Esta madre no puede contener las lágrimas al ver a su hijo autista abrazar por primera vez

Kainoa de cinco años es un niño con Síndrome del Espectro Autista que siempre ha tenido problemas para mostrar sus emociones físicamente. Su madre Shanna Niehaus no podía contener el llanto cuando vio a su hijo correr emocionado a abrazar a un perro, Tornado. La magia se producía gracias a la ONG 4 Paws for Ability que proporciona perros entrenados a niños con alguna discapacidad. Los que presenciaron la escena aseguran que el de Kainoa y Tornado fue amor a primera vista.