/VII)
Los luchadores seleka sentados en un punto de encuentro en la carretera en Bossangoa.Normalmente suelen saquear a la población local y le quitan la comida. (Marcus Bleasdale/VII)
Suministros médicos abandonados en mitad de una habitación quemada en un centro de salud en Ouham-Bac. (Marcus Bleasdale/VII)
Beldo Ibrahim junto a su hijo. Ella vio como mataban a su marido y a un hijo de 3 años delante de ella. (Marcus Bleasdale/VII)
La última fecha en la que la escuela estuvo en funcionamiento está escrita en la pizarra. Desde el 21 de marzo de 2013 nadie ha acudido al colegio. (Marcus Bleasdale/VII)
Ashatu Isa tenía cinco hijos. pero uno de 3 años y dos adolescentes fueron asesinados delante de ella. (Marcus Bleasdale/VII)
Gente desplazada cruzan un río en Ndjo. Se esconden en la selva de los seleka y se acercan a las ciudades para buscar agua. (Marcus Bleasdale/VII)
Yahoo en Español Noticias

Ya hace más de 60 años que la República Centroafricana se independizó de Francia, pero el país no ha logrado solucionar sus conflictos, convirtiéndose en uno de los dramas sin resolver tan habituales del continente africano. Hay continuos enfrentamientos entre grupos religiosos y el miedo y la desesperación hacen mella en la población. Es en este contexto en el que Marcus Bleasdale, un fotógrafo inglés que trabaja junto a Human Rights Watch, ha desempeñado su vida en los últimos años y ha dado como resultado un proyecto que recibe el nombre de Inferno (Infierno), donde muestra la situación del país. Sus tremendas imágenes le han servido para alzarse con el premio FotoEvidence.