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El muro fronterizo de Trump borrará un cementerio histórico de Texas donde descansan veteranos de guerra

Estela Aguilar Hernandez busca una tumba en el cementerio Santa Rosalia Cemetery ie Brownsville, Texas, en 2017. Nathan Lambrecht/The Monitor via AP)
Estela Aguilar Hernandez busca una tumba en el cementerio Santa Rosalia Cemetery ie Brownsville, Texas, en 2017. Nathan Lambrecht/The Monitor via AP)

Los lugareños que fueron enterrados en el cementerio histórico de Santa Rosalía, en la ciudad fronteriza de Brownsville, Texas, están a punto de ser abandonados y borrados del recuerdo de sus familiares por la construcción del muro fronterizo entre México y Estados Unidos.

La pared divisoria que pretende cubrir más de 3,000 kilómetros de frontera entre ambos países suma ahora un nuevo conflicto a su polémica construcción, uno más allá de si es o no una solución a la inmigración ilegal.

Cecilia Hernandez lleva flores las tumbas de sus familiares en el cementerio Santa Rosalía (Nathan Lambrecht/The Monitor via AP)
Cecilia Hernandez lleva flores las tumbas de sus familiares en el cementerio Santa Rosalía (Nathan Lambrecht/The Monitor via AP)

El muro también ocasionará, según han advertido varios expertos, grandes impactos en las rutas migratorias y hábitats de múltiples especies -entre ellas las mariposas monarca-, además de trastocar los escurrimientos de las lluvias que podrían provocar mayores inundaciones

Pero ahora, según un reporte de Fox News, el foco de los conflictos por el muro gira hacia el cementerio de Santa Rosalía, en Texas, erigido en el siglo XIX por una comunidad de rancheros que se asentó en la frontera entre Estados Unidos y México. Allí reposan aún una docena de veteranos estadounidenses.

El cementerio se ubica más allá de una sección del muro fronterizo, en una zona conocida por los locales como “tierra de nadie”. Solo una simple cerca lo separa de los grandes ranchos de la zona, aunque existe un paso abierto que permite a la gente ir a visitar las tumbas.

Pero en los próximos meses ese paso será cerrado, según un contrato que adjudicó el pasado año Aduanas y Protección Fronteriza para que se construya en el Sector del Valle del Río Grande, donde se ubica el cementerio, una puerta del muro fronterizo.

Para JJ González, un lugareño que encontró allí la tumba de su abuela, esa puerta será como una especie de tiro de gracia al cementerio, ya que será vista como un freno para sus visitantes.

“Las personas con las que he hablado, vieron el muro y creen que ya no pueden volver aquí. Creen que estamos en México y aún estamos en Estados Unidos”, dijo González. Insiste en que “si la puerta sube, la gente no vendrá [al cementerio] porque no saben que pueden venir”.

El cementerio de Santa Rosalía ha estado bastante olvidado y mal atendido desde hace mucho tiempo, pero desde que González descubrió dónde estaban los restos de su abuela y otros familiares suyos, hace un año y medio, decidió empezar a limpiar el lugar y darle el cuidado que merecen los que allí descansan.

“No estaba bien que solo sus tumbas estuvieran limpias y que las otras fueran descuidadas “, dice sobre su misión de cuidar el vetusto cementerio, al que se han sumado otros voluntarios.

En ese proceso de darle mantenimiento a la propiedad descubrieron las tumbas de dos docenas de veteranos. González siente que es muy triste encontrar las tumbas olvidadas y que pronto podrían desaparecer completamente por el muro.

“Me enseñaron que debemos respetar y recordar siempre a nuestros antepasados. A pesar de que solo hay una lápida de ellos, aún tienes que recordar su memoria”, argumenta González.

Eugene Fernández, un comisionado de la Comisión Histórica del Condado de Cameron, dijo que cuando las familias se fueron, los recuerdos del lugar comenzaron a desvanecerse. “La gente sigue adelante y se olvida de ellos. Ese es el factor que es importante en la ecuación”.

Pero Fernández tampoco está de acuerdo con que la puerta de la frontera impida que las personas lo visiten. Debido a que el cementerio se considera propiedad privada, las autoridades locales no están obligadas a cuidarlo.

Fernández cree que la labor de JJ González ha sido crucial para revivir el cementerio histórico de Santa Rosalía, que ahora choca con el muro fronterizo, que lo podría borrar completamente de la geografía, junto con los muertos que allí descansan.