(FOTOS) Vladimir Putin: el hombre, el espía, el presidente

Es una de las figuras más enigmáticas de la escena mundial: 65 años, delgado y con cara de póker, alguien con un rostro y un temperamento ideal para ser espía. Y por supuesto, lo era. Putin nació en Leningrado en medio de la Guerra Fría. Antes de dar el salto a la política, fue abogado y agente del KGB. Ahora aparece principalmente en ceremonias públicas, estrechando la mano de otros líderes mundiales en la cumbre del G-20, o montando a caballo, sin camisa, en fotografías escenificadas destinadas a la propaganda.

Pero hasta los agentes secretos tienen familia y una vida personal, y gente a su alrededor con cámaras. Aquí van algunas imágenes, rara vez vistas antes, de un joven Putin criado en una sociedad comunista, practicando judo (es un maestro reputado) y sosteniendo en brazos a sus hijos. A pesar de su predilección por proyectar una imagen de macho a pecho descubierto, parece sentirse más cómodo con un traje y un sombrero inclasificables, o con un uniforme.

Su característica expresión facial, desde que era niño y cuando posa con sus hijas, se describe mejor como “cauteloso”; parece no haberse reído nunca, ni siquiera una sonrisa. El ex presidente George W. Bush dijo en unas declaraciones famosas tras un encuentro con Putin que le había mirado a los ojos y “pudo percibir su alma”. A ver si tú puedes hacer lo mismo.