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El gobierno de Veracruz vs Animal Político: la estrategia para tapar un fraude

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El periodismo tiene muchos caminos para llegar a la verdad. Recientemente, el periódico electrónico Animal Político publicó una investigación relacionada con el tema de la corrupción, operada por una red de colaboradores cercanos al gobernador de Veracruz Javier Duarte. El encabezado del reportaje fue: “Desaparece el gobierno de Veracruz 645 millones de pesos; entrega el dinero a empresas fantasma”.

El reportaje de Animal Político documentó con todo detalle cómo unos cuantos funcionarios, del grupo político del gobernador Duarte, crearon 21 empresas a las que les otorgaron, entre 2012 y 2013, contratos, vía adjudicaciones directas o licitaciones cerradas que sumaron 645 millones 693 mil pesos.

Para crear las 21 empresas fueron utilizados los nombres y domicilios de personas humildes a las que les fueron ofrecidos “apoyos” para que firmaran documentos que no leyeron o no comprendieron debido a su escasa escolaridad. Sus domicilios están ubicados en colonias sin servicios urbanos como pavimento y drenaje. Algunas casas tienen techo de cartón y piso de tierra. Unos son vendedores de todo tipo de artículos, otros taxistas.

Ahora que Animal Político destapó la cloaca de corrupción, éstos “empresarios” se enteraron de que su nombre y domicilio sirvieron para que los funcionarios del gobierno de Javier Duarte ganaran muchos millones de los que ellos no vieron ni verán un peso.

La creación de las 21 empresas fue posible por la complicidad de 12 notarios públicos que dieron “fe” de la “legalidad” de la información que les fue presentada para dar de alta a las empresas fantasmas que inmediatamente desaparecieron, como lo demostró Animal Político. Los Notarios están relacionados con los funcionarios públicos por haber sido dirigentes o legisladores del PRI y en su mayoría recibieron su nombramiento de manos de los dos últimos gobernadores.

Los funcionarios del gobernador Duarte emprendieron una estrategia de información para negar lo que comprueba el reportaje de Animal Político. Para algunos de ellos las empresas si existen, están en regla y al ser fundadas cumplieron con toda la normatividad.

El periódico electrónico estableció que los notarios no respetaron los procedimientos y se “saltaron” requisitos que marca la ley. No verificaron la autenticidad de los documentos que les fueron presentados, tampoco constataron que estuvieran presentes los “interesados” para firmar el acta constitutiva de la empresa. Algunos no sabían lo que firmaban y otros no firmaron las actas.

Al ser revisadas las firmas de las actas constitutivas de las empresas el experto grafólogo René Fager concluyó que, de una muestra de ocho que fueron seleccionadas, “en todos los casos hay irregularidades: las firmas que en teoría deberían pertenecer a la misma persona en los documentos, en realidad fueron hechas por personas distintas.

“Las firmas no fueron hechas por la misma persona o no es una firma que le pertenezca a la persona. Una firma es una identidad personal. Hay gente que tiene dificultad para hacer su firma igual, sin embargo, hay una serie de rasgos de identificación que no cambian y que tienen que ver con la personalidad. Son esos rasgos los que identifican que es la misma persona, pero en estas firmas esos rasgos no se repiten.

El gobierno de Javier Duarte actúa en la línea de desacreditar el reportaje de Animal Político y lo hace a través de Alberto Silva Ramos, coordinador general de Comunicación Social que mediante una carta dice que todas las empresas señaladas en el reportaje con las que trabaja el Gobierno de Veracruz están debidamente registradas y las licitaciones se realizaron conforme a la ley. Se encuentran en un padrón de proveedores y contratistas y cumplieron con los requisitos de entrega de acta constitutiva, alta ante la secretaría de Hacienda, comprobante de domicilio y estados financieros auditados, entre otros.

“En cuanto a los bienes y productos que se compraron a estas empresas, el gobierno señala que éstas cumplieron con las metas de los contratos y que cuenta con fotografías que demuestran que los bienes y productos contratados fueron aplicados.”

Aunque la SEDESOL de Veracruz afirma que las tiendas comunitarias en las que se dice que fueron distribuidos los artículos no existen.

La estrategia para desacreditar el reportaje de Animal Político también incluyó apoyarse (aunque muchos opinan que más bien lo que hicieron fue “disuadir”) a uno de los autores del reportaje, cuyos primeros pasos de investigación fueron dados por Víctor Hugo Arteaga y fue profundizado y culminado por Arturo Ángel.

El contralor del estado de Veracruz habló con Víctor Hugo Arteaga y dos días después, en el programa de radio de Alejandro Cacho en MVS, pidió que su nombre fuera retirado del reportaje. “El gobierno de Veracruz solicitó a varios espacios radiofónicos que se entrevistara a Víctor Hugo para que se deslindara de la investigación.” Su nombre fue retirado del reportaje, era un reconocimiento por su colaboración.

El reportaje de Animal Político es contundente en el manejo de sus fuentes de información. Su documentación es formal y el Gobierno de Javier Duarte no ha logrado desacreditarlo, ha quedado en evidencia su desastrosa gestión de gobierno.

De hecho, una investigación iniciada por el Servicio de Administración Tributaria a raíz del reportaje ha revelado, de inicio, que Animal Político se quedó corto:

“El Servicio de Administración Tributaria entregó este lunes 30 de mayo su respuesta a Animal Político sobre la investigación del desvío de fondos públicos a través de empresas fantasma en Veracruz. Empresas cuyos “dueños” y “socios”desconocían que lo eran y cuyos domicilios fiscales se encuentran en zonas marginadas, y a las cuales el gobierno de Javier Duarte entregó contratos millonarios para proveer cobijas, útiles escolares y zapatos a una población vulnerable que nunca los recibió.

Y su respuesta ha sido contundente: todo lo documentado por el reportero Arturo Ángel es cierto. Y nos quedamos cortos. No son 645 millones de pesos, pues el desvío podría alcanzar más de 3 mil millones. Tampoco son 21 empresas sino 26. Y qué decir de las dependencias involucradas: no son 4 sino 11. Finalmente no son 12 los notarios que “dieron fe” de las irregularidades, sino 16.

El SAT inició su investigación sobre el tema el pasado 24 de mayo, después de conocer y revisar la primera parte del reportaje publicado por Animal Político. De oficio decidió empezar su propia indagatoria para corroborar lo publicado y encontró que sí, que hay mucha tela de dónde cortar.

De lo que el SAT ha encontrado de manera preliminar hasta ahora destaca que 22 de las 26 compañías se crearon durante el sexenio de Duarte, 24 no tienen un solo empleado registrado (¡ni uno solo!) y una sola de ellas reporta ingresos por más de mil millones de pesos. Y, efectivamente, los domicilios fiscales de la mayoría de estas empresas millonarias se encuentran en barrios populares.” (Extracto de la columna La sartén por el mango, en Animal Político, publicada el 31 de mayo de 2016)

En el contexto electoral la investigación de Animal Político fue aprovechada por los candidatos de los partidos opositores al PRI para confirmar su discurso de que, de llegar al poder, buscaran encarcelar al gobernador Javier Duarte. Según dijo Felipe Calderón, en el cierre de campaña del PAN “Duarte entregó Veracruz al narcotráfico”. ¿Usted qué opina?


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