La sobrina de Donald Trump asegura que la salud mental del expresidente se ha deteriorado

Justo un año después de que una multitud irrumpiera en el Capitolio de los EEUU con la esperanza de mantener a Donald Trump en el cargo en contra de los deseos de los votantes estadounidenses, su sobrina, la psicóloga clínica Mary Trump hacía todo lo posible para desconectarse del mundo durante sus vacaciones en los territorios británicos de ultramar.

Hasta que su tío Donald asumió la presidencia en 2017, era mucho más fácil para Mary, la hija del difunto hermano de Trump, Fred Trump Jr., evitar las noticias, y viceversa. A diferencia de la mayoría de su familia, ella llevaba una vida relativamente tranquila lejos del centro de atención de los medios de comunicación que muchos de sus parientes buscaban rutinariamente.

Horrorizada por el ascenso de Trump a la cima de la política estadounidense, ella cooperó con el trío de reporteros del New York Times que trabajaba en lo que en octubre de 2018 se convirtió en una noticia de cómo su tío, su hermano y su hermana (una jueza federal de apelaciones) presuntamente la defraudaron a ella, a su hermano y al gobierno por millones y millones de dólares mediante una variedad de esquemas fiscales dudosos.

La noticia ganó un premio Pulitzer, pero su rol como fuente del Times permaneció en secreto hasta el verano de 2020, cuando ella lo reveló en un libro donde dijo todas sus verdades, Too Much and Never Enough: How My Family Created the World’s Most Dangerous Man (Demasiado y nunca suficiente: cómo mi familia creó al hombre más peligroso del mundo).

El libro arrojó nueva información sobre los orígenes de la bomba del Times, así como otros detalles desconocidos sobre el miembro más famoso de su familia, incluida una acusación presentada por Maryanne Trump Barry (jueza jubilada del tribunal de apelaciones y hermana del presidente) de que Trump le pagó a alguien para tomar sus exámenes de ingreso a la universidad.

Cuando The Independent se puso en contacto con ella en el aniversario de los disturbios del Capitolio, Mary dijo que lo último que había escuchado sobre su tío Donald antes de su viaje fue cuando anunció la cancelación de una conferencia de prensa el 6 de enero, la cual conmemoraría el primer aniversario de la insurrección en el Capitolio.

Esto fue antes de que el presidente Joe Biden rompiera una racha de un año de no mencionar a su predecesor, con un discurso pronunciado desde el Salón Nacional de las Estatuas, en el que criticó a Trump por inventar y difundir “una red de mentiras sobre las elecciones de 2020”.

También fue antes de que Trump se embarcara en una rabieta que duró varios días, cuando publicó un comunicado tras otro desde su comité de acción política “Save America”. En ellos atacó los comentarios de Biden y los calificó del “último suspiro” de un “establishment corrupto y desacreditado de medios y políticos de izquierda” y repitió las extravagantes teorías de conspiración que han encontrado audiencia entre los nacionalistas blancos y los espectadores de los medios de comunicación de derecha en el año transcurrido desde que dejó el cargo bajo la nube de la insurrección que fomentó.

En los días entre su derrota y los disturbios del 6 de enero, él hizo lo que ella había predicho, pues antes declaró para The Independent que su tío era "psicológicamente incapaz de procesar" su derrota, y predijo que se involucraría en todo tipo de tumultos antes de dejar el cargo.

"Interferir con una transición pacífica del poder es obviamente malo, al igual que socavar la legitimidad de la administración entrante... pero, ¿quién sabe en qué otro tipo de actividades violentas se va a involucrar?", cuestionó en ese momento.

“Si solo él hiciera esas cosas, habría sido completamente obvio que solo él estaba haciendo esas cosas, y solo hubieran servido para humillarlo aún más y deslegitimarlo”, continuó. “Pero no es solo él, y lo están ayudando a socavar un proceso que ha estado vigente durante más de 240 años, y lo están haciendo de una manera que dejará un daño duradero, pase lo que pase”.

Pero cuando The Independent le preguntó acerca de sus arrebatos más recientes, ella dijo que no se dio cuenta de inmediato porque no presta tanta atención a lo que dice su tío a diario.

“Normalmente nunca lo busco”, dijo. “Y dado que canceló su rabieta en Mar-a-Lago, asumí... bueno, ¿por qué asumiría que iba a hacer lo más inteligente y mantener la boca cerrada?”.

Incapaz de procesar "la lesión narcisista más grande de su vida"

En cierto sentido, Donald Trump tiene pocas razones para hacerlo. Aunque pareció haber un breve momento en los días posteriores al peor ataque al Capitolio desde 1814, en el que podría haber estado a punto de convertirse en persona non grata dentro del Partido Republicano, ese momento pasó rápidamente.

Hoy en día, Trump cuenta con un fondo de financiación de US$100 millones para repartir con generosidad entre los republicanos que le sean lo suficientemente leales como para repetir sus afirmaciones falsas y ganar elecciones a puestos desde los que podrían contribuir a inclinar las elecciones a su favor en caso de que él se postule por parte del Partido Republicano en las elecciones presidenciales de 2024.

Pero Mary Trump, exinstructora de nivel universitario, que ha impartido cursos de trauma, psicopatología y psicología del desarrollo, y que tiene un doctorado en psicología clínica, tiene una opinión diferente sobre la aptitud de su tío para otra campaña o mandato en la Casa Blanca.

En su opinión, no tener el estrés de la presidencia sobre sus hombros, algo que sería un alivio significativo para la mayoría, no tendría un impacto positivo en la salud mental de Trump porque es incapaz de procesar su derrota ante Biden.

