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El oxígeno aumenta inesperadamente en Marte y no sabemos por qué

El Curiosity detecta variaciones inexplicables del oxígeno en Marte
El rover Curiosity detecta variaciones inexplicables del oxígeno en Marte

La atmósfera de Marte se compone mayoritariamente de dióxido de carbono (un 95%), también existen algunas trazas de otros elementos como el nitrógeno o el argón, y entre ellos, una pequeña cantidad de oxígeno, apenas un 1,2%. El rover Curiosity se lanzó en 2011 y durante todos estos años ha estado realizando un silencioso, pero efectivo, trabajo en la superficie del planeta rojo… lo interesante es que no solo ha explorado la superficie de Marte, el ingenio móvil de NASA también incorpora diferentes instrumentos para medir los gases que componen el aire del planeta, y a la sorpresa de la variación del metano, tenemos que unir ahora un factor con el que nadie había contado: el oxígeno.

En el interior del Curiosity se encuentra SAM (Sample Analysis at Mars), un pequeño pero completo laboratorio, de tan solo unos 40 kilos y con el tamaño de un simple microondas, compuesto por un cromatógrafo de gases (que separa los diferentes gases para poder identificarlos), un espectrómetro de masas (capaz de detectar los elementos analizados como nitrógeno, fosfóro, azufre, oxígeno, etc), un espectrómetro láser y un sistema propio de análisis de muestra tan sensible y preciso que es capaz de detectar menos de una parte por billón de un compuesto orgánico.

El instrumento SAM, en el interior del Curiosity, es el responsable de la detección y análisis de gases en el aire de Marte | imagen NASA
El instrumento SAM, en el interior del Curiosity, es el responsable de la detección y análisis de gases en el aire de Marte | imagen NASA

Aquí llega la parte interesante… Después de seis años de “olfateo” y estudio de los componentes de la atmósfera marciana, SAM también ha descubierto que con el tiempo, el oxígeno se comporta de una manera que no puede ser explicada por ningún proceso químico que los científicos entiendan actualmente. Dicho de otra manera: Al medir la relación de los gases con el CO2, que predomina en la atmósfera marciana, encontraron que el argón y el nitrógeno mantenían una concentración estable durante todo el año. Sin embargo, el oxigeno aumentaba hasta un 30% en verano y luego volvía a caer a los niveles pronosticados para otoño. Este proceso se repite cada año.

Para añadir aún más misterio, los datos indican que el aumento de la cantidad de oxígeno en la atmósfera de Marte no es siempre el mismo sino que varía de un año a otro.

Después de estudiar este sorprendente fenómeno cíclico, los investigadores han publicado algunas de sus conclusiones en el Journal of Geophysical Research y consideran que se necesitaría cinco veces más agua sobre Marte para producir el oxígeno adicional que SAM está detectando. En cuanto a la disminución repentina del gas, la causa debería ser la radiación solar; pero concluyeron que serían necesarios al menos 10 años para que el oxígeno desaparezca a través de este proceso.

Los datos del instrumento SAM son muy fiables por lo que los investigadores se encuentran ahora con el rompecabezas de intentar comprender esa variabilidad del oxígeno en Marte… su primera suposición es que debe tratarse de alguna “fuente química” que aún no entienden y que ni siquiera pueden localizar. Otra tentadora idea que ronda las cabezas de los científicos es relacionar la variabilidad que se ha encontrado en el metano marciano con esta aparición y desaparición repentina del oxígeno, pero tampoco se conoce qué mecanismos estarían implicados.

Los misterios marcianos demandan, hoy más que nunca, una misión tripulada y científica al lugar… esperemos que, en un futuro muy cercano, podamos estudiar in situ estos problemas.

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Referencias científicas y más información:

Trainer, Melissa G., et al. «Seasonal Variations in Atmospheric Composition as Measured in Gale Crater, Mars». Journal of Geophysical Research: Planets, DOI:10.1029/2019JE006175.