Famosos por YouTube

El carácter viral que pueden adoptar los contenidos en la Web, y específicamente en YouTube, hace que en el término de días o en pocas horas un tema cubra los cinco continentes sin recurrir a costos de marketing, prensa y relaciones públicas. Por supuesto, nadie puede predecir quién logrará solo una fama efímera, aunque por ese logro gane una fortuna rápidamente y no tenga que pensar en trabajar como el resto de los mortales hasta el fin de sus días. Obvio, por uno que llega al éxito miles quedarán en el camino, pero igual vale la pena intentarlo. Tomemos algunos casos...

El más emblemático sea tal vez el carilindo canadiense Justin Bieber, que fue descubierto por un agente de artistas en 2008 por los clips que había subido al sitio YouTube. En aquella época, con solo 14 años, comienza su carrera ascendente, que se consolida un año después con su tema “My World”, que fue disco de platino en los Estados Unidos y consigue ser el primer cantante que coloca siete canciones simultáneamente en el ranking Billboard Hot 100. En 2010 logra ser el artista del año del American Music Awards. Sus éxitos continúan. Y la pata tecnológica de su fama sigue fuerte: tiene más de 30 millones de seguidores en Twitter.

No necesariamente la fama habla de aceptación. Tomemos el caso de Rebecca Black, una chica californiana nacida en 1997 que en 2011, con su tema “Friday”, alcanza los 167 millones de visualizaciones en YouTube. Pero las críticas especializadas que recibe son lapidarias. Los “dislike” que cosecha en la red para compartir videos son 10 veces superiores a los “like”. Pero eso no empaña que el tema se convierta en trending topic en Twitter. Por días. Y en algún momento el éxito se monetiza.

Sin ningún foco de conflicto como en el caso anterior, el primer peldaño a la fama de la escocesa Susan Boyle comenzó gracias a su participación en el programa Britain’s Got Talent cantando uno de los temas del musical “Les Misérables”. Su aspecto desalineado, fuera de los cánones de belleza aceptados por el común de la gente, en un principio solo consiguió sonrisas casi de burla. Pero fue empezar a cantar y jurado y público conocieron a la hermosa Susan Boyle, con una voz para envidiar. En los próximos tres días el video de su participación en el concurso de canto es visto por millones en YouTube, Facebook y Twitter. La vida de Susan Boyle cambió y, aunque salió segunda en el certamen, ya ha editado varios CD y fue nominada dos veces para el Grammy. Además, cumplió su sueño de cantar con Elaine Paige.

El más reciente fenómeno viral podemos asegurar que es el del surcoreano Park Jae-sang, en realidad más conocido como Psy, que logró que su pegadizo tema y danza “Gangnam Style” a mediados de este año fuera visto por la envidiable cantidad de 775 millones de veces. Incluso desplazó a Justin Bieber de los rankings del iTunes Music Video. No hablaremos aquí de sus cualidades musicales, el eje es otro: Psy no es el último artista que se hará exitoso instantáneamente gracias a la Web. Esta nueva forma de reproducción musical llegó para quedarse.