“Alguien con el grado y la gravedad de los trastornos psicológicos que él tiene no mejora sin algún tipo de intervención terapéutica”, comentó. “Al igual que con cualquier otra enfermedad no tratada, las cosas no mejoran milagrosamente, especialmente cuando se tiene en cuenta el hecho de que ha estado bajo una enorme cantidad de estrés (probablemente sufrió la lesión narcisista más grande de su vida en 2020) e independientemente de las muchas mentiras que se dice a sí mismo o a los demás, es un perdedor”.

Entre su comité de acción política y la pequeña oficina que le otorga la Ley de expresidentes, ha mantenido en su nómina a algunos exasesores de la Casa Blanca, incluido el estratega en jefe Stephen Miller y el excaddy de golf convertido en subjefe de gabinete de la Casa Blanca, Dan Scavino.

Pero Mary Trump dijo que la presencia de sus exasistentes, además de otros participantes de Trumpworld, como la portavoz Liz Harrington y, en ocasiones, el exjefe de gabinete de la Casa Blanca, Mark Meadows, no ayuda porque esas personas “no se preocupan por él” y “tienen un interés nulo en su bienestar”.

Bajo tales circunstancias, no prevé que su tío sea más lúcido en el corto plazo.

“Sería, creo, imposible para él haberse mantenido en el mismo nivel o haber mejorado. Creo absolutamente que su condición se ha deteriorado”, señaló.

Sin embargo, cuando The Independent cambió el tema de conversación a la miríada de investigaciones en las que está involucrado Trump, incluido el trabajo del comité selecto de la Cámara que investiga la insurrección del Capitolio, ella comentó no estar tan segura de que el trabajo del comité selecto tendrá consecuencias.

El peso de la investigación del ataque al Capitolio

Según fuentes del comité, el panel planea comenzar a emitir una serie de informes y realizar audiencias televisadas en horario de máxima audiencia en las que mostrarán lo que Trump sabía, cuándo lo supo y lo que hizo, o no hizo, durante el 187 minutos en los que el Capitolio estuvo sitiado por una turba de sus seguidores.

The Independent se ha puesto en contacto con un portavoz de Trump en busca de comentarios sobre la declaración de su sobrina de que sus asociados actuales “no se preocupan por él” y “tienen un interés nulo en su bienestar” y sus comentarios sobre su condición mental en deterioro. El portavoz de Trump aún no había respondido en nuestra fecha límite.

Aunque no se detiene en todas las noticias sobre su tío como lo hacía cuando esperaba que perdiera ante Biden en 2020, Mary Trump sí vio la reunión más reciente del comité selecto, cuando los miembros del comité dieron a conocer una serie de mensajes de texto que les dio el exjefe de gabinete de su tío, Mark Meadows.

Ella describió haber vivido la reunión de dos maneras diferentes.

“De cierta manera, la viví de dos maneras, en primer lugar la viví como una persona ajena que sabe que se cometieron crímenes horribles, y no entiendo por qué está tomando tanto tiempo. Porque es difícil entender que hay una gran diferencia entre el tiempo legal y el tiempo político, o entender… de una manera visceral, que incluso si sabes que se cometió el crimen, todavía existe este proceso muy metódico y prudente que necesita ser revisado para asegurarse de que las cosas estén bien definidas”, declaró.

“Por otro lado, sin embargo, no sé si estoy sorprendida, pero estoy bastante impresionada por la profundidad y amplitud de esta investigación. También estoy increíblemente impresionada con el profesionalismo de este comité... como en la última audiencia que tuvieron, pienso que fue increíblemente convincente”.

Sin embargo, Mary Trump se mostró escéptica sobre la posibilidad de que cualquier cosa que haga el comité tenga mucho efecto en el expresidente, a diferencia de la investigación del juicio político de 2019 que lanzó a Trump a una espiral de ira que provocó tuits de conspiración y apariciones públicas desquiciadas, como su conferencia de prensa del 2 de octubre de 2019 con el presidente finlandés Sauli Niinistö.

“No estoy del todo segura de que [las audiencias] tengan un impacto directo en él porque está muy aislado”, aseguró. “Pero ciertamente comenzará a alejar a la gente de él... no a la secta, pero los 74 millones de personas que votaron por él no estaban todos en la secta, simplemente no prestan atención”.

“Hay mucha gente por ahí que realmente, si solo están viendo Fox News, realmente no saben lo que pasó. Pero... si las audiencias se televisan con regularidad, será muy difícil para mucha gente seguir escudándose de esas verdades”, agregó.

Si bien Mary Trump se mostró pesimista con la probabilidad de que el comité selecto tenga algún efecto sobre su tío, tiene un poco más de confianza en el peso combinado de las otras investigaciones sobre su conducta: las investigaciones locales y del estado de Nueva York sobre sus negocios, y la investigación en Georgia sobre sus esfuerzos por intimidar al secretario de estado de Georgia, Brad Raffensperger, para que “encontrara” votos adicionales para él.

“Muchos de estos otros casos están comenzando a llegar al... aspecto comercial de las investigaciones, por lo que las cosas se están acumulando de una manera que me preocupaba que nunca sucediera”, confesó. “Así que creo que con todas esas cosas juntas, incluso él no podrá fingir que nada de eso está sucediendo”.

Esas investigaciones, dijo, podrían ser lo que finalmente lo empujen a anunciar otra candidatura a la presidencia, incluso si no se encuentra bien física o psicológicamente.

“Si es capaz de soportarlo, ¿por qué no lo haría? Necesita [postularse] para seguir defendiéndose de todos estos desafíos, pero... en un mundo justo, todas estas cosas criminales y civiles se resolverían mucho antes de eso”, concluyó.

“Desafortunadamente, esa es una pregunta legítima, pero sigue siendo la incorrecta. La pregunta debería ser por qué se le debe permitir postularse”.