Festival Cuba Nostalgia Miami mantiene vivas las raíces cubanas desde la libertad

El Festival Cuba Nostalgia está demostrando una vez más que Cuba y sus tradiciones son, sobre todo, la unión y el sentir de su gente, aunque esta se encuentre fuera de la isla, a poco más de 200 millas.

Pocos en Miami, considerada la otra Cuba, pero libre, se han querido perder la cita de la 23ª edición del festival Cuba Nostalgia, considerado uno de los eventos culturales cubanos más importantes del sur de la Florida, que cada año conmemora el Día de la Independencia de Cuba, celebrado este fin de semana en el Fair Expo Center, los días 21 y 22 de mayo, de 11 a.m. a 11 p.m.

“Este año la gran novedad es que todos los conciertos son gratis con la entrada de $20 y los niños menores de 10 años no pagan”, dice Peter Regalado, productor ejecutivo del Festival Cuba Nostalgia, que el sábado acogió a unas 10,000 personas y el domingo espera la visita de otras 10,000. “Para pasar la tradición, hay que recordar lo que nuestros padre vivieron en Cuba”.

Lugares más emblemáticos de Cuba

Al entrar en Cuba Nostalgia todos pasan por la alfombra roja, y a ambos lados una espectacular exhibición de autos clásicos de la época de 1940 y 1950, uno de los grandes atractivos de la feria, al igual que en la isla.

Diferentes generaciones de cubanos y familias de todas las nacionalidades, establecidas en el sur de la Florida, se han unido para recordar, aprender y transmitir de padres a hijos las raíces cubanas a través de la música, exhibiciones de arte y la gastronomía cubana en 14 espacios temáticos.

En dos grandes pabellones, con sus calles señaladas, se recrea la Ciudad de La Habana y sus lugares más emblemáticos.

El Malecón de La Habana y el Castillo del los Tres Reyes del Morro, construido a partir de 1901 para proteger la capital cubana del mar, es la primera parada tras la exhibición de autos y uno de los lugares más fotografiados de la feria.

“La gente que no ha podido visitar Cuba puede hacerse una idea con esta recreación de la extraordinaria magia del Malecón. Añoro la fuerza de la naturaleza del Malecón en su máxima expresión”, comenta tras ver esta réplica del icónico Malecón de La Habana Annie Gónzalez, una cubana criada en Puerto Rico desde los 7 años.

El Capitolio, que albergó al congreso hasta el 1959, es la siguiente parada en el mapa. En la puerta de entrada un monitor explica su historia desde su construcción en 1929. Lourdes y Heriberto Hernández, que han vivido en Miami por 39 años, cuentan que añoran profundamente “Varadero, Matanza y los paisajes cubanos. Cada vez que venimos a la feria revivimos todo de una manera muy intensa. El Capitolio es nuestro preferido”.

Ya en el interior del Capitolio una extraordinaria exhibición refleja cómo era la vida en Cuba a través de objetos de antes de la revolución de 1959. Presentada por el Nuevo Herald y Miami Herald, hay piezas tan auténticas como un hermoso humidor de puros de la Casa de José Martí, hecho con madera pura en 1940, que forma parte de toda una colección de humidores.

Esta exhibición también cuenta con las camisetas de beisbol de los peloteros del Club Teléfono de Cuba en 1940, de Bancarios en 1952 y de Electricidad en 1950.

‘Después de la feria me paso una semana llorando’

Lisette Gonshak, lleva 53 años en Miami; su padre era piloto de Cubana de Aviación. Ella echa de menos “el verdor y las playas de Cuba”, cuenta. “Me han fascinado las camisetas de béisbol y el humidor personal de Julio Lobo, de 1950”.

Julio Lobo Olavarría era muy conocido en Cuba por conseguir un contrato millonario con una famosa compañía inglesa para exportar azúcar. En 1920, Cuba era el mayor exportador mundial de azúcar.

Otros objetos históricos de esta exposición son teléfonos antiguos, gafas de vista, anuncios de revistas, botellas de refrescos que se tomaban en Cuba como la gaseosa Pijuán o el agua mineral de San Rafael, entre otros.

Dentro del Capitolio, Flor Falcón, que salió de La Habana hace 56 años, va acompañada de su hijo que viaja desde Orlando exclusivamente para acompañar a su madre a la feria. “En el centro del piso del Capitolio había como una estrella en cuyo interior se suponía que había un brillante que nunca se encontró”, recuerda. “Los jabones Candado de esta exhibición regalaban todos los años una casa fabulosa. Después de la feria me paso una semana llorando”.

Antes de salir de ese pabellón, está ubicada la Catedral de Cuba, el espacio más tranquilo de la feria con diez bancos largos típicos de las iglesias, donde la gente descansa del bullicio.

Cecilia Puig y Gabriela Gutiérrez son dos hermanas, nacidas en La Habana y criadas en Connecticut y New Jersey, que acuden a la feria con la hija de Gabriela, nacida en Miami. “Nunca estuve en la Catedral de Cuba porque salí de allí con 14 años, en 1965. Es muy linda esta réplica”, dice Cecilia.

A Jayden, de 12 años, nacido en Miami y nieto de Concepción Ribera, de 81 años, le ha encantado la Catedral de la Virgen. Dice que “mi abuelo me ha regalado dinero cubano de la época. Me gusta coleccionar moneda cubana. Me cuenta historias y algún día me gustaría visitar Cuba”.

Hay muchos lugares para visitar como Paseo del Prado, la recreación de El Solar, la Fábrica de Tabaco Partagás, fundada en 1845, y el pabellón del Cine Teatro Payret, que en la década de 1930 era considerado como la “Catedral del Cine Español”. Rene Álvarez, encargado de la programación de películas, presenta la serie “Orgullo Cubano”, seis horas, una hora por cada una de las seis antiguas provincia de Cuba, donde se cuenta la vida de los personajes más ilustres en todos los géneros.

Música cubana

Como no puede ser de otra manera, hay escenarios de música en cada rincón de los más de 160.000 pies cuadrados de la feria.

Una réplica de El Cabaret El Tropicana es el escenario de todos los conciertos. Luis Bofill y su Orquesta, Riverside Miami Band, Lena Burke y Albita actuaron el sábado 21 de mayo. Carlos Oliva, Marisela Verena, Nic N’taya y los comediantes Bonco Quiñongo e Iván Camejo, entre otras figuras, actúan el domingo 22 de mayo.

Daniela López, de 5 años, nacida y criada en Miami, hija del músico percusionista cubano Daniel López, que ayer formaba parte del concierto de Bofill y Lena Burke, nos decía que “lo que más le gusta de Cuba es ver las fotos de la playa de Varadero y la música cubana de mi papa”.

El Floridita, el restaurante famoso por su daiquiri y por haber sido uno de los lugares favoritos de Ernest Hemingway, y la Bodeguita del Medio, considerado el lugar de nacimiento del mojito, preparado desde su apertura en 1942, también cuentan con sus propios espectáculos y actuaciones. Willy Chirino estará el domingo a partir de las 4 p.m. en la Bodeguita.

Cuba Nostalgia ha conseguido una vez más transportar directamente a Cuba a todos: a los que sueñan con volver a sentir la magia de La Habana y sus lugares más importantes y a los que nunca han visitado el país de sus padres y abuelos.