Exjugador Alejandro Villanueva comentará el Super Bowl, aunque no extraña la NFL

A diferencia de los que muchos pensarían, el exjugador de los Steelers de Pittsburgh de origen español, Alejandro Villanueva, acepta que no extraña la NFL. El extaclareador ofensivo de los Steelers se retiró en 2022 y ahora es comentarista de los juegos de futbol americano por FOX Deportes. Villanueva, de 34 años, pasó siete de sus ocho temporadas en la NFL con los Steelers, ocupando el puesto de tackle izquierdo con el equipo de 2014 a 2020. Jugó una temporada con los Ravens de Baltimore antes de retirarse tras la temporada 2021.

Villanueva dijo en una entrevista reciente con Los Angeles Times que su participación en la televisión es una oportunidad de explorar el mundo de los medios, además de que está en un ambiente divertido, con gente que disfruta. El exjugador hizo su debut el mes pasado durante el partido de los Giants ante los Eagles y será comentarista en el Super Bowl LVII este domingo en Glendale, Arizona (3:30 p.m.). Además de participar como analista de los juegos, también es parte de NFLEROs, durante la postemporada en FOX Deportes.

“Son gente muy buena, que tiene un ambiente muy familiar”, declaró Villanueva sobre su compañeros de televisión.

El hombre de seis pies y nueve pulgadas de estatura jugó futbol americano universitario en Army. En 2010 se fue sin ser reclutado en la NFL y optó por volver al servicio militar, convirtiéndose en un Ranger del Ejército (Army Ranger) antes intentar nuevamente una carrera en la NFL en 2014, uniéndose inicialmente a la liga como un extremo defensivo. Cambió de nuevo a tackle ofensivo al firmar con los Steelers a finales de agosto de 2014, y vio acción de temporada regular en la campaña siguiente.

Villanueva, nació en Meridian, Mississippi, pero a los seis meses sus padres lo llevaron a España, donde se crío, por lo que se considera “un inmigrante” en Estados Unidos. Eso influyó mucho en su decisión de ser un militar.

“Yo sabía que iba a ser un proceso bastante difícil, bastante emocional, digamos, pero sobre todo en cómo me iban a ver a mí en Estados Unidos, o sea, cómo un americano iba a verme como una persona que no hablaba muy bien inglés, una persona que no vive en este país, que tiene la cultura diferente. Entonces, yo creo que para mí es una cosa que fue muy importante. La asimilación de la cultura fue el hacerme valer mediante el ejército. El ejército me dio una identidad y me dio credibilidad en este país. Y para mí eso fue, digamos, el motivo detrás de haber estado en el Ejercito”, indicó Villanueva, quien fue a la preparatoria en Bélgica. “También es verdad que crecí muy cerca del Sueño Americano, en España hay una base en el sur de España. Siempre también admiré mucho lo que es la profesión de armas, como se dice en Estados Unidos, la cual siempre gira en torno de tener una familia, de cuidarse el uno al otro y de luchar por objetivos comunes que no sean individuales”.

Villanueva también se graduó con una maestría de negocios de la Tepper School of Business de la Universidad de Carnegie Mellon en 2019.

Durante la entrevista, Villanueva describió aquellos encuentros apasionados de futbol colegial entre Army y Navy, así como el ser un Army Ranger. También relató el año 2014 cuando decide dejar la militar por el futbol americano, una decisión que para muchos hubiera sido fácil, pero no para él. Hasta el día de hoy, Villanueva señala que extraña mucho la vida en el ejercito, a diferencia del futbol americano.

¿Cómo son esos duelos entre Army y Navy en el futbol colegial?

No quiero romperte este sueño. Pero la realidad es que los cadetes de las dos academias, sobre todo del Army, no tienen la oportunidad de salir de la academia más que una o dos veces al año. Entonces una de esas veces es el Army vs. Navy. Entonces si tú pones en contraste, las hormonas que van pasando por un joven de 18 a 21 años, las cosas que no tienes al alcance en la academia, como es el alcohol, la fiesta y gente que no tiene un corte de pelo ajustado. Siempre que pienso en el juego, pienso en lo bien que se lo van a pasar todos los cadetes celebrando esa oportunidad de estar fuera de la Academia. Me han llamado, y esto puede ser porque mis orígenes españoles, me han llamado, que soy una persona que tiene poca lealtad a lo colores de los equipos y de pequeño no me gustaban nunca los debates entre el Real Madrid y el Barcelona, no los entendía, no conseguía entender la rivalidad entre el Barcelona y el Madrid que está rompiendo el país, literalmente. Entonces también cuando me adentré en esta rivalidad del Army y el Navy, me pareció un poco más de lo mismo, pero incluso más, incluso más cómico porque los dos están en el mismo ejército y de hecho trabajamos juntos al salir. Me sabía muy mal el pretender no querer a la Navy, sobre todo cuando había crecido y había nacido en una base de Navy y además había intentado primero meterme a la Navy y yo quería ser Marine primero, pero era daltónico y no podía ver los colores y por eso me tenía que meter al Army. Entonces yo he sido un muy mal ejemplo, no solamente en mi historia en España, también en el Army e incluso aquí jugando profesional jugué para los Steelers y los Ravens, que son los rivales por excelencia de la liga profesional americana.

