Envalentonado por su histórico triunfo, Johnson acelera el Brexit

PARÍS.- "Dejaremos la Unión Europea el 31 de enero próximo. No hay más 'peros'", advirtió Boris Johnson ayer, en su primera declaración después de la histórica victoria de su Partido Conservador en las elecciones legislativas. La satisfacción del primer ministro británico estuvo a la altura de su triunfo. "Ganamos la confianza de gente que jamás votó por los conservadores. Esas personas solo quieren un cambio. Nosotros no podemos abandonarlas", dijo Johnson. Los conservadores dispondrán de una mayoría absoluta de 365 bancas de las 650 de la Cámara de los Comunes. Su gran adversario, el laborismo de Jeremy Corbyn, tendrá 203 diputados, su peor derrota desde 1935.

Corbyn anunció ayer que dejará el liderazgo del partido antes de las próximas elecciones.

El Partido Nacional Escocés (SNP) también celebró sus resultados, tras obtener 48 de las 59 bancas escocesas de la Cámara. Radiante, su líder, la primera ministra Nicola Sturgeon, aprovechó para reclamar un nuevo referéndum sobre la independencia de Escocia.

"Johnson tal vez tenga mandato para hacer salir a Inglaterra de la UE, pero no lo tiene para obligar a Escocia a hacerlo. Nuestra nación no votó en favor del Brexit. Por eso debemos tener el derecho de escoger nuestro destino", declaró. Escocia votó 62% en favor de la permanencia en el bloque en la consulta de junio de 2016.

En todo caso, su amplia victoria permitirá a Johnson hacer ratificar rápidamente por el Parlamento el acuerdo de salida que negoció con la UE, a fin de dejar el bloque el 31 de enero próximo.

A partir de ese momento, sin embargo, comenzará el arduo camino de la negociación de un acuerdo de libre comercio con la UE antes de fines de 2020. Ese periodo de transición podría ser prolongado hasta diciembre de 2022, pero Johnson prometió durante la campaña que no excedería diciembre de 2020.

"¡Felicitaciones a Johnson por su formidable victoria!", escribió Donald Trump en Twitter. "Gran Bretaña y Estados Unidos podrán concluir un nuevo y masivo acuerdo comercial después del Brexit. Ese convenio podrá ser mucho más importante y más lucrativo que cualquier otro que podría obtener con la UE", agregó.

La realidad no es tan así. El 47% de las exportaciones del Reino Unido van a la UE, donde no pagan ningún impuesto. Ningún especialista imagina cómo Trump podría ofrecer mejores condiciones a Johnson.

El ambiente era mucho más reservado ayer en Bruselas, donde los otros 27 líderes de la UE estaban reunidos en cumbre. Por un lado, todos esperaban una victoria clara de uno u otro partido que permitiera poner término a una interminable saga, que envenena desde hace tres años la vida del bloque. Por el otro, nadie oculta su preocupación por lo que podría pasar en la etapa siguiente: la definición de una nueva relación con Londres.

"Es importante hallar la mayor visibilidad lo antes posible", dijo Charles Michel, nuevo presidente del Consejo Europeo, invitando a Londres a "cooperar de buena fe con Bruselas". El mensaje fue claro y firme: la UE está dispuesta a establecer relaciones "lo más estrechas posibles" con Gran Bretaña, a condición de que este no se convierta en un competidor "desleal".

En claro, si Johnson persiste en su intención de llegar al futuro acuerdo de libre comercio antes del 31 de diciembre de 2020, es posible que el Reino Unido salga con un no deal.

Para que así no suceda, Londres debe solicitar una extensión del periodo de transición antes del 1° de julio. De lo contrario, la salida plena y definitiva se realizará sin acuerdo, con el riesgo, sobre todo, de una competencia desleal de parte de Gran Bretaña, caracterizada por medidas de desregulación y dumping fiscal, social y medioambiental.

"Habrá un competidor en nuestra puerta", advirtió la canciller alemana, Angela Merkel. A su juicio, esta nueva realidad debe llevar a los europeos a actuar y decidir con más rapidez. El presidente francés, Emmanuel Macron, que por su parte se congratuló de que "el momento de la claridad haya llegado", también afirmó que "los 27 deben asegurarse de que exista una competencia justa y defender sus intereses estratégicos".

Para Bruselas, concluir el futuro acuerdo de libre comercio con Londres antes de diciembre de 2020 "no es realista". Así lo explicó el jefe de negociadores de la UE, Michel Barnier. "Haremos todo lo posible para lo que califico de minimun vital, a fin de establecer nuevas relaciones con Londres antes de la fecha prevista", dijo, sin ocultar su escepticismo. Para Barnier se necesitarán uno o dos años suplementarios para concluir una negociación de esa amplitud.

La Comisión Europea prepara un mandato de negociación que estará listo el 1° de febrero. Esa será la "hoja de ruta" de Barnier, confirmado en su papel de negociador por la nueva dirección de la UE. Todos se preguntan, sin embargo, si 11 meses serán suficientes para que pueda finalizar uno de los acuerdos de libre comercio más complejos y ambiciosos del bloque.

Por el momento, la consigna es no endurecer el tono con Johnson. Para Macron, lo importante es conservar "los lazos tan especiales" que unen a Europa y Gran Bretaña.