Filippo Grandi cuestiona el plan del Reino Unido para frenar la llegada de pateras
Londres, 25 ene (EFE).- El alto comisionado de las Naciones Unidas para los refugiados, Filippo Grandi, consideró este jueves que la política que aplica el Gobierno británico para frenar la llegada de pateras en situación irregular por el Canal de la Mancha supone una "respuesta falsa" a los asuntos de inmigración.
En declaraciones hechas hoy a la emisora británica BBC Radio 4 desde Kiev (Ucrania), Grandi ha cuestionado la promesa hecha el pasado año por el primer ministro británico, el conservador Rishi Sunak, de terminar con la llegada de botes con inmigrantes indocumentados desde Francia y que representó una de sus cinco prioridades.
Grandi indicó hoy que los migrantes son "objetivos fáciles" y habló de la presión ciudadana sobre los asuntos de inmigración en los respectivos países y consideró que esa presión "está mayoritariamente inducida por los políticos que la alimentan. Lo manipulan, con frecuencia, a través de noticias falsas para ganar votos".
"Los migrantes, los refugiados son objetivos fáciles. Es mucho menos sexy y atractivo decir tenemos que remangarnos y trabajar en estos asuntos que decir vamos a echarlos y esto solucionará nuestros problemas, lo cual no ocurrirá", dijo.
Preguntado por la BBC, Grandi matizó que se refería a las políticas de 'frenar los botes' de Sunak y a la de 'construir un muro' con la frontera de México del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump.
"Esas son respuestas falsas que no abordan ni siquiera el problema de las llegadas (de migrantes)", apuntó.
Grandi también expresó preocupación por el controvertido plan británico para deportar inmigrantes a Ruanda, un proyecto propuesto por primera vez por el primer ministro británico Boris Johnson en 2022, y un aspecto central del mandato de Sunak.
En virtud de esa nueva ley, los inmigrantes que entren ilegalmente en suelo británico se enviarán deportados a Ruanda, que recibe una cuantiosa cantidad de dinero a cambio.
En noviembre de 2023, el Tribunal Supremo determinó que ese plan era "ilegal", tras lo que el Gobierno británico introdujo una nueva legislación de emergencia para estipular, en el legislación británica, que Ruanda era un país seguro.
Sobre ese espinoso asunto, Grandi consideró que algunos países "con más recursos" están ideando "sistemas con los que abdican las responsabilidades que tienen con los solicitantes de asilo y se las pasan a otros estados. Esto es contrario a los principios básicos de la protección de los refugiados".
(c) Agencia EFE