De la fiesta de Varsovia al silencio en Gdansk

Sevilla, 27 may (EFE).- El 27 de mayo de 2015 Varsovia vivió una nueva fiesta del Sevilla, la del cuatro título de la Liga Europa que logró ante el Dnipro ucraniano, contraste con el silencio que reina hoy en Gdansk, otra ciudad polaca que, justamente cinco años después, debía acoger la final de la presente edición del torneo.

El Estadio Nacional de la capital polaca fue el escenario al que llegó el equipo entonces entrenador por Unai Emery en busca de su cuarto título de campeón de la Liga Europa, el segundo que metería en su currículum el técnico vasco pero no el último, ya que un año después logró el tercero en Basilea (Suiza) ante el Liverpool inglés del alemán Jürgen Klopp.

En Varsovia, el Sevilla afrontó la final como vigente campeón, tras ganarle en la anterior edición en Turín (Italia) al Benfica de Lisboa, y en Polonia un tanto del polaco Grzegorz Krychowiak y dos del colombiano Carlos Bacca (3-2) le dieron otro título.

El Sevilla, inmerso esta temporada otra vez en esta competición, tenía la aspiración desde el inicio del curso de estar este miércoles en Gdansk para disputar una nueva final, pero la crisis sanitaria por la pandemia de coronavirus ha dejado momentáneamente en suspenso la Liga Europa.

El actual campeón es el Chelsea, que ganó el pasado año en Bakú al también inglés Arsenal (4-1), y ahora la UEFA estudia las posibilidades de la reanudación del torneo y sus fechas para llegar a la final de Gdansk.

El conjunto hispalense, entrenado por Julen Lopetegui, está emparejado en los octavos de final con el Roma, con la ida de la eliminatoria en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán la vuelta en el Olímpico de la capital italiana.

A la espera de una resolución, el Sevilla celebra este 27 de mayo su cuarto título del torneo mientras que la ciudad costera del Báltico espera fechas y rivales para recibir la final de 2020.

(c) Agencia EFE