El exluchador brasileño explicó por qué le prestó su mansión a Jair Bolsonaro en Orlando: “Vi el negocio”
RÍO DE JANEIRO.– El antiguo luchador de artes marciales mixtas de la Ultimate Fighting Championship (UFC) José Aldo aseguró que la única razón por la que el expresidente de Brasil Jair Bolsonaro se hospeda en su mansión en Orlando, Florida, responde a una cuestión de negocios. “No estoy pensando en izquierda o derecha”, zanjó en una entrevista con Flow Podcast.
“Hay personas que piensan muy poco y no tienen visión de negocio”, dijo Aldo para criticar a quienes lo han atacado por recibir a Bolsonaro, quien se encuentra en Estados Unidos desde el pasado 30 de diciembre, evitando así tener que participar en la ceremonia de posesión del presidente Luiz Inacio Lula da Silva.
“Todo el mundo del lado contrario me ha atacado, pero mi jugada no tiene nada que ver con eso [...] Vi el negocio, no estoy pensando en izquierda o derecha, estoy pensando en negocios, que es lo que es la casa”, afirmó Aldo, quien habitualmente alquila la mansión por 2600 reales diarios (unos 500 dólares).
La casa en la que reside Bolsonaro, una de las dos que el ahora boxeador tiene en Estados Unidos, tiene habitaciones con temática Disney. En una de ellas tiene previsto colocar una placa en la que se lea ‘aquí estuvo el presidente de Brasil’. “Todo el mundo querrá verlo, sea de izquierda o derecha”, reveló.
“Presto la casa a todo el mundo. La casa tiene nueve habitaciones, es grande, tiene pileta, tiene jardín, tiene de todo. Mucha gente cae ahí, actores, actrices, cantantes, deportistas, no deportistas y amigos que me conocen, presto la casa, es normal. Cuando el tipo [Bolsonaro] me llamó para preguntarme le dije: ‘Vení a mi casa, ¿estás loco?’”, explicó.
Las declaraciones de Aldo limitando su acuerdo con Bolsonaro a asuntos estrictamente económicos contrastan con el apoyo público que le ha mostrado en los últimos años, compartiendo fotografías en redes sociales e incluso participando en un acto durante la campaña de las pasadas elecciones en San Pablo.
En aquella ocasión Aldo junto con otros luchadores como Maurício Rua y Fabrício Werdum, rieron de las bromas de un Bolsonaro que aseguró que Lula se había negado a debatir con él por un supuesto problema de “impotencia sexual”.
A sus 36 años, José Aldo da Silva Oliveira Júnior está considerado como uno de los mejores luchadores de la historia de la UFC. Fue dos veces campeón del peso pluma y el último campeón del peso pluma de la extinta World Extreme Cagefighting (WEC). En 2010, recibió el premio World MMA Awards al “Luchador del año”.
Agencia ANSA y diario O Globo/GDA