Familia y pares influyen en consumo adolescente de cigarrillo electrónico

Por Andrew M. Seaman (Reuters Health) - Los adolescentes serían más propensos a utilizar el cigarrillo electrónico si sus amigos y su familia lo consideran aceptable, según sugiere un nuevo estudio. Los cigarrillos electrónicos, que se comenzaron a utilizar en China en el 2004, son dispositivos a batería que les permite a los usuarios inhalar vapores de nicotina. "Hay mucha preocupación en la comunidad de especialistas en salud pública de que los cigarrillos electrónicos estén atrayendo una nueva comunidad de personas que nunca fumaron cigarrillos", dijo la autora principal, Jessica Barrington-Trimis, de University of Southern California, Los Angeles. Recordó que estudios previos habían detectado una relación entre el consumo del cigarrillo tradicional y la versión electrónica. Pero el nuevo estudio sugiere que algunos adolescentes que empiezan a consumir cigarrillos electrónicos son un grupo único. Muchos adolescentes que dijeron que utilizaban esos dispositivos nunca habían fumado un cigarrillo tradicional. "Si pensamos en el consume del cigarrillo electrónico y del cigarrillo común como dos círculos, la superposición de ambos no es tan grande como lo esperado", dijo Barrington-Trimis. Al analizar datos del 2014 de 2084 adolescentes del sur de California, su equipo halló que el 25 por ciento había consumido cigarrillos electrónicos y que el 20 por ciento había consumido cigarrillos comunes. El 10 por ciento había utilizado un cigarrillo electrónico el último mes y un 6 por ciento, cigarrillos tradicionales. Los adolescentes tendían a consumir esos productos si los consumía su familia, si sus amigos también lo hacían o si sus pares lo consideraban una conducta aceptable, según publica el equipo en Pediatrics. El 14 por ciento pensaba que el cigarrillo electrónico no causa daños, comparado con el 1 por ciento que pensaba que los cigarrillos comunes tampoco son dañinos. La comprensión de los potenciales daños derivados de los dispositivos electrónicos o los cigarrillos comunes estuvo asociada con la probabilidad de que consumieran cualquiera de esos productos. En general, el consumo de ambos productos estaba asociado, aunque un 41 por ciento de los usuarios de cigarrillos electrónicos nunca habían fumado cigarrillos comunes. Los adolescentes pensaban que sus pares eran más propensos a aceptar el consumo de cigarrillo electrónico que el del cigarrillo común. Para los autores, el cigarrillo electrónico induciría la "renormalización" de los productos de tabaco. "Nuestros resultados realmente sugieren que hay muchos niños que están usando cigarrillos electrónicos", sostuvo Barrington-Trimis. Consideró que no hay estudios que permitan saber qué habría que decirle a la población sobre esos dispositivos. Por eso recomendó que los padres les digan a sus hijos que mientras avanzan los estudios sobre los efectos en la salud, se sabe que la nicotina afecta el desarrollo cerebral juvenil. Además, señaló que casi no existe información sobre las sustancias químicas utilizadas para producir los sabores y los aromas de los vapores. "Los padres deberían prestar atención a si sus hijos se reúnen con amigos que usan cigarrillos electrónicos", dijo Barrington-Trimis. FUENTE: Pediatrics, online 27 de julio del 2015