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Estado brasileño de Bahía pide a la Justicia aval para la vacuna Sputnik V

Recife (Brasil), 15 ene (EFE).- El estado brasileño de Bahía (nordeste) pidió este viernes a la Procuraduría Regional hacerle una solicitud al Supremo Tribunal Federal (STF), la máxima corte de Justicia del país, para la compra y utilización en carácter de emergencia de la vacuna rusa anticovid Sputnik V.

"Tenemos un contrato de prioridad en el suministro y tenemos condiciones de colocar esa vacuna en Bahía. No podemos ver morir pasivamente ciudadanos de Bahía y brasileños", declaró en un comunicado, el gobernador Rui Costa, del opositor Partido de los Trabajadores (PT).

Bahía y Paraná (sur), estado fronterizo con Argentina y Paraguay, tienen un acuerdo preestablecido con el Gobierno de Rusia para la adquisición y uso de la vacuna rusa, que todavía no forma parte del cuadro de inmunizantes analizados por la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa, regulador).

"En una absoluta insensibilidad, las autoridades federales están de brazos cruzados y solo repiten que no pueden hacer nada. Era mejor cada uno pedir la renuncia o dimisión del cargo que ocupan si no pueden hacer nada", completó Costa, sin hacer referencia directa al presidente, Jair Bolsonaro.

Bolsonaro, uno de los líderes mundiales más escépticos frente a la pandemia, anunció este viernes un nuevo atraso de la logística para traer dos millones de dosis de la vacuna anticovid del laboratorio anglo-sueco AstraZeneca fabricadas en India, una noticia que impulsó un cacelorazo de protesta en varias ciudades.

Con el inminente aplazamiento del inicio de la campaña masiva de vacunación, que está previsto para el miércoles, Bolsonaro ahora apeló a la vacuna del laboratorio chino Sinovac y a la que el jefe de Estado llegó a llamar despectivamente "la de aquel país".

El Instituto Butantán, referencia inmunológica en Latinoamérica y adscrito al Gobierno del estado de Sao Paulo, encabezado por Joao Doria, uno de los principales rivales políticos de Bolsonaro, ya cuenta con seis millones de dosis listas del laboratorio chino Sinovac e inició la producción local del inmunizante.

En la carrera política por tener primero la vacuna, Bolsonaro apostó todas sus fichas en la producida por AstraZeneca y la universidad británica de Oxford, con transferencia de tecnología para la estatal Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz) y anticipó la compra de 110 millones de dosis.

No obstante, sin tener el inmunizante, el Gobierno federal solicitó al Instituto Butantan sus seis millones de dosis, inicialmente reservadas para el estado de Sao Paulo, el más afectado por la pandemia, para la campaña nacional de vacunación.

La Anvisa decidirá el próximo domingo sobre el uso en carácter de emergencia de las vacunas de Sinovac y AstraZeneca, las únicas que han presentado la documentación para el aval y su uso en carácter de emergencia.

Otras dos vacunas, la del consorcio estadounidense-alemán Pfizer-BioNTech y la de la belga Janssen, brazo europeo de la multinacional norteamericana Johnson & Johnson, realizan también en Brasil estudios de fase tres fases con voluntarios, pero ninguna ha pedido al regulador su uso de emergencia hasta el momento.

Las vacunas Sputnik V y Covaxin, del laboratorio indio Bharat Biotech y que pretende ser adquirida por las clínicas particulares, pueden entrar en el cuadro de inmunizantes a pesar de no haber tenido estudios previos en el país siempre y cuando reciban el aval del ente regulador sanitario.

Brasil superó este viernes las 208.000 muertes relacionadas a la covid-19 y acumula casi 8,4 millones de casos confirmados.

(c) Agencia EFE