Yahoo Noticias El gesto solidario de un millonario que abrió su mansión a 70 niños sin hogar afectados por el huracán Irma
A veces, la riqueza no se mide en dinero sino en apertura de corazón.
Muchos miles de personas se han quedado sin hogar, de modo temporal o duradero, a causa del azote del huracán Irma en la Florida y el Caribe, y mucho tiempo pasará hasta que todos puedan volver a su vivienda o logren reconstruirla a cabalidad.
¿Pero qué pasa con los que, antes incluso de Irma, carecían de un hogar familiar, lo tenían solo provisionalmente o estaban en busca de uno?
Para algunos de ellos ha surgido una opción singular, en especial para 70 niños en condición de acogida en Florida que resistieron en refugios el paso del huracán. Se trata de niños bajo el estatus de ‘foster care’ (menores que en Estados Unidos por alguna razón carecen del apoyo de sus padres y viven con otras personas o comunidades, por lo general por decisión de una corte o de autoridades de protección infantil) que no pudieron regresar a su hogar de acogida por carecer éste de electricidad y servicios a causa de Irma.
Ante esa situación, el millonario Marc Bell –expropietario de la revista Penthouse– y su esposa Jennifer decidieron prestar ayuda y, como narró el periódico Miami Herald, ahora albergan a esos 70 menores en su mansión de 27,000 pies cuadrados (unos 2,500 metros cuadrados) valuada en 30 millones de dólares y ubicada en Boca Ratón, Florida.
Bell no es ajeno a la problemática de los niños de acogida. De acuerdo a la televisora CBS12, el millonario es miembro del consejo de SOS Children’s Village Florida, la organización no lucrativa que opera una comunidad de casas que eran hogar de esos 70 menores y que, a causa de los efectos de Irma, se quedaron sin electricidad, sufrieron daños y no pudieron albergar a los niños. Por añadidura, los chicos debieron dejar el refugio donde se encontraban sin tener a donde ir.
Por ello, el problema era conocido y cercano para Bell. Entonces, cuando recibió una llamada de SOS Children’s Village Florida para informarle que necesitaban ayuda porque los menores habían sido echados del refugio y no tenían en donde vivir, él contestó “tráiganlos acá”.
Los menores realmente necesitaban albergue pues, como el propio Bell dijo a CBS12, “estaban hambrientos, estaban cansados. Ellos vivieron en un gimnasio por una semana…” y por esos siete días ni siquiera pudieron ducharse.
Ahora, como invitados en la mansión de Bell, las niñas reciben manicuras, artistas han acudido a entretenerlos durante la cena y todos pueden disfrutar de una amplia piscina con cascadas, películas en grandes pantallas, cancha de basquetbol, gimnasio, biblioteca, juegos diversos y muchas otras comodidades.
Aunque aún no se ha determinado cuánto tiempo los menores permanecerán en la casa de Bell, el contraste entre la situación desesperada en la que se encontraban y su momento actual es singular. En tanto, para ayudar a reconstruir las casas de la comunidad SOS Children´s Village donde vivían esos 70 menores, se ha abierto una página de GoFundMe que ha recaudado ya casi 75.000 dólares.
Tras la furia de Irma, estos 70 chicos han gozado de un torbellino de solidaridad.