También te convertiste en un Army Ranger, algo que es muy complicado. ¿Qué fue lo que más aprendiste en ese proceso?

Bueno, aprendí bastantes cosas. La verdad es que sería difícil resumir en una frase en una entrevista, pero lo que mejor aprendes es a conocerte a ti mismo, a conocer los límites de la mente, a conocer los límites físicos que tienes y sobre todo, a cómo sufrir. Yo creo que esas tres cosas son las que más, las que más me hicieron pensar y crear mi tiempo en ejército.

Me imagino que todo eso también te ayudó en tu carrera de la NFL...

No, no hay muchas similitudes entre arrojarte ante otro hombre hasta que los aficionados se ponen a gritar y saltar de un avión en paracaídas, que es cometer un suicidio hasta que un sistema de bolsas de basura y cordones de zapato que te cojan en el aire te previene de una muerte segura.

Platícame ese momento cuando trataste en un inicio de entrar a la NFL, pero no pudiste, ¿qué tan difícil fue eso?

Lo que aprendí yo, por ejemplo, estando ahí en Los Ángeles, en Santa Mónica. El intentar llegar a hacer algo, el tema de las audiciones, algo muy popular ahí en el Hollywood, de Los Ángeles, el intentar meterme a una industria que busca algo. A lo mejor más gente se cree que lo tiene que la gente que lo puede demostrar de alguna manera. Como por ejemplo, hay gente que cree que tiene las aptitudes de ser cantante, pero realmente no todo el mundo puede ser cantante o no todo mundo puede ser actor. Pues lo mismo pasa en la NFL porque todo el mundo cree que puede jugar el NFL, pero realmente no todo el mundo puede entrar. Entonces a lo mejor ha sido un poco en mi caso, el ser un poco un "cabezota". A lo mejor tendría que haber dejado de intentarlo. Pero bueno, no sé, siempre tenía la percepción de que podía jugar la NFL y por eso lo intentaba, por saber si a ver si colaba, a ver si engañaba a alguien para poder entrar a la final. Tuve la suerte de engañar a un equipo, a los Philadelphia Eagles y después ya pues fui con los Steelers por unos años más.

Platícame de ese año 2014, que para ti fue muy clave. ¿Qué significó para ti ese 2014?

Fue un año bastante difícil, la verdad, porque tuve que hacer algo que, como hablábamos antes, para mí fue la crisis existencial más difícil y lo peor. La decisión más difícil que he tomado en mi vida para mí ha sido la de irme del Ejército. Una decisión muy complicada, una decisión que a lo mejor lo miraré por el resto de mi vida con, no solamente con arrepentimientos y a lo mejor con nostalgia también, porque yo crecí en una base y padre militar. Lo único que sabía hacer hasta que tenía 26 años era ir de uniforme, y un día me fui y me fui de ese mundo. Y ese mundo ha sido el más importante de mi vida. Es mucho más importante que el mundo del deporte. Mi padre nunca tuvo respeto a los deportistas y yo, sinceramente, tampoco tengo el mismo respeto que tiene la sociedad a los deportistas, tanto en España, como en México, como en los Estados Unidos.

Alejandro Villanueva, exjugador de la NFL y ahora comentarista

Yo creo que sí el deporte empezó en 1930, digamos así, o yo qué sé, en la época en la que realmente empezó a hacerse popular el ser atleta. Yo creo que a lo mejor la gente tenía otros, otros líderes y otra gente que quería aspirar. Y los atletas en muchos casos no son las personas adecuadas para ser modelos para seguir de la juventud. Entonces para mí el ser atleta no tiene el mismo respeto, el mismo glamur en mi mente, la misma la misma honra que ser militar. Entonces, aunque es verdad que estaba intentando entrar en la liga profesional americana y tenía el sueño que tiene mucha gente de jugar en la NFL, para mí lo que recuerdo de 2014 es que tuve que dejar el uniforme, que fue algo que me daba muchísimo orgullo siempre, en toda mi vida.

