Familia de inmigrantes que huyó de gases lacrimógenos en frontera México-EEUU busca asilo

Por Carlos y Barria

TIJUANA, México (Reuters) - Miembros de un grupo de migrantes hondureños, incluyendo una mujer que fue fotografiada cuando corría con sus hijas para protegerlas de gases lacrimógenos hace varias semanas, comenzaron a buscar asilo en la frontera de Estados Unidos con México el lunes, según un testigo de Reuters y abogados.

El grupo estaba compuesto principalmente por adolescentes, pero también incluía a Maria Meza y sus hijos, quienes aparecieron en una fotografía que se difundió de manera viral, tomada por Reuters, cuando ella huían de los gases lacrimógenos lanzados por agentes fronterizos estadounidenses durante una protesta en la frontera el mes pasado.

Como este grupo de migrantes, otros miles parte de la denominada Caravana de Migrantes, y otros grupos, han esperado por meses en la ciudad fronteriza de Tijuana una oportunidad para pedir asilo pero se enfrentan a un sistema denominado "medición" que limita la cantidad de personas que pueden solicitar este beneficio cada día.

A veces, las autoridades fronterizas de Estados Unidos permiten que las personas consideradas vulnerables, como los menores no acompañados, sean procesadas más rápidamente. Los activistas dijeron que el grupo del lunes encaja en esa categoría.

El lunes por la tarde, los legisladores estadounidenses, Jimmy Gómez y Nanette Barragán, junto con abogados migratorios, acompañaron al grupo en el puerto de entrada de Otay Mesa en Tijuana, México, dijo el testigo de Reuters.

Agentes de Aduanas y Patrulla Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) habían dicho que el puerto de entrada estaba lleno, dijo Gómez. Rodeados de defensores y abogados, los migrantes se sentaron junto a un torniquete de metal, después de haber ido más allá de un cartel que marcaba la división entre México y Estados Unidos.

Pero el lunes por la noche, después de más de cuatro horas de espera, los funcionarios de CBP llegaron para dejar pasar a varios menores no acompañados.

Activistas de derechos humanos en Tijuana dijeron a Reuters que el proceso ha sido lento, desde hace varios meses, por las cargas de solicitudes de asilo en Estados Unidos tanto de centroamericanos, haitianos como de mexicanos que siguen huyendo de violentas ciudades del país.

El grupo de solicitantes de asilo formaba parte de grupos de miles de migrantes conocidos como caravanas que salieron de América Central y llegaron a Tijuana en los últimos meses.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró a las caravanas una "invasión" y envió varios miles de soldados para "endurecer" la frontera, incluso con alambre de púas.

Los activistas dijeron que la medición está destinada a disuadir a los solicitantes de asilo haciendo que el proceso sea arduo, mientras que los funcionarios estadounidenses mantienen que el sistema solo existe para gestionar el exceso de capacidad en los puertos de entrada.

CBP dijo en respuesta que este año había visto un aumento de más del 100 por ciento en los solicitantes de asilo procesados ​​en los puertos de entrada y que procesaba a las personas lo más rápido posible.

"Como lo hemos hecho durante varios años, cuando nuestros puertos de entrada alcanzan su capacidad, tenemos que administrar las colas y las personas que se presentan sin documentos", dijo la CBP.

A principios de este mes, una madre soltera con su hija de nueve años pudieron solicitar asilo en el puerto de entrada de San Ysidro después de que una congresista, que se encontraba de visita en el puerto, dijo a los oficiales de la CBP que estaban obligados por ley a procesarlos, de acuerdo con Lindsay Toczylowski, directora ejecutiva del Immigrant Defenders Law Center.

(Reporte de Carlos Barria en Tijuana, México; reporte adicional de Kristina Cooke, escrito por Christine Murray y Peter Cooney. Editado por Carlos Aliaga)