Anuncios
Elecciones México 2024:

Cobertura Especial | LO ÚLTIMO

En los barrios pobres escasea la leche descremada

Por Lisa Rapaport (Reuters Health) - Menos de la mitad de los comercios que venden leche en Estados Unidos ofrecen las versiones descremadas o reducidas en grasa y un estudio revela que esa opción saludable escasea aún más en los barrios pobres y de las minorías que tienden a registrar tasas más altas de obesidad. Los autores dicen que el problema reside, en parte, en que no hay supermercados en los barrios pobres y los habitantes concurren a comercios más pequeños, donde la leche es más costosa y no siempre se puede optar por las variedades descremadas. "Estos resultados indican que es más difícil y costoso seguir las recomendaciones alimentarias en los barrios donde la población tiene alto riesgo de obesidad y otros trastornos alimentarios, por lo menos en cuanto al consumo de leche", dijo el autor principal, Leah Rimkus, del Instituto para Políticas e Investigación de la Salud de University of Illinois, Chicago. El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por su sigla en inglés) recomienda que los niños pequeños consuman dos tazas diarias de leche descremada o reducida en grasa, y que los niños más grandes y los adultos ingieran tres tazas diarias. La leche y otros lácteos aportan calcio, potasio y vitamina D, que fortalecen los huesos, disminuyen la presión y reducen el riesgo de padecer cardiopatías y diabetes. La UDSA explica que la leche entera es rica en grasas saturadas que elevan el colesterol LDL o "malo" y, por lo tanto, el riesgo cardíaco. El equipo de Rimkus analizó el precio y la disponibilidad de la leche descremada y entera en 9226 comercios de 468 barrios de 46 estados durante la primavera y el verano del 2010, el 2011 y el 2012. El 9 por ciento de los comercios eran supermercados; el 7 por ciento, almacenes, y el 84 por ciento, lugares de venta especializados, como vinerías o minimercados, según publica el equipo en Journal of the Academy of Nutrition and Dietetics. El 81 por ciento de los comercios del país vendían leche entera, casi el doble que los que vendían leche descremada. El 99,9 por ciento de los supermercados, el 89 por ciento de los almacenes y el 78 por ciento de los comercios especializados tenían leche entera en stock. La versión descremada se podía comprar en los supermercados, que en el 98 por ciento de los casos contaba con stock suficiente, pero sólo estaba disponible en el 52 por ciento de los almacenes y en el 36 por ciento de las tiendas especializadas. Los autores utilizaron los datos del Censo para determinar la composición étnica y socioeconómica de cada barrio. La posibilidad de poder comprar cualquier tipo de leche en los barrios afroamericanos disminuía entre el 31 y el 67 por ciento, mientras que en otros barrios de las minorías se reducía entre un 26 y un 45 por ciento. Los previos de la leche descremada eran más altos en los barrios afroamericanos, lo que podría atribuirse en parte a la menor presencia de supermercados en la zona. El envase de 4 litros de leche descremada cuesta 50 centavos más en los barrios afroamericanos que en las comunidades blancas, mientras que la leche con 1 por ciento de grasa cuesta 38 centavos más. El USDA estima que 23,5 millones de estadounidenses viven en comunidades denominadas desiertos alimentarios porque sus habitantes no acceden fácilmente a supermercados que vendan frutas y verduras frescas y de calidad. Es común que el suministro local de alimentos dependa del nivel socioeconómico de los residentes, según dijo Adam Drewnowski, director del Centro de Nutrición para la Salud Pública de University of Washington, Seattle. Y un motivo para que los comercios de los barrios pobres no tengan un stock disponible de leche descremada es que no venden, según sostuvo Drewnowski, que no participó del estudio. FUENTE: Journal of the Academy of Nutrition and Dietetics, online 2 de junio del 2015.