¿Extrañas más el Army que la NFL?

A ver, es que no es lo mismo. Los equipos de la NFL son equipos en el que tienes 53 compañeros individuales que trabajan para sí mismo en el intento de maximizar el retorno en su estancia en la NFL. También estás trabajando para una compañía que quiere también maximizar la audiencia en cada partido en todo el mundo. Te das cuenta que la NFL es una industria y que haya momentos que sean lógicamente espectaculares, como el ganar un partido grande ante los fans, un partido que va apretado con tus compañeros, que pasas mucho tiempo, existe un vínculo muy especial entre soldados. Existe un vínculo muy especial entre la milicia y un vínculo especial entre el hombre que está en el espejo y tú mismo cuando te miras con un uniforme, que es muy difícil de comparar. Entonces la NFL para mí siempre fue como una segunda carrera. Yo creo que la mayoría de la gente, la gente que juega en la NFL, es su primer trabajo, quiere decir que no han trabajado entre la universidad y la liga profesional, pero sin embargo yo tuve cinco años en los que estuve haciendo, pues un trabajo que requiere la misma pasión que requiere la NFL. Entonces, al ser tu segundo amor, a lo mejor es como un matrimonio, la segunda vez que te casas, a lo mejor ya no quieres a tu mujer igual que la que quisiste al principio. Entonces podría hacer esa comparación. Para mí, mi primer amor profesional fue ser soldado y ahora que he terminado con los dos, lógicamente puedo ver un partido de la NFL perfectamente y estar agustísimo con mis queridos compañeros Adrián (García Márquez) y Jessie (Losada), pero me cuesta más ver imágenes de soldados y no poder estar ahí y participar. Entonces yo creo que siempre, siempre estará para mí algo que admire y añore más. Como oportunidad para ganar dinero, cambiar la vida de mi familia, conocer Estados Unidos, la NFL también ha sido una experiencia, lógicamente sin comparación digamos.

Ya entrando al gran juego, ¿qué tipo de encuentro piensas ver en el Super Bowl entre Eagles y Chiefs?

Me he dado cuenta que por hacer esto de comentarista un par de partidos, lo que me he dado cuenta es que como el partido sea un equipo dominando al otro, se convierte en una tarea muy, muy difícil porque no se sabe de qué hablar. Entonces espero que sea un partido apretado hasta el final, en la que existan muchos de los temas que se ven en partidos de futbol americano con respecto a estrategia, con respecto a información que yo pueda a lo mejor explicar a los fans. Y para mí eso es lo que yo espero, porque como sea, como no sea un partido apretado va a ser un bastante difícil de comentarlo.

Pero ¿crees que sea apretado?

Yo quiero que sea cerrado. Lo que pienso yo, lo que pienso yo, es que en el futbol americano puede pasar cualquier cosa en cualquier partido y eso es lo que lo hace muy fascinante. No me atrevería a predecir nada. Yo creo que las predicciones en el futbol americano te hacen sentir como una persona que no entiende realmente el deporte. No es como a lo mejor el soccer, el futbol europeo, o la final de los 100 metros. en el futbol americano hay miles y miles y miles de variantes que puede entrar en el partido. Y tengo ganas de ver efectivamente si al final puede pasar cualquier cosa, puede pasar lo que no espera nadie.

Me gustar mucho el contar mi historia y contar cómo ha sido para mí el llegar a Estados Unidos y el acostumbrarme a todas lecciones de los valores de este país. Y me gusta hacerlo mediante el futbol americano. Me gusta hablar de la vida a la vez que hablo del futbol americano. También tenemos muchas personalidades que van a estar retransmitiendo el partido. Tenemos a Adrián que proviene de California, así como Jessie que viene de Cuba. Entonces yo creo que una persona hablando con el acento gallego, acento cubano y acento mexicano hablando de futbol americano, es algo que no se pueden perder los hispanohablantes de este país y de todo el mundo que quieran adentrarse en este deporte tan fascinante, del que he tenido el privilegio de poder conocer muy íntimamente por ocho años, así que espero verles, escucharles y espero que, como decíamos antes, que sea un partido fascinante para que sea fácil de transmitir.

Este artículo fue publicado por primera vez en Los Angeles Times en Español.