El negocio de reparto de Alibaba es un punto ciego

Por Robyn Mak HONG KONG (Reuters Breakingviews) - La filial de reparto de Alibaba, actualmente en expansión, es un punto ciego desde le punto de vista financiero. El grupo de comercio electrónico chino es propietario de algo menos de la mitad de la empresa que gestiona miles de millones de paquetes al año. Sin embargo, Alibaba ha gastado más de 6.300 millones de dólares en tres años en transacciones vinculadas a la logística. Pero comprobar si estas inversiones tienen sentido estratégico es algo ajeno a los accionistas. El gigante del comercio electrónico valorada en bolsa en 148.000 millones de dólares conecta acompradores y vendedores en sus plataformas de Internet, pero no controla ni el envío ni la entrega de los productos. En lugar de ello, los comerciantes eligen de entre una lista enorme y fragmentada a la empresa china que almacena, transporta y entrega los artículos. Hace tres años Alibaba unió fuerzas con un grupo de socios para crear Cainiao Logistics, una sociedad de 5.000 millones de yuanes (787 millones de dólares) que se autodenomina plataforma de intercambio de información vinculada con las empresas de mensajería. Cainiao hace gala de una red de socios de 15 empresas con más de 1,5 millones de repartidores en todo el país. En el periodo de doce meses hasta marzo, esta red asegura haber entregado 8,6 millones de paquetes de las plataformas comerciales de Alibaba. A modo de comparación, un gigante como el estadounidense UPS entregó menos de la mitad de estos paquetes en todo el mundo en 2014. La participación del 48 por ciento de Alibaba supone que no controla formalmente Cainao. Sin embargo, el presidente de la sociedad conjunta, Judy Tong, es miembro de la poderosa comisión que nombra a la mayoría del consejo de administración del grupo de comercio electrónico. Por otro lado, Alibaba también ha estado inyectando dinero en otras empresas de logística. A principios de año invirtió 4.600 millones de dólares en Suning, una tienda de electrónica de consumo con 65 centros de distribución nacionales y regionales. También invirtió en Singapur Post y YTO Express, una empresa de mensajería que forma parte de la red de Cainiao. Y el año pasado compró participaciones en el grupo de electrónica chino Haier y en su filial logística, así como en un operador de grandes almacenes cuya matriz es el segundo accionista de Cainiao. En total, Alibaba ha gastado al menos 6.300 millones de dólares, según cálculos de Breakingviews. Esto es importante porque la empresa fundada por Jack Ma ha convertido en virtud un modelo de negocio ligero en activos. No tener existencias y externalizar la mensajería a otros proveedores se ha demostrado lucrativo. El margen de beneficio neto ajustado de Alibaba en el trimestre que finalizó en junio fue del 47 por ciento. Esto contrasta con su rival chino JD.com, que ha adoptado un modelo similar al de Amazon que requiere mantener un gran inventario y construir una red de distribución propia. El grupo de 36.000 millones de dólares aún tiene que ser rentable. Sin embargo, hay señales de que llevar los paquetes a los consumidores de manera rápida y fiable es un campo de batalla cada vez más importante. JD.com ofrece entregas en el mismo día o al día siguiente de la compra en más del 80 por ciento de los pedidos, mientras que Alibaba quiere poder hacer entregas en el día siguiente a la compra en 50 ciudades a finales de año. Cainiao ha dicho que planea invertir 100.000 millones de yuanes en los próximos años y quiere quintuplicar el espacio de almacenamiento hasta los 5 millones de metros cuadrados el año que viene. Mientras tanto, Alibaba y JD.com están batallando en segmentos en los que el tiempo de entrega es clave como los alimentos frescos. Este año, Cainiao comenzó un servicio para repartir en el día alimentos del supermercado online de Alibaba en Pekín y Shanghai. JD.com anunció una inversión de 700 millones dólares en un operador de supermercados en agosto. La última palabra de moda en el comercio electrónico -del online al offline- también depende de una entrega rápida y confiable. Por su naturaleza de inversor minoritario, Alibaba no tiene que desglosar los resultados financieros de sus sociedades de logística y no está claro a partir de los informes financieros del grupo si Cainiao está generando ingresos importantes o tiene beneficios. Con una caja neta de más de 16.000 millones de dólares, Alibaba puede permitirse el lujo de hacer apuestas audaces en logística y otras áreas. El vicepresidente ejecutivo Joe Tsai ha comparado el frenesí comprador del grupo con una partida de ajedrez coordinada. A pesar de ello, estas empresas son una carga financiera: si Alibaba tuviese que financiar la expansión prevista de Cainao de 100.000 millones de yuanes según su participación actual, la inversión equivaldría a la caja operativa neta que tuvo el grupo en el ejercicio cerrado el pasado marzo. En un negocio tan intensivo en capital, repartir la carga con otros inversores puede tener lógica financiera. Las asociaciones de Cainiao permiten que Alibaba pueda descargar parte del riesgo de ser dueño de almacenes y centros de distribución, o de emplear a más de un millón de mensajeros. Pero los accionistas de la compañía sólo pueden adivinar el verdadero coste, o qué tipo de rentabilidades podrían generar las inversiones. Los temores a una desaceleración de la economía china se han llevado por delante la mitad del valor en bolsa de Alibaba desde noviembre de 2014. Cualquier indicio de que los márgenes de la compañía son menos saludables de lo que parecen supondría un desafío a la fe de los inversores. Pero incluso cuando la entrega se convierte en algo cada vez más importante, los accionistas de Alibaba sólo pueden adivinar cuánto cuesta.