El espionaje interior alemán ve una amenaza en militantes de Estado Islámico encarcelados

Berlín, 19 dic (EFE).- El jefe del espionaje interior alemán, Thomas Haldenwang, advirtió de la amenaza para la seguridad que suponen los militantes de la organización terrorista Estado Islámico (EI) que cumplen condena en cárceles alemanes, donde en muchos casos persiste el radicalismo.

"Tenemos que constatar que con frecuencia la radicalización no disminuye", dijo el presidente de la Oficina Federal para la Protección de la Constitución (BfV) en una entrevista a los medios del grupo Funke en el quinto aniversario del atentado contra un mercadillo navideño en Berlín que dejó entonces doce muertos y recientemente una víctima más.

Ante la salida de prisión el año que viene de militantes que habrán cumplido su pena en Alemania tras regresar de la zona de conflicto, Haldenwang subrayó que es necesario que el servicio interior examine cada caso individual y sepa "qué pasa en las cárceles" y "qué personas siguen radicalizadas".

Para ello debe existir un intercambio intensivo de información entre la Justicia y los organismos de seguridad, algo en lo que ya se está yendo por buen camino, aseguró.

Agregó que los círculos islamistas se han visto fortalecidos en Alemania por la toma de poder de los talibanes en Afganistán, al menos en cuanto a un impulso "a nivel propagandístico", ya que "se celebra el supuesto 'triunfo' sobre los infieles".

Esta tarde el presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier, la presidenta del Bundestag (cámara baja) y el alcalde-gobernador saliente de Berlín, Michael Müller, participarán en un acto ecuménico en la Kaiser-Wilhelm-Gedächtniskirche, la iglesia en torno a la que se extiende el mercadillo navideño objeto del atentado hace cinco años.

Steinmeier y Müller pronunciarán sendos discursos tras la ceremonia religiosa y después se leerán los nombres de las víctimas ante el lugar de recuerdo situado en las escaleras hacia la iglesia.

A las 20.02 horas, momento en el que se perpetró el atentado, sonarán trece campanadas en recuerdo a las trece víctimas.

El autor del atentado, el tunecino Anis Amri, disparó al conductor de un camión para hacerse con el vehículo, con el que irrumpió el 19 de diciembre de 2016 en el mercadillo navideño y arrolló a la multitud, acción que dejó once muertos y un centenar de heridos.

El ataque terrorista se cobró el pasado 5 de octubre su víctima número trece con la muerte de Sascha Hüsges, de 49 años, como consecuencia de las graves lesiones que le dejó un fuerte golpe que recibió en la cabeza, probablemente causado por un viga, cuando acudió a socorrer a las víctimas.

(c) Agencia EFE